Tobin el 'showman'

La imagen de Brian Tobin en las Naciones Unidas, con una red de pesca a sus espaldas y un peque?o flet¨¢n negro en la mano, ha dado la vuelta al mundo. Poco importa que transportar semejante impedimenta costara cinco millones de pesetas, que las medidas de la trampa presentada en Nueva York fueran distintas de la que se mostr¨® en el Parlamento de Ottawa o que algunos de los fletanes que no daban la talla carecieran de cabeza y de cola. The Tobin show (el show de Tobin), como lo han denominado algunos medios de comunicaci¨®n, hab¨ªa logrado su objetivo.El ministro canadiense de Pesca y Oc¨¦anos ha conseguido, en primer lugar, crear una crisis para estimular las negociaciones sobre especies marinas transzonales (una batalla a la que su pa¨ªs lleva aplic¨¢ndose desde que agot¨® las reservas en sus aguas jurisdiccionales). A la vez, ha sido capaz de sumir al pa¨ªs en un estado de euforia sin precedentes.

Como resultado, el honorable Brian Tobin, un perfecto desconocido fuera de su entorno pol¨ªtico y profesional, se ha convertido en los ¨²ltimos 35 d¨ªas en una figura internacional. La transformaci¨®n es a¨²n m¨¢s sorprendente toda vez que el ahora cruzado conservacionista y h¨¦roe de los habitantes de Terranova -su provincia de origen- gozaba hasta el momento de una muy escasa popularidad entre los pescadores y los ecologistas.

"Tobin era odiado en Terranova a causa del cierre de las industrias pesqueras y el paro que ello trajo consigo", explica Margot Cronis, de la: cadena estatal de televisi¨®n, CBC, en Toronto. Estos d¨ªas los habitanes de esa provincia canadiense aparecen en la televisi¨®n luciendo camisetas con dibujos de guardacostas y el texto: "H¨¦roes de Tobin".Rumores de relevoSu popularidad en la costa Oeste, donde numerosos grupos de presi¨®n le responsabilizan de la desaparici¨®n del salm¨®n, era similar. "El apresamiento del Estai ha sido una maniobra publicitaria destinada a distraer a los canadienses de su desastrosa gesti¨®n de las reservas pesqueras en la costa Oeste", denuncia la asociaci¨®n de pescadores Survival Coalition, de la provincia de Columbia Brit¨¢nica. El malestar era tal que, a principios de a?o se habl¨¦ de que Tobin hab¨ªa pedido el relevo en el Ministerio de Pesca y se especul¨® con que el primer ministro, Jean Chr¨¦tien, pod¨ªa encargarle la cartera de Salud."Tobin fue antes periodista de televisi¨®n, y muy bueno", concede Robert Benzid, del diario The Toronto Sun, y recuerda su capacidad para esquivar preguntas, llevar los temas a su terreno y dramatizar los acontecimientos. "Es la campa?a de relaciones p¨²blicas m¨¢s brillante que hemos visto nunca, los canadienses como salvadores frente a los espa?oles", manifiesta un periodista de la CBC que pide no ser citado "para no perder el empleo". Este interlocutor recuerda, que unos d¨ªas antes de que comenzara el conflicto se hab¨ªa aprobado el nuevo. presupuesto para el a?o fiscal 1995-1996.