El Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos precisa un cr¨¦dito de 150.000 millones de la banca para sanear Banesto
El Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos en Establecimientos Bancarios (FGD) tendr¨¢ que pedir un cr¨¦dito a la banca de 150.000 millones de pesetas para hacer frente al saneamiento de Banesto. El nuevo equipo gestor todav¨ªa no se ha puesto en contacto con los directivos del FGD, pero ha hecho saber al Banco de Espa?a -cuyo subgobernador preside esta instituci¨®n- su intenci¨®n de vender cr¨¦ditos morosos al fondo por un valor superior a esos 150.000 millones de pesetas. En sus contactos con la autoridad monetaria, Alfredo S¨¢enz ha propuesto tambi¨¦n crear una sociedad de cartera, en la que participe toda la banca, para cubrir la ampliaci¨®n de capital prevista. Este proyecto ha causado un cierto, recelo en el sector.
La discreci¨®n mostrada por el presidente de Banesto, Alfredo S¨¢enz, en la reuni¨®n del jueves de su nuevo consejo de administraci¨®n no ha impedido que la banca vaya tomando posiciones ante los primeros esbozos de plan de saneamiento. S¨¢enz ha mantenido ya varias reuniones con el gobernador y el subgobernador del Banco de Espa?a, Luis ?ngel Rojo y Miguel Mart¨ªn, as¨ª como contactos con sus colegas banqueros, para tantearles sobre sus ideas para reflotar el banco. Y la respuesta no se ha hecho esperar.La banca -tanto los grandes, como los medianos y peque?os- ha mostrado su preocupaci¨®n sobre una colaboraci¨®n que consideran "excesiva para los tiempos que corren". No se trata s¨®lo de su resistencia a asumir un sacrificio que corresponde a los accionistas de Banesto, sino tambi¨¦n de sus dificultades para hacer frente a demasiados fondos en un ejercicio que se presenta complicado, como el de 1994.
Aunque el gabinete de crisis de Banesto sigue sin poder cuantificar las necesidades de saneamiento del banco, uno de los apartados fijos del plan de reflotamiento es el de la venta de cr¨¦ditos morosos al FGD. Falta por determinar la cuant¨ªa de ¨¦stos. Sin embargo, fuentes bancarias consultadas aseguran que en ning¨²n caso ser¨¢n inferiores a 150.000 millones de pesetas y que la calidad de los cr¨¦ditos que se traspasen al fondo ser¨¢ p¨¦sima, como ha sucedido en todos los casos de crisis bancaria.
Escasez de patrimonio.
Dando por buena esa cifra de 150.000 millones de pesetas -que podr¨ªa ser superior, dependiendo de los resultados de la actual investigaci¨®n-, fuentes oficiales han se?alado a este peri¨®dico que el FGD tendr¨ªa que acudir a sus socios -toda la banca- para conseguir ese dinero. El Banco de Espa?a no puede ya anticipar dinero al FGD y la situaci¨®n patrimonial de la instituci¨®n no es nada boyante.
El Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos en Establecimientos Bancarios no ha conseguido su equilibrio patrimonial hasta entrado 1993. Desde que se creara, en marzo de 1980, ha tenido que hacer frente a 27 casos de crisis bancarias -los bancos de Rumasa fueron saneados por las grandes entidades, sin pasar por el FGD-, aportando fondos por valor de 616.263 millones.
Las aportaciones de la banca privada (305.000 millones) y el Banco de Espa?a (210. 000 millones) y la recuperaci¨®n de parte de los fondos concedidos a los bancos en crisis han permitido al FGD iniciar este ejercicio con un fondo de 30.000 millones. Una cantidad insuficiente a todas luces para hacer frente al problema de Banesto. Las aportaciones de este a?o, que recibir¨¢n en febrero, ascender¨¢n a poco m¨¢s de 50.000 millones.
En estas circunstancias, todas fuentes bancarias consultadas daban por hecho que el FGD tendr¨¢ que acudir a sus socios en busca de dinero fresco para Banesto. Y para eso, hay dos posibilidades: anticipos o cr¨¦ditos de la banca privada. Entre estas dos opciones, los bancos prefieren la segunda, porque no les supone una reducci¨®n de sus balances. Estos cr¨¦ditos se conceder¨ªan al tipo de inter¨¦s oficial que rija en el momento del desembolso.
Adem¨¢s de esa aportaci¨®n de dinero al FGD, el nuevo equipo de Banesto pretende que la banca participe tambi¨¦n en la ampliaci¨®n de capital necesaria para relanzar la entidad. Una vez que se determine la cuant¨ªa de la reducci¨®n de capital -Alfredo S¨¢enz propone un 30% y la banca habla de un m¨ªnimo del 50%- habr¨¢ que decidir c¨®mo y por cu¨¢nto se realiza la ampliaci¨®n posterior. Y ya en el c¨®mo se han planteado problemas.
La propuesta de S¨¢enz es crear un sociedad de cartera en la que participen todos los bancos espa?oles en proporci¨®n a su volumen de dep¨®sitos. Una idea que ya se ha encontrado con un cierto recelo por parte del Banco de Espa?a y, sobre todo, por parte de algunos de los m¨¢s importantes banqueros. El problema es determinar qui¨¦n o qui¨¦nes ser¨¢n los accionistas estables del nuevo banco.
Si toda la banca es accionista de Banesto, se plantean problemas de competencia. Y si es solamente una entidad la que acude a la ampliaci¨®n de capital, hay que determinar cu¨¢les pueden y quieren hacerlo. Todas las miradas del sector bancario est¨¢n en el BBV, a quien fue encomendado el reflotamiento en la figura de uno de sus vicepresidentes. Sin embargo, fuentes del BBV han insistido en que nadie les ha ofrecido hacerse cargo de la ampliaci¨®n de capital de Banesto.
Del resto de los grandes, el Santander tendr¨ªa capacidad financiera, aunque tendr¨ªa problemas para prescindir de parte de su equipo directivo; Argentaria ser¨ªa recibida con recelo, por ser semip¨²blico; el BCH no est¨¢ en condiciones de hacerse cargo de una operaci¨®n de esa magnitud -le quedan dos o tres a?os para digerir la fusi¨®n-, y el Popular no tiene volumen para ello.
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