Brasil-Holanda
El Brasil previsto. Se puede esperar un Brasil m¨¢s luchador, trabajador, y s¨®lido en apariencia que en otras ocasiones. Y al mismo tiempo, menos brillante y espont¨¢neo que de costumbre. Buen trato de la pelota individualmente, aunque, colectivamente, carente de fantas¨ªa e imaginaci¨®n. Elabora sin atrevimiento y eso lo hace previsible. Como no sorprende, tiene que ganar por la gran precisi¨®n del toque. Defensivamente, achica hacia atr¨¢s y presiona con decisi¨®n en el medio. Sobresale el trabajo de Mauro Silva y Dunga en esa zona, porque tienen gran capacidad de recuperaci¨®n. En el fondo, la presencia de Aldair y Marcio Santos le da solidez. Si Branco sustituye a LeQnardo, perder¨¢ creatividad por esa banda.La Holanda que se espera. Casi con seguridad jugar¨¢ este partido con cuatro. defensores en el fondo, en lugar de los tres con que lo hace habitualmente. Ya us¨® esa variante frente a Eire y le dio solidez y tranquilidad. En el medio tiene menos manejo individual que Brasil, pero m¨¢s verticalidad, m¨¢s personalidad para ir a definir. Adelante, buenos jugadores y la presencia desequilibrante de Bergkamp que no tiene mucha participaci¨®n, en el juego, pero s¨ª apariciones decisivas. Juega con dos extremos bien abiertos y Bergkamp para aparecer por el medio y hacer tambi¨¦n de media punta. Hasta ahora, no ha tenido grandeza para imponer su jerarqu¨ªa y se ha limitado a asegurar los resultados. Este partido ser¨¢ distinto, y puede suponerse que jugar¨¢ al m¨¢ximo de motivaci¨®n.
Virtudes. Romario por Brasil, magistral definiendo y con el coraje suficiente para asumir toda la responsabilidad de los momentos dif¨ªciles. Bergkamp por Holanda, aparentemente ajeno al juego durante muchos minutos, siempre a la espera del momento oportuno para aparecer con brillantez y eficacia para decidir. Holanda cuenta adem¨¢s con Koeman y Jonk, de tremenda potencia en el disparo, para la media distancia y las faltas.
Defectos. Brasil puede enredarse en un toque intrascendente y si no encuentra a Bebeto o Romario en esas circunstancias, se convierte en un equipo firme en defensa pero inoperante en ataque. Holanda sufre de apat¨ªa y a veces no consigue evitar un cierto descontrol cuando no tiene la pelota, y queda muy expuesto, cosa que contra Brasil puede ser determinante.
Lo imprevisto. Que Brasil decida quedarse con uno de los dos recuperadores y lo reemplace por otro volante de toque como Ra¨ª. Que Holanda le quite la pelota a Brasil y no pierda concentraci¨®n a¨²n con el resultado a favor.
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