Las consonantes de la discordia

Los acad¨¦micos latinoamericanos aprovecharon ayer la recepci¨®n en honor de Miguel Delibes, en el jard¨ªn de la Universidad de Alcal¨¢, para llevar adelante su particular cruzada por mantener en el alfabeto espa?ol la letra Ll y la Ch. La Real Academia de Espa?ola ha presentado al X Congreso de Academias Hispanas de la Lengua, que se celebra en Madrid, una ponencia en la que propone la supresi¨®n como letras aut¨®nomas de la Ll y la Ch. Las academias de Guatemala, Nicaragua, Panam¨¢, Uruguay y Costa Rica se oponen a ello. Y ayer mostraron tambi¨¦n su disconformidad representantes de las de Filipinas, Bolivia y Ecuador.V¨ªctor Garc¨ªa de la Concha, secretario de la Academia Espa?ola, insisti¨® en que no hay problema ninguno. En realidad, dijo, "no se trata de una supresi¨®n sino de una reclasificaci¨®n", de una simple reordenaci¨®n del diccionario en el apartado de las letras C y L. "No se pierde el fonema ni la letra", afirm¨®, y record¨® que en las tres primeras ediciones del diccionario de uso ya estaba ordenado as¨ª. La ministra de Cultura, Carmen Alborch insisti¨® en que seg¨²n su informaci¨®n, se trata de una reclasificaci¨®n siguiendo las directrices de la UNESCO. "Si se tratara de una supresi¨®n, me opondr¨ªa. Pero en la Academia no me han informado de tal cosa". El director del Instituto Cervantes, Nicol¨¢s S¨¢nchez Albornoz despach¨® el tema con un simple "me da igual". Carmen Lacambra, directora de la Biblioteca Nacional, considera que la medida se ajusta a las necesidades actuales en materia de ordenaci¨®n ling¨¹¨ªstica. "De hecho, la Biblioteca aplica desde 1985 las reglas de catalogaci¨®n cuyo contenido se ajusta exactamente a lo propuesto por la Academia".

Ra¨²l Manglapus, acad¨¦mico de Filipinas y ex ministro de Asuntos Exteriores, afirm¨®: "Como filipino me sentir¨ªa muy inc¨®modo con un alfabeto sin las letras Ll y Ch". En el mismo sentido se pronunci¨® su compatriota Jos¨¦ Rodr¨ªguez, aunque admiti¨® que es importante la evoluci¨®n de la lengua.

Jaime Mart¨ª, de la Academia Boliviana, tampoco se manifest¨® muy conforme: "Es un fonema propio del castellano, que da personalidad a nuestra lengua". "La vigencia de esas dos letras es esencial en el habla y en la escritura de nuestro idioma", a?adi¨® el tambi¨¦n acad¨¦mico boliviano Armando Soriano. Gustavo Alfredo J¨¢come, de la Academia Ecuatoriana, fue tajante: "No se pueden suprimir. Ser¨ªa negar la realidad de una lengua hablada y escrita".

Margarita Carrera, subdirectora de la Academia de Guatemala, asegura que detr¨¢s de la propuesta hay motivos economicos y no ling¨¹¨ªsticos. "Las m¨¢quinas deben de adaptarse a la lengua. No al rev¨¦s.

La historia viene de lejos. La propuesta espa?ola ya fue rechazada en el congreso celebrado en Costa Rica hace siete a?os. El reglamento de la asociaci¨®n de las 22 academias prev¨¦ que este tipo de cambios sea aprobado por unanimidad, o sea que el voto en contra de un sola academia es ya un veto. Por ello, la Espa?ola intent¨® el domingo que se votase la modificaci¨®n para que, a partir de ahora, se aprueben los cambios por los dos tercios de la asamblea. Mario Alberto Carrera, secretario perpetuo de la Academia Guatemalteca lo impidi¨®, pidiendo su aplazamiento hasta hoy martes. "De lo contrario en estos momentos ya no tendr¨ªamos ni Ll ni Ch", dijo leyendo un documento en el que ped¨ªa que se aplazase la votaci¨®n hasta hoy martes.

La eliminaci¨®n de ambas letras como fonemas independientes se debatir¨¢ y decidir¨¢, previsiblemente, hoy. En el debate sobre la eliminaci¨®n de estas dos letras como fonemas independientes, Carrera propondr¨¢ que en la modificaci¨®n del reglamento las decisiones sean por mayor¨ªa absoluta y no por dos tercios.

Los acad¨¦micos llegar¨¢n pues al debate de hoy divididos y muy guerreros. Los espa?oles siguen convencidos de que la supresi¨®n de la Ch y la Ll es un signo m¨¢s de la evoluci¨®n de la lengua y que no significar¨¢ una p¨¦rdida en el idioma, ya que se mantendr¨¢n igual los fonemas. El ¨²nico cambio, aseguran, se producir¨¢ en la ordenaci¨®n del diccionario. Los disidentes latinoamericanos batallar¨¢n hasta el final. "Perderemos y, seguramente, se aprobar¨¢ hoy, pero quedar¨¢ constancia hist¨®rica de que luchamos hasta el final", afirm¨® Mario Alberto Carrera.

Al final de la recepci¨®n, el protagonista de la jornada, Miguel Delibes, manifest¨® ser contrario, por principios a cualquier reducci¨®n. "Tendr¨¢n que explicar muy claramente que es lo que quieren hacer, pero no veo ninguna necesidad de estar manoseando el alfabeto".