El presidente advierte que gobernar contra Catalu?a llevar¨ªa a "Espa?a al desastre"

Felipe Gonz¨¢lez roz¨® el cielo anoche en el cintur¨®n industrial de Barcelona. Las tres huelgas generales convocadas por UGT y CC OO en 1988, 1992 y 1994 no impidieron que unos 10.000 sindicalistas de ambas centrales vitoreasen hasta la afon¨ªa al l¨ªder del PSOE en el palacio ferial de Cornell¨¢. Bajo una atronadora ovaci¨®n, Gonz¨¢lez abog¨® por el reparto del trabajo para crear empleo, acus¨® al PP de querer dilapidar el Estado del bienestar y a IU de bailar al son de la derecha. Y aprovech¨® su estancia en tierra catalana para advertir: "Quien gobierne contra Catalu?a llevar¨¢ a Espa?a al desastre".Gonz¨¢lez alert¨® de la existencia de "un peligro de enfrentamiento interterritorial en Espa?a". Constat¨® que es muy f¨¢cil sembrar el recelo entre las distintas comunidades y acus¨® de irresponsables a quienes agitan el fantasma del odio interterritorial. "Eso ser¨ªa meter a Espa?a en un callej¨®n sin salida", sentenci¨®. Estas palabras de Gonz¨¢lez eran, en s¨ªntesis, las mismas que hab¨ªa utilizado minutos antes de la cena en la grabaci¨®n de un v¨ªdeo electoral del PSC. Por vez primera el gui¨®n no lo hab¨ªan preparado los especialistas del PSOE, sino los del PSC.

Lament¨® de nuevo las calumnias e injurias que, a su juicio, llueven sobre los socialistas desde hace algunos a?os. Y, para demostrar su aversi¨®n a los calumniadores, explic¨® que el gobierno se hab¨ªa negado a las peticiones de la Justicia itali¨¢na contra el arzobispo de Barcelona, Ricard Maria Carles. "Nos negamos porque odiamos la injuria, no porque seamos ni beatos ni meapilas".

Los socialistas catalanes volvieron a obsequiar ayer a Gonz¨¢lez con uno de esos actos capaces de levantar la moral de combate al menos aguerrido. Despu¨¦s de los m¨ªtines de nueva generaci¨®n del Palau Sant Jordi de Barcelona, la cena de anoche con unos 10.000 trabajadores, a 1.500 pesetas el cubierto, fue un acto que, como insinu¨® Narc¨ªs Serra en su discurso, s¨®lo pod¨ªa haberlo organizado el PSC. Serra, que transpiraba satisfacci¨®n y orgullo por el ¨¦xito de convocatoria, no desperdici¨® la oportunidad de subrayar que el acto acreditaba "la solidez del socialismo catal¨¢n". Y a rengl¨®n seguido reclam¨® un PSOE 11 m¨¢s fuerte, m¨¢s s¨®lido, m¨¢s unido y m¨¢s renovado".