Si Aza?a levantara la cabeza
El esfuerzo pedag¨®gico que ayer hizo en el Senado Jordi Pujol para explicar el hecho diferencial catal¨¢n hizo recordar al que el presidente de la Rep¨²blica Manuel Aza?a hizo en el Congreso en mayo de 1932 para convencer a los diputados conservadores de la conveniencia de aprobar el Estatuto de Autonom¨ªa de Catalu?a. Algunas de las frases que utiliz¨® ayer Pujol parec¨ªan calcadas de las de Aza?a.Sin embargo, las diferencias entre uno y otro acontecimiento eran palpables. Ayer era un presidente catal¨¢n el que, en su propio idioma, en un Parlamento de Madrid, explicaba ante el presidente del Gobierno y otros 16 presidentes auton¨®micos que la voluntad de Catalu?a era ser y actuar integrada en el conjunto de Espa?a. El ambiente era tambi¨¦n radicalmente diferente. Cuando expres¨® el origen hist¨®rico del hecho diferencial catal¨¢n y de la b¨²squeda de una identidad propia en la historia, nadie se levant¨® para acusarle de que su intervenci¨®n pon¨ªa en peligro la unidad de Espa?a como le sucedi¨® a Aza?a.
Todo lo m¨¢s que se oyeron ayer fueron reproches reivindicativos como los de los presidentes de Arag¨®n y La Rioja por considerarse discriminados al carecer de la fiscalidad especial de Navarra y Pa¨ªs Vasco, consagradas por su derecho foral. O la intervenci¨®n del presidente de la Xunta gallega, el popular Manuel Fraga, que reproch¨®, muy de pasada, a Felipe Gonz¨¢lez y a Jordi Pujol que, en determinados momentos, el ritmo del proceso auton¨®mico lo marcan los pactos pol¨ªticos del Gobierno con el nacionalismo catal¨¢n.
Pero nadie cuestion¨® el sistema auton¨®mico. Ni siquiera la ausencia del lehendakari Jose Antonio Ardanza a la cita de ayer y los reproches de Xabier Arzalluz lo ponen patas arriba. El presidente del PNV acata la Constituci¨®n aunque no la apruebe, como a ¨¦l mismo le gusta decir, y una muestra de ello es que sus senadores participan habitualmente en la Comisi¨®n General de Autonom¨ªas del Senado. Todo lo m¨¢s, la actitud dispar de ambos nacionalismos confirma una constante hist¨®rica: la participaci¨®n del nacionalismo catal¨¢n en el Estado en contraste con el vasco.
Complejas razones hist¨®ricas e incluso de dimensi¨®n territorial explican ambas actitudes. Lo que la sesi¨®n de ayer puso de manifiesto, una vez m¨¢s, es que Espa?a ha conjurado el, riesgo hist¨®rico de los enfrentamientos civiles o disputas territoriales, reverdecido en los ¨²ltimos a?os en algunos pa¨ªses europeos.
Y ¨¦ste es el gran ¨¦xito del sistema auton¨®mico, como ayer se encarg¨® de destacar el presidente del Gobierno en su intervenci¨®n inicial, quien, por cierto, pidi¨® los discursos de Aza?a para preparar su comunicaci¨®n de ayer.
No obstante, el sistema auton¨®mico ha mostrado numerosas deficiencias a causa de su r¨¢pido rodaje, al pasar en 14 a?os de la nada a disponer del 25,5% del presupuesto nacional. Y fue en ese terreno en el que se situ¨® ayer el eje del debate.
La primera carencia procede de la ausencia de una C¨¢mara territorial, de un ¨®rgano de encuentro de las comunidades aut¨®nomas y de los presidentes cuando el sistema est¨¢ ya tan desarrollado. Tanto el presidente del Gobierno como los presidentes auton¨®micos, de todos los colores, pusieron ayer en el orden del d¨ªa la reforma constitucional para hacer del Senado una C¨¢mara de las autonom¨ªas.
El aumento del peso de las autonom¨ªas ha dejado al descubierto otras carencias graves que ayer denunciaron los presidentes auton¨®micos. Muchas cuestiones que afectan a las autonom¨ªas se abordan en las instituciones comunitarias europeas sin que los Gobiernos aut¨®nomos puedan participar en ellas. Los mecanismos de cooperaci¨®n entre unas comunidades aut¨®nomas desarrolladas son insuficientes, y tambi¨¦n se manifiestan graves deficiencias con la administraci¨®n perif¨¦rica del Estado, que, en algunos lugares y competencias, duplica funciones de las autonom¨ªas, con su correspondiente despilfarro. El modelo de financiaci¨®n auton¨®mica, de corresponsabilidad fiscal, tambi¨¦n est¨¢ sometido a prueba, y algunos presidentes auton¨®micos lo rechazan.
El debate culminar¨¢ ma?ana, mi¨¦rcoles, con unas resoluciones que apuntan en esta direcci¨®n, en la mejora de un sistema auton¨®mico aceptado b¨¢sicamente. ?Si Aza?a levantara la cabeza!
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