Un "pins¨¦"
Rompi¨® plaza Curro e iba hecho un pins¨¦. Los dem¨¢s toreros tambi¨¦n, pero no tanto. Curro Romero, vestido, no resiste la comparaci¨®n. Esa chaquetilla corinto, ese pantal¨®n de buen pa?o y mejor corte, esa faja color¨¢... Curro Romero, se le mira y es el paradigma de la torer¨ªa. Le ocurre lo que a Cagancho: que la gente se conforma con verle hacer el pase¨ªllo.Curro Romero ha llegado a tal estado de gracia que levanta una ceja y le aclaman como si acabara de anunciar el advenimiento del Mes¨ªas. No digamos si, adem¨¢s, templa la ver¨®nica y eso -?oh, cielos!- fue lo que ocurri¨®.
Un capote de seda presentado seg¨²n mandan los c¨¢nones, el lance marcando los tiempos; y, al mecer la media ver¨®nica, quedaba dominado el torito bravo, mir¨¢ndole altivo el torero, hecho un pins¨¦.
Varias / Siete toreros
Toros 1?, 2? y 6? de Torrestrella, encastados; resto de Torrealta, bravos.Curro Romero: bajonazo enhebrado, pinchazo, estocada delantera ca¨ªda y seisb descabellos (gran ovaci¨®n y salida al tercio). Curro V¨¢zquez: estocada corta baja (aplausos). Ortega Cano: estocada perpendicular trasera y seis descabellos (ovaci¨®n y salida al tercio). Pepe Luis V¨¢zquez: pinchazo y estocada delantera (oreja). Rivera Ord¨®?ez: estocada (ovaci¨®n y salida al tercio). D¨¢vila Miura: pinchazo y estocada corta perpendicular ca¨ªda (oreja). Un toro de Flores Tassara, para rejoneo. Javier Buend¨ªa: rej¨®n contrario y pinchazo (vuelta). Plaza de la Maestranza, 19 de octubre. Festival pro Proyecto Hombre. Cerca del lleno.
No es que las ver¨®nicas aquellas -de recibo y para el quite- resultaran excelsas, pero estaban bendecidas por la torer¨ªa, ese tesoro desconocido en el actual escalaf¨®n; y los dos o tres que lo poseen, lo custodian celosamente. De ¨¦stos hab¨ªa alguno en el festival.
Curro mulete¨® animoso en los medios aunque demasiado precipitado para asentar el toreo. ?Hecho un pins¨¦ iba? Pues esboz¨® pinceladas: par de redondos, el cambio de mano, el ayudado rodilla en tierra, naturalmente entre ovaciones delirantes, el p¨²blico puesto en pie, porque para eso es el fara¨®n de Camas.
Los toreros comparecieron luciendo sus mejores galas: la chaquetilla verde terciopelo de Pepe Luis V¨¢zquez, la negra de Curro V¨¢zquez, el traje color tabaco Vuelta Abajo de Ortega Cano, los ternos camperos de los restantes pinsele... Y su toreo de escuela.
Capote embarcando con naturalidad fue el de Curro V¨¢zquez. Despu¨¦s, el toro codicioso le comi¨® el terreno en los ayudados, lleg¨® a arrollarle y Curro V¨¢zquez ali?¨® raudo.
El toro quinto, querencioso de salida, desarroll¨® bravura y Rivera Ord¨®?ez no encontr¨® recursos para dominarlo. Desbordado Rivera en las dobladas, sali¨® el toro de ellas recrecido; el torero -valiente que es- cit¨® con la izquierda y al recibir la fiera arrancada, opt¨®, por cortar la faena.
Buenas ver¨®nicas instrument¨® Ortega Cano, derroch¨® empaque en dos tandas de derechazos y a partir de ah¨ª la faena se vino un poco abajo, no tanto porque la hiciera fuera cacho, larga y repetitiva, sino porque el toro era buen¨ªsimo y los pases sab¨ªan a poco.
Pastue?o asimismo ¨¦l ¨²ltimo, D¨¢vila Miura lo tore¨® bien al derechazo y primorosamente al natural, en cuya suerte logr¨® los mejores momentos de su brillante actuaci¨®n.
Hubo m¨¢s pinceladas en la tarde, no se crea. Unas, a caballo -cosa dif¨ªcil, casi de prestidigitaci¨®n-, a cargo de Javier Buend¨ªa, que corri¨® muy bien a la garrocha y prendi¨® banderillas en lo alto. Otras, a pie, a cargo de Pepe Luis V¨¢zquez.
?Suena ese nombre en tauromaquia?: Pepe Luis. Pues muchos ni lo hab¨ªan o¨ªdo nombrar. Y despu¨¦s de llevar horas aplaudiendo, al p¨²blico le entr¨® una especie de ataque de frialdad cuando Pepe Luis V¨¢zquez empez¨® su faena de muleta. Toreaba.y como si se operara. Sin embargo no hay frialdades en cuanto brota el toreo. Y brot¨®, sublime. Dos redondos de Pepe Luis provocaron ol¨¦s estruendosos y el arte se torn¨® j¨²bilo al dibujar un cambio de mano e irse andandito con una torera naturalidad verdaderamente asombrosa.
Torer¨ªa semejante s¨®lo es concebible si se ha mamado. Torer¨ªa semejante, s¨®lo podr¨ªa tenerla el propio Curro. ?Cu¨¢nta, cada cual? Dif¨ªcil problema. De ponerles el torer¨®metro, uno no sabr¨ªa decir qui¨¦n ser¨ªa capaz de alcanzar mayores valores. Naturales, nuevas tandas de redondos, trincheras, pases de pecho y de la firma dio Pepe Luis, y si no le sali¨® redonda la faena, dej¨® en ella la muestra de su personalidad y de su calidad innata.
Pinceladas de arte, creaciones exclusivas menudearon el festival. La misma Maestranza se hab¨ªa transmutado en arte puro. ?Qui¨¦n podr¨ªa pintar ese sol de oto?o dorando los tejadillos del coso? ?Qui¨¦n la Giralda asomando por cima, recortada sobre un cielo azul pur¨ªsima donde se difuminaban tenues nubecillas blancas? ?Qui¨¦n esa p¨¢lida media luna que desde lo alto presenciaba algunos de los mejores lances de la Tauromaquia y se resist¨ªa a anunciar la anochecida? Pero calla, coraz¨®n...
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