Pink Floyd comienza su gira espa?ola en San Sebasti¨¢n ante 30.000 espectadores

Los integrantes de Pink Floyd, uno de los grupos m¨ªticos del rock, emergieron ayer de una tormenta de luz para dar el primer concierto de su gira espa?ola en San Sebasti¨¢n, donde cerca de 30.000 personas empezaron a ver cumplidas sus expectativas con una impresionante puesta en escena. Los primeros acordes fueron para el ya m¨ªtico Shine on our crazy diamond, con el que atravesaron el estadio de Anoeta a m¨¢s de 250.000 vatios de potencia.

Pink Floyd interpret¨® varios grandes ¨¦xitos antes de comenzar con su ¨²ltimo disco The division bell. Nostalgia y modernidad que encajaba perfectamente con el p¨²blico asistente, adolescentes y cuarentones. Sin embargo, el precio de las entradas pes¨® m¨¢s que la fama y el grupo brit¨¢nico no consigui¨® motivar lo suficiente al personal y llenar el estadio. En un ambiente cargado de humedad los m¨¢s j¨®venes se situaron en el c¨¦sped cubierto, y los que ya ten¨ªan 25 a?os cuando Tejero estuvo a punto de truncar el ¨¦xito de la pel¨ªcula The wall en Espa?a, se situaron en las gradas.La llamativa c¨²pula del escenario sirvi¨® de paraguas al sirimiri que impidi¨® una sentada general en el c¨¦sped cubierto del estadio de f¨²tbol de Anoeta. Fueron m¨¢s de tres horas de espera pero al final lleg¨® el espect¨¢culo. Se hizo la luz y poco despu¨¦s de las 22.00 salieron los protagonistas de la noche en medio de un firmamento proyectado en una pantalla gigante. Y luego el rosa, el verde, el azul, rayos l¨¢ser y toda la fuerza de su sonido. Las im¨¢genes dejaron al estadio con la boca abierta. Cada sonido ten¨ªa un reflejo en la iluminaci¨®n y cada movimiento describ¨ªa la onda psicod¨¦lica de la m¨²sica del grupo.

En la gira plantan en escena un mill¨®n de vatios de luz -muchos de los focos son especiales y est¨¢n controlados por ordenador-, m¨¢s de 350 altavoces de los denominados hipersensibles, que lanzaron a los o¨ªdos de los asistentes 250.000 vatios de sonido estereof¨®nico y 100.000 m¨¢s cuadraf¨®nico. Despu¨¦s de una primera parte dedicada a la grada, a los que han vivido los avatares del grupo y sus sucesivos directores musicales con momentos de especial brillantez cuando interpretaron el Wish you were here, atacaron otro de sus preferidos, Money, para escarbar de nuevo en la banda sonora de The wall o el disco The final cut.

En el espect¨¢culo trabajan unas 200 personas con 49 camiones para llevar el escenario -250 toneladas de acero-, con un montaje de tres d¨ªas y 18 horas para los aspectos t¨¦cnicos.