La Seguridad Social dejar¨¢ de financiar los gastos asistenciales y no contributivos

Una de las novedades que introduce la conocida como ley de pensiones se refiere a la separaci¨®n de las fuentes de financiaci¨®n de la Seguridad Social.La normativa establece que las pensiones contributivas se financien exclusivamente con las cotizaciones de los trabajadores y empresas a la Seguridad Social y que los gastos de naturaleza asistencial, incluida la sanidad, se cubran con cargo a los Presupuestos Generales del Estado de cada ejercicio, es decir, que los ciudadanos las paguen a trav¨¦s de los impuestos recaudados.

El Pacto de Toledo establece que la separaci¨®n gradual de las fuentes de financiaci¨®n debe estar culminada en el a?o 2002.

Se considera que es contributiva toda prestaci¨®n econ¨®mica de la Seguridad Social, incluidas las previstas para los casos de accidente de trabajo o enfermedad laboral. Tendr¨¢n la consideraci¨®n de asistenciales o no contributivas las prestaciones sanitarias, las pensiones no contributivas por jubilaci¨®n o invalidez, los complementos a m¨ªnimos de las pensiones p¨²blicas y las asignaciones econ¨®micas del Estado por tener hijos a cargo.

La nueva normativa contempla la creaci¨®n de un fondo de reserva con cargo a los excedentes de cotizaciones sociales que puedan resultar de la liquidaci¨®n de los Presupuestos de la Seguridad Social en cada ejercicio econ¨®mico. De acuerdo con lo pactado, ese fondo deber¨ªa servir para hacer uso de ¨¦l cuando se produzca un d¨¦ficit de cotizaciones

Lejos de ese objetivo se ha colocado la CEOE, que no firm¨® el Pacto de Toledo respaldado por la mayor¨ªa parlamentaria. La patronal estima que ese excedente supera en la actualidad los 1,5 billones de pesetas, lo que a su juicio, permitir¨ªa una rebaja de las cotizaciones.

UGT y CC OO saludaron ayer la entrada en vigor de la ley. Seg¨²n los sindicatos, la ley de pensiones aglutina tres objetivos defendidos por las centrales: el mantenimiento y la mejora del sistema p¨²blico de protecci¨®n social; refuerza la solidaridad interna del sistema y fortalece su car¨¢cter contributivo, y permite una mayor participaci¨®n sindical.