"Fallo t¨¦cnico"

Toda la culpa es de la Administraci¨®n. Asociaciones de consumidores o ?lvaro Pombo, responsabilizando, en parte o del todo, a los m¨¦dicos, cometen la infamia consciente de abusar de una mera met¨¢fora, y con tan mala fe como quien en la met¨¢fora corriente "la nevera se niega a funcionar" afectase ignorar, anim¨ªsticamente, que un instrumento no "se niega", se para. Tal es la c¨ªnica distorsi¨®n de quien, con tal de disculpar al ministerio, finge que no sabe hasta de sobra que un m¨¦dico no es una persona, sino un instrumento. ?Y a qui¨¦n incumbe la responsabilidad de los remedios cuando el instrumental sanitario se para y no funciona, sino a quien tiene a su cargo los fondos asignados? A lo sumo podr¨¢, en segunda instancia, demandar al fabricante -en este caso tal vez la Facultad de Medicina-, pero no maldecir y dar patadas a los ciegos instrumentos, cual si tratase de dirigir en contra de ellos las iras de los enfermos no atendidos.En la misma "injusticia", valga aqu¨ª otra met¨¢fora, pues tampoco se puede ser "justo" ni "injusto" con los instrumentos, incurri¨® Walter Benjamin al atribuirles incluso personalidad moral: "Un caso eminente de omisi¨®n violenta, m¨¢s inmoral que la huelga general pol¨ªtica, similar al bloqueo econ¨®mico, es la huelga de m¨¦dicos que ha habido en muchas ciudades alemanas. Aparece en tal caso, en la forma m¨¢s repugnante, el empleo sin escr¨²pulos de la violencia, verdaderamente abyecto en una clase profesional que durante a?os, sin el menor intento de resistencia, 'ha garantizado a la muerte su presa', para luego, a la primera ocasi¨®n, dejar a la vida abandonada por unas monedas" (Walter Benjamin, Para la cr¨ªtica de la violencia).