El peso de las elecciones de 1996

Para Robert Rubin, Ias predicciones de eliminar el d¨¦ficit en siete o diez a?os son, en el mejor de los casos, dudosas". "A veces", explic¨® el secretario del Tesoro norteamericano, "Ia gente no se da cuenta de lo que ya hemos hecho en cuanto a la reducci¨®n del d¨¦ficit; en este momento tenemos el m¨¢s bajo porcentaje de d¨¦ficit respecto al producto interior bruto de todos los pa¨ªses del Grupo de los Siete".

El secretario del Tesoro asegur¨® que las dos prioridades en las que es necesario trabajar r¨¢pidamente para asegurar la salud de la econom¨ªa norteamericana, que en el ¨²ltimo trimestre creci¨® a un ritmo del 4,2%, son: "Conseguir un presupuesto equilibrado y sensible, y por sensible me refiero a algo que est¨¦ en la l¨ªnea de os objetivos del presidente, y evitar un incumplimiento de nuestras obligaciones". Robert Rubin, que antes de llegar a la Administraci¨®n fue una autoridad financiera de Wall Street, ha intentado alejarse todo lo posible de la pol¨¦mica pol¨ªtica de Washington. Pero para satisfacer esas prioridades y resolver el dificil pulso que en este momento sostienen el Congreso y la Casa Blanca, va a ser necesaria una gran dosis de pol¨ªtica, de negociaci¨®n, de tira y afloja. Porque en el transfondo est¨¢n los votos de las elecciones de 1996.