Los 'barones' ocupan en dos d¨ªas el vacio de Gonz¨¢lez
Almunia se rodea de los art¨ªfices de la renovaci¨®n contra el guerrismo en la nueva direcci¨®n socialista
Felipe Gonz¨¢lez abandona la c¨²pula del PSOE apoyando con entusiasmo a su sucesor en la secretar¨ªa general, Joaqu¨ªn Almunia, pero sin ver cumplidos los deseos de renovaci¨®n que ¨¦l predic¨® con el ejemplo. En su salida se llev¨® por delante, adem¨¢s, a Alfonso Guerra y a Txiki Benegas, los otros dos supervivientes del congreso de Suresnes de 1974. Su deseo de que en la nueva Comisi¨®n Ejecutiva Federal no hubiera secretarios regionales no se ha cumplido. Joaqu¨ªn Almunia, sin embargo, puede sentirse c¨®modo con el equipo que trabajar¨¢, art¨ªfices con ¨¦l del movimiento de renovaci¨®n que empez¨® hace seis a?os. La presencia del 40% de mujeres se ha cumplido a rajatabla y, por primera vez, entra en la ejecutiva una representante de Izquierda Socialista.
"Felipe Gonz¨¢lez me ha dicho esta ma?ana que soy de los pocos que no ten¨ªa cerumen en los o¨ªdos cuando pronunci¨® su discurso y por eso entiende que no est¨¦ en la ejecutiva". Estas fueron las palabras del presidente de Extremadura, Juan Carlos Rodr¨ªguez Ibarra, antes de abandonar el Congreso. Joaqu¨ªn Almunia, sin embargo, insinu¨® ayer que Rodr¨ªguez Ibarra estuvo a punto de entrar en la ejecutiva pero de madrugada "alguien instig¨® para lo contrario".A pesar de la noche en blanco Joaqu¨ªn Almunia no perdi¨® el humor, como se observ¨® por su respuesta a la afirmaci¨®n de que esta ejecutiva es de barones: "Que yo vea hay casi tantas hembras como varones". Con esta broma, Almunia deja clara su tranquilidad ante la situaci¨®n creada. La ejecutiva la han hecho los barones, pero ¨¦l tiene el prestigio y la capacidad pol¨ªtica suficiente como para hacerse con el control y no ser un secretario general secuestrado, seg¨²n reconocen la mayor¨ªa de los l¨ªderes regionales. Es m¨¢s, son sus amigos y con ellos comenz¨® hace a?os el movimiento de la renovaci¨®n contra el guerrismo.
"Felipe Gonz¨¢lez ha querido que pas¨¢ramos de Suresnes al siglo XXI en 48 horas y eso no puede ser". As¨ª se expresaba un nuevo miembro de la ejecutiva como justificaci¨®n de que la renovaci¨®n provocada por el l¨ªder socialista se hubiera quedado en agua de borrajas. No hab¨ªa otra alternativa, a decir de los secretarios regionales; ellos ten¨ªan que ocupar el poder. Los cantos de sirena que se escucharon en el 34? congreso llamando a la participaci¨®n de las bases fueron acallados de inmediato por los l¨ªderes territoriales.
Y es que las voces que se escucharon en la noche del s¨¢bado -"?Que voten las bases"!- se les antojaron irresponsables para un partido que cuenta con m¨¢s de trece a?os de Gobierno a la espalda y con aspiraciones de volver al Ejecutivo.
Los secretarios regionales hicieron uso de los instrumentos que les ofrece un modelo de partido que desde 1977 se basa en el reparto de poder entre los l¨ªderes territoriales. La posibilidad de que dirigentes y candidatos electorales sean designados por el sistema de elecciones primarias ha quedado apuntada en este congreso y "poco a poco" se abrir¨¢ paso, aseguran.
"No sab¨ªamos c¨®mo ibamos a iniciar esta etapa; ah¨ª Felipe nos gan¨® por la mano, nos sorprendi¨® a todos y nos ha puesto ante nuestras responsabilidades", dec¨ªa Almunia en la clausura. La votaci¨®n de la Comisi¨®n Ejecutiva Federal indica el estado del partido con el que se encuentra y, en principio, le resulta tranquilizador.
Un 73% a favor y un 24,44% en blanco, sin¨®nimo de rechazo en un sistema de votaci¨®n en el que s¨®lo se puede votar en contra de una lista si existe otra lista alternativa. Ese abultado apoyo significa que las delegaciones, tras ciertas amenazas levantiscas, se identificaron con las tesis de sus secretarios regionales. Ese casi 25% lo nutre el guerrismo disperso y la contestaci¨®n interna de algunos barones, seg¨²n propio reconocimiento de los l¨ªderes guerristas que no quisieron apropiarse de todo el bloque disidente.
Los guerristas prefirieron ayer abrazar el pensamiento de Gonz¨¢lez para sostener que lo ocurrido dista mucho de lo que ¨¦l quer¨ªa. No hay ejecutiva peque?a, est¨¢ repleta de secretarios generales y el llamado Consejo Territorial, creado por la insistencia de Cipri¨¤ Ciscar como homenaje de lealtad a Felipe Gonz¨¢lez por ser una petici¨®n suya, tendr¨¢ una significaci¨®n relativa. Sus componentes son los secretarios regionales, pero los de m¨¢s peso ya est¨¢n en la ejecutiva, que es "donde hay que estar", como dec¨ªan algunos de ellos antes de empezar el congreso.
Ahora, los delegados intentar¨¢n llevar a los congresos regionales los aires de renovaci¨®n. "Aunque los secretarios regionales no han atendido el mensaje de renovaci¨®n comprobar¨¢n que la bandera del cambio surgir¨¢ por toda Espa?a", dec¨ªa un delegado valenciano. Algo no muy diferente expresaba el ex ministro Juan Alberto Belloch, cabeza de delegaci¨®n en este congreso por Zaragoza. "La onda expansiva de renovaci¨®n se trasladar¨¢ a los congresos regionales", predijo, no sin antes mostrar su apoyo a la nueva ejecutiva.
La inclusi¨®n de Ram¨®n J¨¢uregui, secretario general de los socialistas vascos, y de Joan Lerma, secretario general de los valencianos, en puestos de dedicaci¨®n completa tienen una especial significaci¨®n. Ambos renuncian a las baron¨ªas de sus territorios. J¨¢uregui aguardar¨¢ todav¨ªa al mes de octubre para dejar el puesto en el partido, ya que su congreso es en octubre. Lerma se despedir¨¢ de los valencianos la pr¨®xima semana, que es cuando empieza el congreso regional.
Ambos est¨¢n por la renovaci¨®n. Los guerristas, sin embargo, no ven que ¨¦sta se haya producido. ?sta es la raz¨®n que esgrimi¨®, desde la madrugada hasta "las diez y cuarto de la ma?ana", Juan Carlos Rodr¨ªguez Ibarra para rechazar la oferta de Almunia de estar en la ejecutiva. El presidente extreme?o cont¨® a este diario que la oferta era s¨®lo para ¨¦l. Despu¨¦s se ofreci¨® un hueco para otros dos guerristas: Francisco Fern¨¢ndez Marug¨¢n y Josefa Pardo. S¨®lo de vocales, sin cartera.
Fern¨¢ndez Marug¨¢n era hasta ayer responsable de Administraci¨®n y Finanzas, y su labor ha sido alabada por todos los sectores. No pod¨ªa ser. "Cuando se ha sido coronel, no se puede pasar a ser cabo", dec¨ªa Ibarra. Esta actitud no le impide decir que "esta es su ejecutiva", que la respeta y apoya. Todos lamentaron la ausencia, en particular, de Rodr¨ªguez Ibarra y, en general, del sector guerrista.
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