Colaborador de los jueces

Hombre progresista y sumamente profesional, seg¨²n le definen sus compa?eros, el inspector jefe Enrique Nieto se hizo cargo de la jefatura de la Brigada de Polic¨ªa Judicial hace cuatro a?os. En este tiempo se ha caracterizado por un talante sumamente abierto, en sinton¨ªa con la pol¨ªtica de transparencia y de intensa colaboraci¨®n con la judicatura promovida desde el Gobierno Civil de Guip¨²zcoa. Natural de Infiesto (Asturias), ingres¨® en el Cuerpo Nacional de Polic¨ªa en 1972 y estuvo destinado en Madrid y en Oviedo antes de llegar al Pa¨ªs Vasco, donde fue jefe de la comisar¨ªa de Pasaia.

Nieto ha dedicado la mayor parte de su vida profesional a tareas ajenas a la del terrorismo, aunque ese tipo de delincuencia hab¨ªa pasado a formar parte de sus funciones desde hace unos meses. Su primera intervenci¨®n en este campo se produjo hace un mes, con la detenci¨®n de varios presuntos integrantes de un comando Y, especializado en acciones de sabotaje, y con el registro de un local contiguo a la sede de HB del barrio donostiarra de Intxaurrondo, donde se hall¨® material para fabricar explosivos.

Este inspector jefe defendi¨® una actuaci¨®n policial discreta en el secuestro de Jos¨¦ Mar¨ªa Aldaya, para no interferir los contactos dirigidos por la familia y no prolongar in¨²tilmente el cautiverio. Su disposici¨®n al di¨¢logo le llev¨® a participar regularmente en un programa radiof¨®nico. Seg¨²n sus compa?eros, iba muchas veces desarmado y no tomaba especiales medidas de seguridad. Su domicilio del n¨²mero 9 de la calle de Sancho el Sabio est¨¢ a unos cientos de metros del Gobierno Civil.