La supresi¨®n del asilo en la UE fue propuesta por el Gobierno del PSOE y asumida por Aznar
La supresi¨®n del derecho de asilo, para evitar su posible utilizaci¨®n propagandista por el terrorismo, fue una reivindicaci¨®n del Gobierno de Felipe Gonz¨¢lez. Todo naci¨® en el verano de 1993, cuando dos presuntos colaboradores de ETA pidieron asilo pol¨ªtico en B¨¦lgica. La demanda fue admitida a tr¨¢mite y luego denegada, pero el proceso se dilat¨® al oponerse la justicia belga a su extradici¨®n posterior. Desde entonces, tanto el PSOE como el PP han exigido la total supresi¨®n del asilo pol¨ªtico en el interior de la Uni¨®n Europea (UE).
El ministro socialista Carlos Westendorp advirti¨® en Bruselas a sus colegas de Exteriores de la Uni¨®n Europea (UE), que Espa?a bloquear¨ªa la reforma de Maastricht si no inclu¨ªa esa petici¨®n. Ser¨ªa "imposible" que el Parlamento espa?ol ratificase la reforma sin esa exigencia, adujo el 26 de febrero de 1996, reiterando argumentos de su colega de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch. Tuvo "pleno respaldo" del entonces portavoz popular en la Comisi¨®n Mixta de Asuntos Exteriores, Rafael Arias-Salgado: "Si el PP gana las pr¨®ximas elecciones continuaremos con esa l¨ªnea de actuaci¨®n, que consideramos positiva".Fiel a su estrategia continuista de la pol¨ªtica europea seguida por el Ejecutivo socialista, el Gobierno Aznar envi¨® a finales de septiembre de 1996 a la Conferencia Intergubernamental (CIG), que tiene encomendada la reforma de Maastricht, un texto en el que razonaba que todos los Estados miembros de la UE "deben respetar los derechos fundamentales", por lo que "resulta contradictorio e injustificable que un nacional de un Estado miembro pueda ser acogido en otro Estado miembro como refugiado o asilado pol¨ªtico".
Para consagrar dicha filosof¨ªa, Espa?a propon¨ªa a?adir un p¨¢rrafo al art¨ªculo 8 del Tratado de la Comunidad Europea, con la siguiente redacci¨®n literal: "Todo ciudadano de la Uni¨®n ser¨¢ considerado, a todos los efectos legales y judiciales relacionados con la concesi¨®n del estatuto de refugiado y cuestiones de asilo, como nacional del Estado miembro ante el que solicita asilo. En consecuencia, ning¨²n Estado de la Uni¨®n admitir¨¢ a tr¨¢mite una petici¨®n de asilo o refugio formulada por un nacional de otro Estado de la Uni¨®n".
"Examine" por"desarrolle"
Espa?a llev¨® esta propuesta a la primera cumbre de Dubl¨ªn, el 5 de octubre y la reiter¨® ante la Dubl¨ªn-II (12 y 13 de diciembre). A propuesta de Francia, las conclusiones de la presidencia incluyeron el siguiente p¨¢rrafo: "El Consejo Europeo pide a la Conferencia [Intergubernamental] que desarrolle la importante propuesta de modificar los Tratados para establecer como un principio claro que ning¨²n ciudadano de un Estado miembro de la Uni¨®n pueda solicitar asilo en otro Estado miembro, teniendo en cuenta los tratados internacionales". Esta redacci¨®n favorec¨ªa a¨²n m¨¢s a la posici¨®n espa?ola que el borrador, porque ¨¦ste ped¨ªa que la CIG "examine", en vez de "desarrolle". La menci¨®n a los tratados internacionales fue incluida a iniciativa de pa¨ªses recelosos ante esta conclusi¨®n.
El presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, consider¨® "un ¨¦xito" este compromiso pol¨ªtico y el resultado de la cumbre, cuyas conclusiones, dijo, "dan satisfacci¨®n a las demandas espa?olas", especialmente las referidas a la creaci¨®n de un espacio judicial europeo, y entre ellas la del asilo.
"Espaldarazo a Espa?a para acabar con el asilo pol¨ªtico dentro del marco europeo", titul¨® EL PA?S en su edici¨®n del d¨ªa 15. "Espa?a logra que la reforma de Maastricht incluya la prohibici¨®n del asilo pol¨ªtico" titul¨® La Vanguardia. "Aznar logra eliminar el derecho de asilo entre los pa¨ªses de la UE", encabez¨® su primera p¨¢gina El Mundo. "Aznar logra eliminar el asilo en la UE", reiteraba en su p¨¢gina 9. "Fin del asilo pol¨ªtico en la UE", titulaba su editorial.
Poco despu¨¦s, el Alto Comisionado para los Refugiados de la ONU (ACNUR) y Amnist¨ªa Intemacional criticaron este compromiso porque a su juicio podr¨ªa vulnerar los convenios de Ginebra y Roma sobre asilo y refugiados. Aumentaron los recelos de pa¨ªses con tradici¨®n de acogida, sobre todo los escandinavos y Francia. Muchos de ellos tem¨ªan adem¨¢s tener que reformar sus Constituciones, y para ello, afrontar consultas populares. En un Consejo de ministros de Exteriores -el del 24 de febrero de 1997-, el ministro Abel Matutes consider¨® "irreversible" el acuerdo de Dubl¨ªn-II. Y a?adi¨®: "Para Espa?a, ¨¦sta es la prioridad de las prioridades, porque no hay delito pol¨ªtico en pa¨ªses democr¨¢ticos, y ni siquiera contemplo la posibilidad de que se diera marcha atr¨¢s" sobre lo decidido en Dubl¨ªn.
Por estas mismas fechas, un documento oficial elaborado en Exteriores, que se titulaba "Memor¨¢ndum de Espa?a sobre la inadmisibilidad del asilo para ciudadanos de la Uni¨®n" (el confidencial 3820/97) reiteraba los argumentos pol¨ªticos y jur¨ªdicos tradicionales espa?oles. E indicaba: "El asilo para nacionales de los Estados miembros tendr¨ªa que haber quedado ya por completo superado por innecesario".
El d¨ªa 4 de marzo, en una cumbre del Partido Popular Europeo (PPE) en Bruselas, Aznar insisti¨® una vez en m¨¢s en defender la supresi¨®n del asilo, pese a las dudas de algunos socios. Declar¨® textualmente: "Quiero decir que, sabiendo que hay dificultades que vencer, espero que se llegue a una conclusi¨®n positiva al t¨¦rmino de la Conferencia Intergubernamental sobre algo que me parece absolutamente esencial y elemental, que es que no puede haber derecho de asilo entre ciudadanos nacionales de pa¨ªses miembros de la Uni¨®n Europea. He cogido una impresi¨®n favorable [durante la reuni¨®n con los l¨ªderes del PPE], muy comprensible y muy deseosa de ayudar a la posici¨®n espa?ola en ese punto", a?ad¨ªa.
En la reuni¨®n de la CIG de ayer y anteayer, entre representantes personales de los ministros de Exteriores, Espa?a present¨® su nueva propuesta: mantener el derecho de asilo, pero s¨®lo en casos muy acotados.
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