Persecuci¨®n

Jes¨²s de Polanco ha visto c¨®mo el juez G¨®mez de Lia?o prohib¨ªa un viaje suyo a Nueva York para recibir el doctorado honoris causa de una universidad norteamericana. La decisi¨®n ha causado estupor, y si no hubiera sido tomada por un juez, rodeado de los atributos de autoridad propios de la justicia, hubiera causado esc¨¢ndalo y protestas en la calle.Personalmente, no tengo nada que agradecer al se?or Polanco, ni al diario que fund¨®, ni a la empresa que ¨¦l preside. En mis tiempos de dirigente pol¨ªtico fue objeto de la hostilidad de El Pa¨ªs. Eso me da quiz¨¢ m¨¢s autoridad para manifestar mis discrepancias con lo que tiene todo el aire de una caprichosa e injustificable persecuci¨®n. Seg¨²n parece, el se?or Polanco ni siquiera est¨¢ procesado. Se aduce, para impedirle acudir a la ceremonia de imposici¨®n del doctorado, la posibilidad de que en la fecha de su viaje el juez disponga de tiempo pata interrogarle. Si el juez G¨®mez de Lia?o ha tomado tal decisi¨®n, sin duda es que en t¨¦rminos legales puede hacerlo. Pero ?no era posible retrasar unos d¨ªas su interrogatorio? ?Puede alguien en su sano juicio creer que Jes¨²s de Polanco aprovechar¨ªa ese viaje para quedarse en el extranjero y rehuir la acci¨®n de la justicia? ?Iba as¨ª a abandonar el presidente de Prisa los enormes intereses que posee en Espa?a?

Teniendo en cuenta el origen de la denuncia que se tramita contra ¨¦l, parece l¨®gico pensar que es una operaci¨®n pol¨ªtica de la derecha, que enlaza con las decisiones del Gobierno del se?or Aznar para hacerse con el control de la televisi¨®n digital. Nos hallamos en este caso ante uno de los errores m¨¢s notables de dicho Gobierno, que en definitiva parece estar violando los principios de la pol¨ªtica liberal que dice propugnar. Y resulta curiosa la rapidez con que el juez se lanz¨® sobre el caso, sin gran fundamento aparente, y las medidas tomadas contra los denunciados, aun antes de interrogarlos y procesarlos.

El caso quiz¨¢ no resultase tan llamativo si en estos mismos d¨ªas no fuera del dominio p¨²blico el de don Mario Conde, condenado a seis a?os de prisi¨®n, sospechoso de querer rehuir la acci¨®n de la justicia escapando al extranjero, por lo que se le ha impuesto una nueva y cuantiosa fianza. Parece que alguien quisiera dar a entender que existe alguna similitud en ambos casos.

?Qu¨¦ le pasa a la justicia? ?No es la decisi¨®n que concierne al seflor Polanco un abuso de poder?