El clima del futuro tendr¨¢ cambios bruscos y violentos
He aqu¨ª el pron¨®stico del tiempo a largo plazo. Durante los pr¨®ximos siglos, la atm¨®sfera se calentar¨¢ gradualmente, en parte gracias a actividades humanas tales como la quema de combustibles f¨®siles. En este periodo, el clima ser¨¢ cada vez menos predecible y m¨¢s violento. Luego, en el corto espacio de una vida humana, las temperaturas bajar¨¢n en picado, en anuncio de una nueva era glacial, pero tambi¨¦n es posible que suban desmesuradamente. El mundo c¨®modo y predecible que conocemos y damos por sentado habr¨¢ terminado.
Las ¨²ltimas investigaciones indican que un periodo tan estable como el actual es algo raro en la vida del planeta, que a ¨¦l puede deberse la existencia del ser humano y su civilizaci¨®n, y tambi¨¦n que peque?as variaciones en el flujo de agua dulce a los oc¨¦anos, como las que pueden proceder del derretimiento de los casquetes polares por el calentamiento global, dan lugar a medio plazo a cambios salvajes en el clima. ?ste es el panorama que pinta la investigaci¨®n realizada por Andrew Weaver y Tertia Hughes, de la universidad canadiense de Victoria, en un informe publicado en la revista Nature. Al llegar m¨¢s agua al mar se incrementar¨¢ el ritmo de evaporaci¨®n para compensarlo. Esto explica el creciente n¨²mero de tormentas en un mundo invernadero. Pero esta situaci¨®n contiene el germen de su propia destrucci¨®n. M¨¢s tarde o m¨¢s temprano, el ciclo de agua demasiado caliente se interrumpir¨¢ de forma brusca. El traba o de Weaver y Hughes procede de un modelo matem¨¢tico de circulaci¨®n oce¨¢nica que simula las corrientes a gran profundidad en los oc¨¦anos Pac¨ªfico y Atl¨¢ntico, al que se a?ade un ramalazo azaroso en el ritmo de la llegada de agua dulce a los oc¨¦anos.
Cinta transportadora
Una caracter¨ªstica clave del Atl¨¢ntico norte es el flujo de agua templada de superficie desde los tr¨®picos a latitudes m¨¢s septentrionales y fr¨ªas, provocando en las costas atl¨¢nticas un clima m¨¢s templado que el del interior continental. Cuando se enfr¨ªa, el agua se hace m¨¢s densa, de forma que se hunde hacia el fondo. Como un nadador que llega al final de la piscina, se da la vuelta y se dirige hacia el Sur en forma de corriente profunda y salina. La salinidad juega un papel importante en este proceso, conocido como cinta transportadora oce¨¢nica, porque el agua salada es m¨¢s densa que el agua dulce.Si aumentara el agua dulce en el Atl¨¢ntico norte, en vez de hundirse permanecer¨ªa durante mas tiempo cerca de la superficie. La profunda corriente salina se har¨ªa m¨¢s d¨¦bil y con ella el transporte hacia el Norte de agua caliente superficial. Desprovistas de este calor oce¨¢nico, las costas se enfriar¨ªan. Este proceso continuar¨ªa hasta que el hemisferio norte se hiele, y entonces el agua superficial se enfriar¨ªa tanto que se hundir¨ªa, fuera o no salina.
Entonces el agua templada volver¨ªa al Norte y el hielo se fundir¨ªa, aunque un flujo repentino de agua de deshielo glacial puede retrasar el proceso de calentamiento, lo que explicar¨ªa las pruebas existentes de qu¨¦ las eras glaciales se terminan como a saltos, con periodos intermedios de vuelta a las condiciones glaciales.
La cinta transportadora del Atl¨¢ntico es una buena explicaci¨®n, especialmente para los ciclos clim¨¢ticos que han dominado el hemisferio norte durante los dos ¨²ltimos millones de a?os -durante los cuales largos periodos fr¨ªos, cada uno de los cuales dur¨® unos 100.000 a?os, fueron salpicados por intervalos cortos y calientes como el actual, de entre 10.00 y 30.000 a?os-.
Recientes perforaciones en el hielo perpetuo de Groenlandia hasta 3.029 metros de profundidad han se?alado que el anterior periodo templado, que dur¨® entre 135.000 y 115.000 a?os, estuvo salpicado por cambios repentinos de inesperada virulencia. Esto est¨¢ lejos de la impresi¨®n de estabilidad resultante de todas las investigaciones previas, y los resultados causaron sensaci¨®n, aunque otro sondeo similar a pocos kil¨®metros mostr¨® discrepancias con el primero. En este momento del proceso entran Weaver y Hughes. Su modelo de ordenador est¨¢ de acuerdo con los datos obtenidos del primer sondeo citado de una forma verdaderamente espectacular. Peque?as fluctuaciones en la entrada de agua dulce no influyen para nada en la estabilidad semejante a la actual o la predicha por el modelo de cinta transportadora. Pero perturbaciones mayores en el ciclo del agua llevan a oscilaciones salvajes entre tres estados estables: caliente, como el ¨²ltimo; fr¨ªo, como la era ¨²ltima era glacial, y otro intermedio, como el actual.
Nature.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.