Beatriz Hernanz publica el libro de poemas 'La vigilia del tiempo'

Beatriz Hernanz lleva ya compuestos dos movimientos de una composici¨®n l¨ªrica que contendr¨¢ cuatro. La lealtad del espejo (Premio Barcarola 1992), su primer libro de poemas, y, ahora, La vigilia del tiempo, que ha conseguido un acc¨¦sit del Premio Adonais de 1995, son dos claros ejemplos de que la nueva generaci¨®n po¨¦tica espa?ola dar¨¢ tanto que hablar como la narrativa."En mis dos libros reflexiono sobre el amor, la infancia, la amistad, la palabra y la muerte, que, al fin y al cabo, es la Vida", dice esta "gallega desterrada", seg¨²n propia definici¨®n, nacida en Pontevedra hace 32 a?os. Beatriz Hernanz vive por, para y de la literatura. Ense?a Historia del Teatro y es directora acad¨¦mica de la Escuela Superior de Arte Dram¨¢tico que la Universidad de Kent ha montado en Torrelodones. "Las clases y el trabajo como fil¨®loga son el pan, y la poes¨ªa, el agua. En eso soy una privilegiada", comenta.

En La vigilia del tiempo (Rialp), Hernanz sigue indagando en los misterios que m¨¢s le obsesionan: "En el hecho de vivir, que est¨¢ condicionado por el espacio y el tiempo. Y en la memoria, a trav¨¦s de la cu¨¢l podemos identificarnos a nosotros mismos y reconocer a los otros, que son los espejos que nos permiten sentirnos acompa?ados", cuenta.

Su segundo libro l¨ªrico pretende ser la mitad de una tetralog¨ªa que empez¨® con La lealtad del espejo y que se completar¨¢ -"s¨ª soy capaz"- con Epopeya del laberinto y Piel de las palabras.

La palabra, como actriz tem¨¢tica, tambi¨¦n est¨¢ presente en los dos libros anteriores: "Que la ternura nos sea propicia cuando la palabra ya es in¨²til", dice un verso. No en vano todas las grandes preocupaciones de Beatriz Hernanz como creadora se repiten y se repetir¨¢n en las cuatro entregas, que quieren ser "una sinfon¨ªa po¨¦tica en la que, por medio de la reiteraci¨®n de determinados temas, se intenta transmitir un discurso concreto".

Reinventar palabras

Hernanz posee una sutil habilidad para reinventar, seg¨²n en qu¨¦ versos, determinados vocablos que la obsesionan: espejo, luna, jaguar, espadas, cuchillos y mar adquieren en su obra, cada vez que son escritos, dimensiones que trascienden el significado de los diccionarios. En La vigilia del tiempo, el mar "aparece mucho m¨¢s que en cualquiera de mis trabajos anteriores y de manera inconsciente. Curiosamente, el libro lo escrib¨ª durante una temporada en la que apenas vi el mar. Luego ca¨ª en ello. Es curioso lo que puede llegar a a?orarse".Esta poeta cree que forma parte de una digna generaci¨®n literaria espa?ola. En concreto, la poes¨ªa que ahora hacemos los m¨¢s j¨®venes est¨¢ libre de prejuicios creativos", asegura. "Miramos a los poetas m¨¢s inmediatos y no nos olvidamos de los cl¨¢sicos".