Samper promete gobernar Colombia "hasta el ¨²ltimo minuto del ¨²ltimo d¨ªa" de su mandato
El presidente Ernesto Samper se queda. Y, seg¨²n ¨¦l, por tres razones: es la salida mas constitucional a la crisis; medio pa¨ªs le apoya e irse no soluciona los grandes problemas nacionales. "Gobernar¨¦ hasta el ¨²ltimo minuto de la ¨²ltima hora del ¨²ltimo d¨ªa" dijo a los colombianos 20 horas despu¨¦s de recibir un certificado de inocencia de la C¨¢mara de Representantes, que lo excluye de toda culpa pol¨ªtica y legal por el ingreso de dinero del narcotr¨¢fico a su campa?a. En el discurso, Samper tendi¨® un puente para la reconciliaci¨®n nacional: "Propongo una tregua de odios y una pausa de ataques", e invit¨® a los colombianos a sumarse a una campa?a para "acabar, al precio que sea", con el narcotr¨¢fico.
Tres fueron los anuncios centrales: medidas para atacar de frente la estructura financiera del narcotr¨¢fico; reformas pol¨ªticas que permitan la financiaci¨®n estatal de las campa?as y un Gobierno de reconciliaci¨®n nacional. Para lo primero, Samper parti¨® de un hecho cierto: la convivencia del pa¨ªs "por miedo o por ambici¨®n 19 , durante casi 20 a?os, con el narcotr¨¢fico.Su culpabilidad en el narcoesc¨¢ndalo la dej¨® reducida a cuatro l¨ªneas: "Est¨¢ claro que me equivoqu¨¦ en el nombramiento de algunas personas. Lo hice de buena fe, seguro como estaba de la rectitud de su trayectoria". Se refiere a su ex tesorero Santiago Medina y su ex director de campa?a Fernando Botero, los dos hoy en prisi¨®n.
El paquete de medidas que endurece la actual legislaci¨®n sobre narcotr¨¢fico incluye el desmantelamiento de la llamada pol¨ªtica de sometimiento a la justicia, que contempla rebaja de penas, y que fue ideada durante el Gobierno de C¨¦sar Gaviria. Se contempla tambi¨¦n el aumento de penas, la extinci¨®n de dominios sobre los bienes provenientes del narcotr¨¢fico y nuevas normas sobre blanqueo de dinero. Entre estas ¨²ltimas anunci¨® el presidente que se publicar¨¢ una lista de empresas extranjeras vinculadas al blanqueo a trav¨¦s de venta de mercanc¨ªas para exportar a Colombia o la realizaci¨®n de operaciones financieras bancarias. A estas empresas se les suspender¨¢n las licencias legales de funcionamiento. Todas estas medidas ser¨¢n presentadas al Congreso el 20 de julio.
Samper habl¨® por radio y televisi¨®n en horario de m¨¢xima audiencia. Minutos antes hab¨ªa salido al balc¨®n de palacio para saludar a un grupo de seguidores que le ofrecieron una serenata. A ritmo de m¨²sica llanera colombiana le cantaron: "Echa palante Samper, mira que el pueblo espera la salvaci¨®n...". El grupo de admiradores no era numeroso. Llegaron a palacio despu¨¦s de enfrentarse a otro grupo, igualmente reducido, de opositores. "Tengo tristeza de patria; se acab¨® la democracia y lleg¨® la narcodemocracia" alegaba una elegante mujer.
En el discurso se vio a un Samper seguro. Mezcl¨® h¨¢bilmente el tono en¨¦rgico y el tono conciliador. Este ¨²ltimo fue el que m¨¢s utiliz¨® al referirse a las relaciones con Estados Unidos. "A pesar del trago amargo de la descertificaci¨®n, Colombia desea seguir considerando a Estados Unidos como pa¨ªs socio y amigo sobre bases elementales de respeto mutuo".
El diario El Espectador, al rese?ar la intervenci¨®n del mandatario, titul¨® en primera p¨¢gina: Samper, en la l¨ªnea Clinton. En cuanto a la salida pol¨ªtica a la crisis, las cosas no quedaron claras. Descart¨® la consulta popular, en la que siempre hab¨ªa insistido; reconoci¨® que el pa¨ªs est¨¢ "peligrosamente polarizado", y tendi¨® una rama de olivo a sus enemigos: "El ¨²nico camino que nos queda es el de ponernos de acuerdo. Bienvenidos los que quieran sumarse", pero no dijo c¨®mo se concretar¨¢ esa f¨®rmula de reconciliaci¨®n.
En una entrevista con la cadena de radio Caracol, Samper aclar¨¦ que no habr¨¢ necesaria mente un reajuste ministerial. Habr¨¢, dijo, cambios como resultado de la "alianza que se d¨¦ en el marco de la agenda de re conciliaci¨®n". En la entrevista, en la que se mostr¨® especialmente jovial, le rest¨® importancia a la posibilidad de que EE UU le retire su visado. "El ¨²nico visado que necesito para gobernar ya lo tengo; fueron las elecciones en las que el pueblo me llev¨® al poder". Y repiti¨® lo que dijo en su discurso cuando us¨® el tono m¨¢s en¨¦rgico: `Ahora tengo la autoridad moral para exigir que no se siga atropellando mi honra", y advirti¨® que no permitir¨¢ que los medios de comunicaci¨®n hagan eco de llamadas a la rebeli¨®n. Fue una directa referencia a las voces de un grupo de empresarios que han hablado de desobediencia civil y paros para presionar la salida del primer mandatario.
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