22 muertos y 85 heridos al descarrilar un tren

Al menos 22 personas fallecieron ayer y m¨¢s de 85 fueron hospitalizadas a consecuencia del descarrilamiento del Intercity diurno n¨²mero 533, Miguel de Unamuno, que cubr¨ªa la l¨ªnea Barcelona-Hendaya con 248 pasajeros (una ocupaci¨®n del 100%). El mortal accidente ocurri¨® hacia las 19.45 junto a la estaci¨®n de Uharte-Arakil, a 35 kil¨®metros de Pamplona. Seg¨²n narraron varios de los pasajeros, el tren, que se compon¨ªa de cuatro vagones (dos de segunda clase y dos de primera) y locomotora, la n¨²mero 252.039, circulaba gran velocidad cuando repentinamente se sintieron varios frenazos intensos tras lo cual varios vagones del convoy volcaron sali¨¦ndose de la v¨ªa a escasos 30 metros del apeadero de la estaci¨®n del pueblo.

Un trabajador de Renfe indic¨® que este Intercity no ten¨ªa parada en Uharte-Arakil, por lo que su velocidad era elevada. "Ha sido horrible. Hemos escuchado un chasquido tremendo y nuestro vag¨®n ha salido volando por los aires entre los gritos de los pasajeros. Despu¨¦s, no ve¨ªamos nada. Hemos estado mucho tiempo oyendo gritos de dolor y lloros, hasta que los vecinos del pueblo han comenzado a sacarnos y han llegado ya muchas asistencias", subray¨® Carmen, una joven que sollozaba rodeada de maletas mientras sus amigos buscaban desesperados a la madre de la chica.El Intercity Miguel de Unamuno hab¨ªa salido de Barcelona a la una de la tarde y ten¨ªa prevista su llegada a la frontera francesa a las 21.45. Su ¨²ltima parada antes del accidente fue en la estaci¨®n de Pamplona.

"Yo creo que ha sido milagroso. No s¨¦ por qu¨¦ nuestro vag¨®n se ha separado del resto y en este primero no ha pasado nada", relat¨® un joven que viajaba en la primera de las unidades del Intercity y que, preso de los nervios, apenas pod¨ªa hablar. A escasos metros, la locomotora y este vag¨®n permanec¨ªan dentro de las v¨ªas como si nada hubiera ocurrido. Treinta metros m¨¢s atr¨¢s todo era un amasijo de hierros.

En el lugar del accidente ning¨²n portavoz de Renfe ofrec¨ªa en las primera horas explicaci¨®n alguna sobre la hip¨®tesis del suceso, pero se promet¨ªa una r¨¢pida investigaci¨®n sobre el suceso, investigaci¨®n que ha sido encargada a la unidad de negocio de la compa?¨ªa. Fuentes de la Guardia Civil centraban su atenci¨®n en la elevada velocidad del Intercity (al parecer circulaba a m¨¢s de 100 kil¨®metros por hora). Tambi¨¦n desde el Gobierno aut¨®nomo se subrayaba que el tren circulaba muy r¨¢pido. Incluso se hac¨ªa especial menci¨®n a esta circunstancia combinada con alg¨²n posible error en las agujas del trayecto por el que circulaba el tren. En cualquier caso descartaba totalmente la posibilidad de un sabotaje tras una revisi¨®n detenida de la v¨ªa.

El vicepresidente del Gobierno Foral, Rafael Gurrea, inform¨® que se hab¨ªa realizado la prueba de alcoholemia al maquinista y a dos de sus ayudantes. Sus declaraciones coincid¨ªan con una gran confusi¨®n en el n¨²mero de muertos. La propia Renfe lleg¨® a dar la cifra de 26 fallecidos, pero poco despu¨¦s de las doce y media precisaba que hab¨ªa 22 cad¨¢veres, 18 ya identificados y cuatro pendientes de este tr¨¢mite judicial.

M¨¢s de 50 ambulancias procedentes de Pamplona, Vitoria y diversas localidades de Navarra trasladaron a los heridos a los hospitales Navarra, Virgen del Camino, Cl¨ªnica Universitaria de Navarra y Cl¨ªnica San Miguel, en Pamplona, y a los hospitales de Santiago y Txagorritxu, en Vitoria. En Uharte-Arakil, las filas con los cad¨¢veres de los fallecidos pod¨ªan observarse en los arcenes de las v¨ªas del tren cubiertos con mantas.

Un helic¨®ptero de la Polic¨ªa Foral de Navarra que realizaba servicios de vigilancia de la operaci¨®n retorno fue utilizado al menos en cinco ocasiones para trasladar a los heridos m¨¢s graves. Una decena de ellos presentaban pron¨®sticos muy complicados y su vida corr¨ªa serio peligro. Los vecinos del pueblo trasladaron en los primeros momentos a algunos heridos en sus propios veh¨ªculos. En las tareas de rescate y traslado de heridos participaron, asimismo, Guardia Civil, bomberos, Polic¨ªa Foral y Protecci¨®n Civil.

Apenas hab¨ªa testigos de lo sucedido en el pueblo. Asier, un joven de Alsasua que pasaba la tarde con sus amigos en Uharte-Arakil, cont¨® que el tren iba muy veloz y comenz¨® a dar bandazos en la recta de la estaci¨®n. "Hemos visto c¨®mo de repente se han empezado a inclinar los vagones y ha descarrilado. Afortunadamente", coment¨®, "no parec¨ªa haber nadie en ese momento ni en el apeadero de la estaci¨®n ni en los alrededores".El front¨®n de la localidad navarra se convirti¨® a primeras horas de la noche en un improvisado recinto mortuorio donde quedaron depositados los cad¨¢veres para facilitar la identificaci¨®n de los mismos. Por los alrededores de la estaci¨®n algunas personas buscaban, entre grupos electr¨®genos de luz, a familiares y amigos que no aparec¨ªan.