La econom¨ªa creci¨® un 2,9% el primer trimestre apoyada en el repunte del consumo y la inversi¨®n

El producto interior bruto (PIB), el conjunto de bienes y servicios que produce la econom¨ªa, aument¨® un 2,9% en el primer trimestre del a?o sobre el mismo periodo del a?o anterior. Esta cifra, que confirma la solidez de la recuperaci¨®n econ¨®mica, es tres d¨¦cimas superior al 2,6% que creci¨® el PUB el trimestre anterior. El consumo privado, que creci¨® un 2,8%, la inversi¨®n (aumento del 1,4%) y la a¨²n fuerte aportaci¨®n del sector exterior han sido los principales motores de esta expansi¨®n. En contraste, el consumo p¨²blico y la inversi¨®n en construcci¨®n volvieron a caer. La mayor¨ªa de os expertos coincide con el Gobierno en que el crecimiento de todo el a?o superar¨¢ a previsi¨®n oficial del 3%.

Los datos de la contabilidad nacional del primer trimestre, dados a conocer ayer por el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE), confirman la buena marcha de la econom¨ªa espa?ola. Desde los dos primeros trimestres de 1995, cuando se consolid¨® la recuperaci¨®n tras la recesi¨®n, el PIB no crec¨ªa a tasas tan altas como el 2,9% registrado en los tres primeros meses de este a?o.Los factores que explican ese crecimiento son, sin embargo bastante distintos. La diferencia m¨¢s destacable es el mayor dinamismo de la demanda interna. Creci¨® un 1,6%, tres d¨¦cimas m¨¢s que el trimestre anterior, gracias a la mejora del empleo, los bajos tipos de inter¨¦s y la mayor confianza en la incorporaci¨®n de Espa?a a la uni¨®n monetaria europea.

El consumo privado es el componente de la demanda que m¨¢s repunta, en consonancia con la mejora de la confianza de los consumidores. Su tasa de crecimiento se aceler¨® notablemente, del 2,4% del ¨²ltimo trimestre de 1996 al 2,8% del primero de 1997, un ritmo que no se registraba desde mediados de 1992. La inversi¨®n en bienes de equipo aument¨® un 7,8%, la tasa m¨¢s alta desde 1995.

La importante contribuci¨®n de la inversi¨®n en bienes de equipo y del consumo privado al crecimiento de la demanda interna se ve algo eclipsada por las tasas negativas de la inversi¨®n en construcci¨®n y del consumo p¨²blico. Con todo, en la construcci¨®n se ha producido un cambio en la tendencia fuertemente a la baja de trimestres anteriores. Cay¨® un 2,3% frente al 4,2% que retrocedi¨® entre octubre y diciembre de 1996.

La ligera reactivaci¨®n de la obra p¨²blica y la edificaci¨®n no residencial son algunas de las razones que da el INE para explicar este a¨²n modesto cambio de tendencia en la construcci¨®n.

El consumo p¨²blico sigue contray¨¦ndose, como reflejo del esfuerzo del Gobierno para reducir el d¨¦ficit prespuestario con el fin de cumplir los criterios de convergencia. Baj¨® un 1,5%, frente al 1,1% que hab¨ªa retrocedido el trimestre anterior.

Una de las sorpresas que han revelado los datos conocidos ayer fue el elevado ritmo de crecimiento que siguen mostrando las exportaciones, que aumentaron un 11,2%, por debajo del 13,2% del terimestre anterior. Las importaciones crecieron un 6,4%, tambi¨¦n menos que el 8,2% del periodo precedente. Como resultado, la contribuci¨®n de la demanda exterior neta al crecimiento del PIB fue de 1,3 puntos.

Los economistas del servicio de estudios del BCH consideran que el sector exterior reducir¨¢ su aportaci¨®n al crecimiento del PIB respecto al pasado a?o, debido a la previsible recuperaci¨®n de las importaciones ,la medida que la demanda interna cobre mayor impulso".

Por el lado de la oferta, la industria se consolida como motor del crecimiento (3,9%) seguida de los servicios (2,6%). As¨ª, el llamado PIB no agr¨ªcola aument¨® un 2,5%, muy por encima del 1,6% que se increment¨® en el mismo periodo de 1996. La agricultura y la pesca siguen creciendo a tasas cercanas al 12%, un buen ritmo pero que refleja una tendencia a la desaceleraci¨®n tras los escelentes resultados del a?o pasado.