Los novillos por excelencia

Son novillos de primera, que llevan saliendo doce a?os seguidos en San Isidro. No suelen defraudar; ni en presencia, ni en comportamiento. Si se lidiasen un a?o despu¨¦s, ser¨ªan toros aspirantes a premio. Pero la camada de la ganader¨ªa Mart¨ªn Pe?ato es tan corta que reservarlos para la siguiente feria supondr¨ªa el riesgo de quedarse sin ellos. Por eso, mejor de novillos. Adem¨¢s, si fueran toros, no habr¨ªa muchos toreros que se atrevieran con ellos.La ¨²ltima vez que se lidiaron toros de Mart¨ªn Pe?ato en Madrid fue un domingo de 1985. Emilio Oliva, Tom¨¢s Campuzano y Jos¨¦ Luis Galloso formaron el cartel de una de las corrida! de verano, de esas que se conocen como duras. Jos¨¦ Fern¨¢ndez, el mayoral, conocido como El Patillas, recuerda que a Oliva se le fue una oreja por culpa de fallar con la espada.

"Nuestros toros", dice el mayoral, "no son dif¨ªciles, simplemente tienen casta y hay que torearlos. De dura no tiene nada la ganader¨ªa, ahora, que de tonta, tampoco. Por eso las figuras no la querr¨ªan ni ver, porque eligen los toros bondadosos o que se caen, y los nuestros, ni una cosa ni otra. Pueden salir buenos o malos, pero hay que saber estar siempre delante de ellos".Reses cuajadas

Los encastados pe?atos tienen, pues, mejor salida como novillos. En cualquier caso, se sit¨²an en la escala m¨¢s alta de quien aspira dar el salto a matador de toros. "Son novillos muy cuajados, casi toros en comparaci¨®n con lo que sale en otras plazas", dice el mayoral.

Para Madrid seleccionaron diez novillos de buena presencia. "Cualquiera de estas reses hubiera valido el a?o que viene como toro para Madrid, pero. si reserv¨¢ramos la corrida, lo m¨¢s probable es que se estropee alg¨²n novillo. Entran en una edad en la que comienzan a pelearse y a derrotar. Hay que contar con que un par de ellos podr¨ªan quedar malparados y otro par, con defectos en las astas. Ya acudir¨ªamos entonces a la feria con lo justo y eso es mucho riesgo. Un a?o esperando y luego quiz¨¢ para nada. Si la camada fuera m¨¢s amplia, ser¨ªa otra cosa".

Sobre la generalizaci¨®n del afeitado, el mayoral opina que es "consecuencia de la falta de autoridad". "El presidente es el que tiene la ¨²ltima palabra y si impidiera que se lidiaran toros que chorrean sangre por los pitones, ya pod¨ªan pedir los matadores toros desmochados que, o toreaban lo que est¨¢ mandado, o ya se pod¨ªan ir retirando".