Los congresistas barajan hasta cinco candidatos

Contrarreloj. La familia socialista era anoche un hervidero de rumores y nombres con posibilidades de sustituir a Felipe Gonz¨¢lez. En esta intensa carrera, que tendr¨¢ ganador ma?ana mismo, suenan candidatos para todos los gustos: Joaqu¨ªn Almunia, Manuel Chaves, Ram¨®n J¨¢uregui, Josep Borrell y Francisco V¨¢zquez conforman la quiniela con mayor n¨²mero de apostantes. Pasqual Maragall, que dejar¨¢ la alcald¨ªa de Barcelona en septiembre, se ha autodescartado.

Para irritaci¨®n de algunos secretarios regionales, el de Joaqu¨ªn Almunia fue el nombre que con m¨¢s fuerza empez¨® a pronunciarse como posible sucesor de Felipe Gonz¨¢lez. Pero el propio Almunia, diputado por Madrid, responsable de estudios y programas del PSOE y portavoz del ' Grupo Parlamentario Socialista, se apresur¨® a rogar a los periodistas que disiparan tal rumor. Su nombre brot¨® inmediatamente despu¨¦s de que Gonz¨¢lez dejara el sitio libre. Tambi¨¦n de inmediato, sin embargo, se entabl¨® un forcejeo entre lo que algunos definieron como ', centro contra periferia", o lo que es lo mismo, aparato y dirigentes sin tropa contra barones.La sorpresa que ha deparado al PSOE la decisi¨®n de Gonz¨¢lez se puso de manifiesto a lo largo del d¨ªa de ayer por el hecho de que no m¨¢s de cinco nombres brotaran de entre los casi 1.000 asistentes al congreso.

Los secretarios regionales pronto quisieron tomar las riendas y se autoconvocaron para una cita nocturna, a la que tambi¨¦n acudi¨® el secretario de Organizaci¨®n, Cipri¨¢ Ciscar. Antes hab¨ªan escuchado el nombre de Almunia, y tras alabar sus dotes pol¨ªticas e intelectuales, intentaron descartarlo por estimar que "lo l¨®gico" es que el sustituto de Gonz¨¢lez sea alguien que tenga tras de s¨ª poder institucional y haya demostrado, por tanto, contar con suficiente respaldo social y org¨¢nico. Es decir, uno de ellos mismos.

La cena con los barones termin¨® sin acuerdo y con otros cuatro nombres sobre la mesa, los de Ram¨®n J¨¢uregui, Josep Borrell, Manuel Chaves y Francisco V¨¢zquez. La cita tendr¨¢ continuaci¨®n hoy a las 13 horas, y en esta ocasi¨®n se sumar¨¢ al encuentro Gonz¨¢lez.

Los secretarios regionales consultar¨¢n antes con las delegaciones, seis de las cuales (Madrid, Catalu?a, Pa¨ªs Vasco, Canarias, Castilla y Le¨®n y Arag¨®n) s¨ª ven con agrado la candidatura de Almunia. Andaluc¨ªa, la m¨¢s importante, no se ha definido a¨²n.

El candidato, en cualquier caso, tendr¨¢ que ser consensuado con los congresistas, ya que la mayor¨ªa de ellos est¨¢n dispuestos a plantar cara a sus respectivos secretarios generales animados por los requerimientos de Gonz¨¢lez para que sean ellos quienes decidan "con responsabilidad" qu¨¦ es lo que quieren para el partido.

Los ex ministros que circulaban por el congreso tambi¨¦n apostaban por Almunia y no quer¨ªan saber nada de secretarios regionales. "Tiene que ser un diputado", argumentaban, como primera medida para que tenga repercusi¨®n social.

El l¨ªder de los socialistas de Euskadi, Ram¨®n J¨¢uregui, fue. mencionado por un nutrido grupo de delegados ajenos a su propia federaci¨®n, que parad¨®jicamente se decanta por Almunia. J¨¢uregui, cuando se vio rodeado por los periodistas, alz¨® las manos con esta exclamaci¨®n: "?Yo no soy candidato a nada!". Claro que Almunia. lo dec¨ªa con mayor contundencia todav¨ªa.

Al escuchar el nombre de Almunia, algunos secretarios regionales manifestaban que si ¨¦sa es la soluci¨®n, "no ser¨¢ el heredero, sino un albacea". ?Albacea de qui¨¦n? La respuesta era: de Javier Solana, el secretario general de la OTAN y miembro, de la ejecutiva saliente, que se incorporo a primeras horas de la tarde al congreso. Solana tiene por delante su mandato al frente de la Alianza Atl¨¢ntica.

Manuel Chaves, presidente de la Junta de Andaluc¨ªa, era citado desde primera hora por algunos delegados, si bien la mayor¨ªa acud¨ªa al cl¨¢sico refr¨¢n de "no se puede desnudar a un santo para vestir a otro". La presidencia de la Junta es una tarea que Chaves no debe abandonar, seg¨²n razonaba la mayor¨ªa andaluza.

Eso s¨ª, lo que diga Chaves puede ser definitivo para la elecci¨®n del nuevo secretario. Andaluc¨ªa aporta m¨¢s del 30% de los votos de los delegados. El sur, sumado a los votos de Catalu?a, configura una mayor¨ªa determinante.