"Ni en Suiza ni en Cercedilla"

J. M. L. / J. Y La declaraci¨®n del ex ministro del Interior se prolong¨® alrededor de tres horas, durante las cuales Jos¨¦ Barrionuevo permaneci¨® sentado en el centro de los estrados de un antiguo tribunal, frente al juez Eduardo M¨®ner y rodeado por un c¨ªrculo de letrados, entre ellos la hija del ex ministro. Despu¨¦s, transcurrieron otras dos horas hasta que se reley¨® y firm¨® el acta, lo que dilat¨® la comparecencia hasta pasadas las cuatro de la tarde.

El interrogatorio, minucioso, lo inici¨® el magistrado instructor, qui¨¦n hizo un repaso de las distintas imputaciones dirigidas contra el ex ministro.

El fiscal formul¨® cuatro o cinco preguntas, en tanto que el acusador popular Jos¨¦, Luis Gal¨¢n fue el que dirigi¨® el interrogatorio m¨¢s extenso, y contra el que se estrellaron las m¨¢s cori¨¢ceas negativas del ex ministro. Miguel Castells, el abogado de Herri Batasuna, s¨®lo formul¨® media docena de interrogantes que no llamar¨®n especialmente la atenci¨®n.

Jorge M¨¢nrique, el letrado de Jos¨¦ Amedo, renunci¨® a su turno de interrogatorio. Barrionuevo afirm¨®, a preguntas de otros letrados, que nunca, ni cuando estaba en el Gobierno ni despu¨¦s, ha hablado personalmente con Jos¨¦ Amedo o con Michel Dom¨ªnguez. La guinda, sin embargo, la puso el letrado Manuel Murillo, defensor de Francisco ?lvarez. ?ste quiso saber si Barrionuevo, durante su gesti¨®n, hab¨ªa dispuesto de fondos reservados, nada menos que por valor de "qu¨ªnientos mil millones de pesetas".

La carcajada fue general. Barrionuevo repondi¨® ir¨®nicamente que al letrado quiz¨¢ le hab¨ªan "bailado un poco los n¨²meros". Pero, cuando el abogado volvi¨® a la carga, preguntando si el ex ministro hab¨ªa tenido alguna vez negocios en Francia o Suiza, Barrionuevo replic¨® con dureza: "Ni en Suiza, ni en Cercedilla". En el acta de la declaraci¨®n se hizo constar finalmente que Barrionuevo hab¨ªa respondido que no tiene negocios ni en Francia, ni en Suiza, ni en ning¨²n otro lugar del mundo.