Sa Nostra y March utilizaron a Alc¨¢zar para no reconocer cr¨¦ditos fallidos
Inmobiliaria Alc¨¢zar, bajo la presidencia del destituido Juan Piguillem Garc¨ªa, actu¨® como fiduciaria de Caja de Baleares Sa Nostra y Banca March para no reconocer cr¨¦ditos fallidos -por un total de 1.700 millones de pesetas- en el proyecto de cementerio privado mallorqu¨ªn Bon Sosec (Buen Sosiego). Estos cr¨¦ditos, avalados por la c¨²pula del PP balear, estaban garantizados con parcelas del cementerio que Alc¨¢zar compr¨® gracias a nuevos cr¨¦ditos cedidos por estas mismas entidades. De este modo, Alc¨¢zar apareci¨® como nuevo propietario, a pesar de que el acuerdo con los bancos inclu¨ªa un pacto de recompra, y las dos entidades financieras no se vieron obligadas a reconocer como fallidos estos cr¨¦ditos.
De acuerdo con las exigencias del Banco de Espa?a, la mala situaci¨®n financiera del hasta entonces promotor de los terrenos, Bon Sosec, hubiera obligado a importantes provisiones, lo que pudo evitarse con la puesta en escena de Alc¨¢zar. Su utilidad en la operaci¨®n se reduc¨ªa a la de poner el nombre para asumir la propiedad de los terrenos, aunque gracias al pacto de recompra, eran en realidad los bancos los que tarde o temprano acabar¨ªan reasumiendo la propiedad y por lo tanto los cr¨¦ditos aparecer¨ªan como fallidos.El 1 de julio de 1993, Pedro Batle, actual director general de Sa Nostra, y Antonio Mascar¨®, en ese momento director comercial de Banca March, llegaban a un compromiso con Juan Piguillem, entonces presidente de Inmobiliaria Alc¨¢zar, por el cual la inmobiliaria se convert¨ªa en fiduciaria (propietario aparente) de los cr¨¦ditos de las entidades bancaria y de ahorro baleares.
Inmobiliaria Alc¨¢zar -ahora en plena investigaci¨®n de su anterior equipo directivo, encabezado por Piguillem- recib¨ªa dinero para adquirir los terrenos en garant¨ªa de los cr¨¦ditos hipotecarios de 850 millones que cada una de las entidades manten¨ªa con Bon Sosec, el lujoso cementerio privado que acabar¨ªa en suspensi¨®n de pagos el 31 de agosto de 1995 con unas deudas estimadas en 9.000 millones de pesetas. Las dos entidades baleares, que apostaban 850 millones cada una en el proyecto de cementerio privado en Palma, aportaron otros 400 millones (200 millones cada una) para financiar el aparcamiento en Alc¨¢zar y deshacerse de los inc¨®modos cr¨¦ditos pol¨ªticos.
El Banco de Espa?a ha llevado a cabo un seguimiento especial de los cr¨¦ditos de Bon Sosec y no ha cuestionado la venta con pacto de recompra a Alc¨¢zar. Las entidades financieras implicadas explicaron a EL PA?S que mantienen provisionados los 850 millones de cr¨¦ditos hipotecarios que prestaron cada una -inicialmente- para financiar el fara¨®nico proyecto de Bon Sosec, defendido por el Gobierno del PP en Baleares y por el alcalde de Palma, Joan Fageda, tambi¨¦n del mismo partido.
Se da la circunstancia de que el alcalde de Palma, Joan Fageda, adem¨¢s de promotor del cementerio privado, result¨® ser uno de sus principales acreedores en el momento de la suspensi¨®n de pagos, con unos 975 millones de deudas que afectaban a la constructora de su propiedad. Gabriel Ca?ellas, ex presidente balear, comprometi¨® 450 millones p¨²blicos en defensa del proyecto de su amigo Fageda.Suculentas comisiones.En el acuerdo con Alc¨¢zar, Sa Nostra y March se compromet¨ªan a recomprar a un precio garantizado y ofrec¨ªan suculentas comisiones a Puiguillem para que Alc¨¢zar asumiera los riesgos peligrosos que pronto llamaron la atenci¨®n del Banco de Espa?a. En el contrato de fiducia, Banca March y Sa Nostra se "obligan solidariamente a asumir y satisfacer cualquier suma que, por cualquier concepto, pueda reclamarse a Inmobiliaria Alc¨¢zar, a tenor de la adquisici¨®n por esta ¨²ltima de las fincas de Bon Sosec".Significativamente, Antonio Mascar¨® ces¨® hace unos meses en sus funciones de director comercial en Banca March. Su salida del banco est¨¢ relacionada con la ca¨ªda del m¨¢ximo responsable de la operaci¨®n Bon Sosec, Sim¨®n J. Galm¨¦s, ex vicepresidente de March. Tambi¨¦n en Alc¨¢zar se produjo la destituci¨®n fulminante por irregularidades de Juan Piguillem como presidente en un tumultuoso consejo de administraci¨®n que acab¨® en la madrugada del 29 de mayo pasado. A Piguillem se le atribuye toda suerte de manejos en la absorci¨®n de la compa?¨ªa Royaltur, antigua propiedad de la familia Moll. Alc¨¢zar tiene el 54% de Royaltur y el resto es propiedad del grupo alem¨¢n Neckermann (en total tiene 3.700 millones de pesetas de capital). La dif¨ªcil situaci¨®n de Royaltur obligar¨¢ probablemente a que el nuevo equipo directivo de Alc¨¢zar decida su venta.
Banca March ha se?alado que sus cr¨¦ditos a Bon Sosec est¨¢n completamente provisionados y reconoce que aquella operaci¨®n fue un error. "Aquellas hipotecas fueron una soluci¨®n de emergencia que pretend¨ªa garantizar el buen fin del pol¨¦mico proyecto, aunque, efectivamente, ten¨ªan garantizada la recompra", afirma un portavoz oficial de March. Otras fuentes se?alan que la entrada en Bon Sosec de Inmobiliaria Alc¨¢zar fue tutelada por Sa Nostra, que ya controlaba el paquete m¨¢s significativo de acciones de la inmobiliaria.
Por lo que respecta a Sa Nostra, la inversi¨®n influida por el PP balear se consider¨® "problem¨¢tica y de alto riesgo", por lo que la alternativa de un aparcamiento con pacto de recompra se consider¨® una buena soluci¨®n para reducir el riesgo que Bon Sosec significaba para la caja balear, se?alan fuentes oficiales de Sa Nostra consultadas por este diario. La caja balear, titular del 24,99% de Inmobiliaria Alc¨¢zar, consigui¨® esta posici¨®n sin desembolso de capital, por la v¨ªa de intercambios de activos.
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