M¨¦xico apuesta por privatizar las pensiones para animar la econom¨ªa

Los mexicanos no ahorran. Desde que el 20 diciembre de 1994 se le desplomara la econom¨ªa encima, el presidente Ernesto Zedillo se?al¨® al escu¨¢lido ahorro interno (uno de los m¨¢s bajos de Latinoam¨¦rica y que se sit¨²a alrededor del 14% del producto interior bruto -PIB-) como el gran culpable del descalabro. Una vez identificado el enemigo, el Ejecutivo mexicano concentra ahora todos sus esfuerzos en un nuevo programa de privatizaci¨®n de los fondos de pensiones, con el que espera recaudar unos 4.000 millones de d¨®lares al a?o.Las autoridades econ¨®micas mexicanas se congratulan de la nueva ley del seguro social -ya aprobada pero a la espera de su reglamentaci¨®n por el Parlamento en los pr¨®ximos d¨ªas-, que autoriza el acceso de las empresas privadas a la gesti¨®n de estos fondos hasta ahora en manos de la Seguridad Social.

A principios de esta semana, el presidente Zedillo y su ministro de Hacienda, Guillermo Ortiz, destacaron en una reuni¨®n anual de inversores de Bolsa la vitalidad que esta medida aportar¨¢ a una econom¨ªa en la que la inversi¨®n se encuentra estrangulada por unos intereses cercanos al 40%. La privatizaci¨®n de las pensiones proporcionar¨¢, seg¨²n las teor¨ªas del Gabinete mexicano, los fondos sufientes (cerca del 50% del PIB) para los necesarios proyectos de infraestructura y actividades productivas rentables a largo plazo.

Los oscuros -y a¨²n sin resolver- asesinatos del candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y, por tanto, virtual presidente Luis Donaldo Colosio y del tambi¨¦n l¨ªder pri¨ªsta Jos¨¦ Francisco Ruiz Massieu provocaron la salida del pa¨ªs de m¨¢s de 15.000 millones de d¨®lares y pusieron a M¨¦xico al borde del colapso total. El Gobierno de Zedillo no parece dispuesto a que esto suceda de nuevo. El debate se centra ahora en el acceso del capital extranjero a las denominadas administradoras de fondos de retiro (afores).