El Gobierno ceder¨¢ competencias exclusivas del Estado a cuatro comunidades aut¨®nomas
Felipe Gonz¨¢lez quiere culminar el proceso auton¨®mico. Para ello ha dado luz verde al Gobierno para delegar competencias exclusivas del Estado a las comunidades aut¨®nomas de v¨ªa r¨¢pida (Catalu?a, Pa¨ªs Vasco, Galicia y Andaluc¨ªa). Esta decisi¨®n se une al estudio de un plan para articular la representaci¨®n de las autonom¨ªas en las instituciones de la Uni¨®n Europea, una reclamaci¨®n planteada hace pocas semanas por el Gobierno vasco y cuyo conocimiento origin¨® un esc¨¢ndalo. Entre las competencias exclusivas del Estado delegables figuran los puertos, aeropuertos, costas, la gesti¨®n del r¨¦gimen econ¨®mico de la Seguridad Social y el Instituto Nacional de Empleo (Inem).
Esta decisi¨®n se adoptar¨¢ una vez que, antes de un mes, se haya reunido la Comisi¨®n Delegada de Asuntos Auton¨®micos, una especie de peque?o Consejo de Ministros que preside el vicepresidente del Gobierno, Narc¨ªs Serra, y al que acuden los titulares de las carteras afectadas por cuestiones territoriales. La comisi¨®n estudiar¨¢ un informe en el que se ordenan las competencias del Estado en tres grupos: las transferibles, las intransferibles porque afectan al coraz¨®n del Estado y las que, siendo exclusivas del Estado, son transferibles por delegaci¨®n.A esta decisi¨®n de Gonz¨¢lez responde la ronda de conversaciones que ha abierto con los presidentes auton¨®micos de las comunidades de v¨ªa r¨¢pida, reguladas por el art¨ªculo 151 de la Constituci¨®n. En las ¨²ltimas dos semanas han pasado por La Moncloa, para entrevistarse con Gonz¨¢lez, los presidentes de Andaluc¨ªa, Manuel Chaves, y de Galicia, Manuel Fraga, mientras el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, lo hac¨ªa con Narc¨ªs Serra. En los pr¨®ximos d¨ªas, Gonz¨¢lez. se entrevistar¨¢ con el presidente de la Generalitat catalana, Jordi Pujol.
Todos los presidentes auton¨®micos han reclamado al jefe del Gobierno paquetes de transferencias que en unos casos aparecen claramente establecidos en sus estatutos de autonom¨ªa y en otros desbordan sus l¨ªmites. Por ejemplo, entre las transferencias reclamadas por la Xunta de Galicia figuran los puertos, que es una competencia exclusiva del Estado. Otro tanto sucede con algunas de las 54 competencias recogidas en el paquete reclamado por el Gobierno vasco. Tal es el caso de los aeropuertos.
Reclamaciones
La Comisi¨®n Delegada de Asuntos Auton¨®micos decidir¨¢, a partir de estas reclamaciones, qu¨¦ competencias son f¨¢cilmente transferibles, cu¨¢les son intransferibles y las que pueden delegarse. A este fin, el Gobierno utilizar¨¢ el mecanismo del art¨ªculo 150.2 de la Constituci¨®n, que permite delegar competencias exclusivas del Estado a las comunidades. Entre las competencias exclusivas del Estado que pueden delegarse figuran la gesti¨®n del r¨¦gimen econ¨®mico de la Seguridad Social; los puertos, aeropuertos y costas, y la ordenaci¨®n de la pesca, entre las m¨¢s significativas. Con ello podr¨ªa satisfacer numerosas reclamaciones de gobiernos aut¨®nomos como los de Andaluc¨ªa, Galicia y Catalu?a.
El Estado, sin embargo, se reservar¨¢ otras competencias como las relaciones exteriores, la defensa, la administraci¨®n de la justicia, la hacienda general y el sistema monetario. Tambi¨¦n se reserva algunas de las competencias reclamadas por algunos gobiernos aut¨®nomos, especialmente el vasco. Es el caso de materias como el Instituto de Cr¨¦dito Oficial. Las fuentes consultadas creen probable que el Gobierno, una vez estudiadas las transferencias, prepare un paquete com¨²n de competencias delegables para todas las comunidades de v¨ªa r¨¢pida.
[El lehendakari, Jos¨¦ Antonio Ardanza, indic¨® ayer que la ¨²ltima propuesta de transferencias del Gobierno no es una oferta como tal, sino "una propuesta para empezar a hablar de este asunto despu¨¦s de 14 a?os"; lo que, dijo, "es una especie de tomadura de pelo"]
Entre el equilibrio y la singularidad
El Gobierno pretende moverse en el juego complicado del equilibrio y la singularidad. La anunciada propuesta de giro auton¨®mico para Catalu?a que Jordi Pujol tratar¨¢ de formalizar en los pr¨®ximos d¨ªas se va a encontrar inmersa en un impulso general izado del Gobierno para las cuatro comunidades de v¨ªa r¨¢pida: Euskadi, Galicia, Andaluc¨ªa y la propia Catalu?a.Con esta maniobra, el Gobierno consigue un objetivo equilibrador: trata de dejar claro a la opini¨®n que no hay una cesi¨®n a la Generalitat, sino el cumplimiento de un compromiso electoral en el que participan otras tres comunidades. Las reclamaciones de Pujol no son muy diferentes de las de Chaves o las de Fraga. Las m¨¢s diferenciadas son las vascas, que en algunos casos desbordan los l¨ªmites a los que est¨¢ dispuesto el Ejecutivo.
Adem¨¢s, el uso por el Gobierno, por vez primera de forma generalizada, del procedimiento del art¨ªculo 150.2 de la Constituci¨®n le da un timbre de clara decisi¨®n pol¨ªtica.
El efecto equilibrador pretende combinarlo el Gobierno con un tratamiento bilateral con las autonom¨ªas para atender sus singularidades. La ponencia marco del PSOE para su Congreso deja claro que algunas comunidades siempre tendr¨¢n singularidades. Es el caso de ¨¦stas el que ahora pretende negociar el Estado.
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