Iron¨ªas sobre la prensa

I. C. / A. C. Cuando una personalidad como el presidente del Gobierno viaja por un pa¨ªs, como EE UU, en el que debido a la diferencia horaria el d¨ªa acaba despu¨¦s que en Espa?a, la prensa suele anticipar sus actividades de la tarde o de la noche bas¨¢ndose, generalmente, en lo que anuncian su portavoz y sus asesores.

Eso ocurri¨® el lunes, cuando, para los peri¨®dicos que se pusieron a la venta el martes, los corresponsales destacados en Washington escribieron que en la cena que ofrecer¨ªa a altos funcionarios y empresarios norteamericanos, Gonz¨¢lez hablar¨ªa de su reforma laboral y, en general, de sus intentos para hacer m¨¢s competitiva la econom¨ªa.

Antes de acudir a la cena, sobre las dos de la madrugada del martes en Espa?a y las ocho de la tarde del lunes en Washington, Gonz¨¢lez ley¨® las primeras ediciones de los peri¨®dicos, en las que se adelantaba a grandes rasgos sus palabras en la velada que a¨²n no hab¨ªa empezado.

El truco period¨ªstico le brind¨® la oportunidad de ironizar sobre los m¨¦todos de trabajo de la prensa. "He visto en la prensa de ma?ana el relato de lo que esta noche les iba a decir", coment¨® divertido Gonz¨¢lez.

"O hago quedar bien a la prensa de mi pa¨ªs, con lo cual me tratar¨¢n bien ma?ana, y les digo lo que la prensa dice que voy a decir, o bien les digo lo que se me ocurra y corro el grave riesgo de que alguien quede mal" dijo Gonz¨¢lez, quien a?adi¨®. "Y me temo que soy yo". Para no quedar mal dijo exactamente lo que publicaban los peri¨®dicos.