Los partidos vascos dudan de que las disensiones internas en HB modifiquen su sumisi¨®n a ETA
Los partidos vascos ven con escepticismo la posibilidad de que las cr¨ªticas a ETA surgidas en el seno de Herri Batasuna impliquen un giro en su acci¨®n Pol¨ªtica que la lleve a despegarse de su sumisi¨®n a la organizaci¨®n terrorista. En pleno proceso de renovaci¨®n de su ejecutiva, tras el encarcelamiento de su Mesa Nacional por colaboraci¨®n con banda armada, los cr¨ªticos de la coalici¨®n abertzale entienden que los atentados de ETA boicoean la actividad pol¨ªtica de construcci¨®n nacional que debe impulsar HB con los grupos nacionalistas del llamado tercer espacio.
Los dirigentes de las formaciones vascas, ven dif¨ªcil que el debate abierto en la coalici¨®n termine por imprimir un giro en la l¨ªnea pol¨ªtica de la izquierda radical. Carmelo Barrio, secretario general del PP vasco, expres¨® sus dudas respecto a que se est¨¦ "moviendo algo" en la formaci¨®n abertzale. Aunque admiti¨® que pueda haber voces discrepantes en HB, cree que "hoy por hoy lo que prima es la l¨ªnea dura, absolutamente sometida a las directrices de ETA, y pensar otra cosa ser¨ªa dar una orientaci¨®n que no es real".El portavoz del PNV en el Congreso, I?aki Anasagasti, afirm¨® por su lado que mientras "ETA no se mueva", nada se mover¨¢ en el entorno del Movimiento de Liberaci¨®n Nacional Vasco (MLNV), tal y como le ha comentado recientemente el ex dirigente de HB I?aki Esnaola. Lo dem¨¢s son "cantos de sirena", dijo.
S¨®lo el coordinador general de IU-EB, Javier Madrazo, ve con cierta esperanza el debate en el seno de HB. En su opini¨®n, el claro posicionamiento de la sociedad vasca en contra de la violencia no est¨¢ dejando indiferente al mundo del MLNV. "Hay bastante movimiento, reflexi¨®n y debate ah¨ª dentro", dijo, para a?adir que cuanto m¨¢s tiempo tarden en HB en darse cuenta de la realidad, m¨¢s sufrimiento producir¨¢n a la sociedad. Por su parte, el portavoz socialista en el Congreso para asuntos de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, dijo ayer en Zaragoza que se niega "a distinguir. entre sectores duros y blandos en Herri Batasuna". "El mundo de HB no merece m¨¢s atenci¨®n que constatar que es brazo pol¨ªtico de una organizaci¨®n terrorista. Lo que hagan en su interior es un problema de poder interno que no debe merecer la atenci¨®n de las personas decentes", zanj¨®.
Nueva Mesa Nacional
HB est¨¢ en estos momentos en pleno proceso electoral para elegir en el plazo de un mes una nueva ejecutiva. La Mesa Nacional que salga de este debate entre quienes siguen apostando por el respaldo total a ETA y quienes abogan por fomentar los puntos de encuentro con sectores nacionalistas moderados ser¨¢ decisivo para el futuro de la izquierda abertzale.
El asesinato de Jos¨¦ Luis Caso -cuyo efecto inmediato fue la desconvocatoria, prevista para el pasado d¨ªa 13 de noviembre, de la. primera movilizaci¨®n conjunta del llamado tercer espacio, aglutinado en torno a los sindicatos vascos ELA y LAB, con HB- ha provocado una gran convulsi¨®n interna y ha incrementado las filas del sector cr¨ªtico que, por vez primera, ha expresado su censura sin tapujos.
Estas dos tendencias han, estado siempre latentes en la izquierda abertzale, que ya debati¨® sobre la oportunidad o no de la violencia de ETA en el proceso que se sigui¨® en 1995 para aprobar la ponencia Oldartzen, que hoy rige la acci¨®n pol¨ªtica de la coalici¨®n. Hace dos a?os, ETA y KAS impusieron sus tesis y varios dirigentes hist¨®ricos partidarios de la moderaci¨®n -entre ellos ??igo Iruin y Patxi Zabaleta, abogados de sus compa?eros de la c¨²pula de HB en el juicio que les conden¨®- abandonaron la Mesa Nacional para dejar paso a a los j¨®venes cachorros de Jarrai, proclives a aplicar la pol¨ªtica de "desestabilizaci¨®n y de socializaci¨®n del dolor" impulsada desde ETA.
Estos dirigentes hist¨®ricos tomaron nota de la autocr¨ªtica realizada por el responsable de Organizacion de HB, Rufi Etxeberria, antes de ser encarcelado. Etxeberr¨ªa admiti¨® que la ejecutiva de la que formaba parte hab¨ªa errado aplicando exclusivamente la l¨ªnea desestabilizadora de la ponencia Oldartzen y descuidando el, fomento, en paralelo, de la l¨ªnea de "cintura pol¨ªtica" que sumara apoyos de determinados sectores sociales y pol¨ªticos del nacionalismo no violento.
En la propia ETA ha calado el malestar por la situaci¨®n cr¨ªtica en la que se encuentra la izquierda abertzale, seg¨²n reconocen fuentes del MLNV. Seg¨²n dichas fuentes, antiguos dirigentes etarras hoy encarcelados responsabilizan al actual jefe del aparato pol¨ªtico, Mikel Albisu, Antza, del fracaso que ha tenido la puesta en pr¨¢ctica de la estrategia Oldartzen, que ha ahogado todos los esfuerzos de contacto que, en paralelo, se han hecho desde el sindicato abertzale LAB y otros sectores.
Todo ello ha alimentado en amplios sectores de la izquierda abertzale radical el convencimiento de que es el momento de reorientar hacia la moderaci¨®n y el posibilismo a la nueva Mesa Nacional de HB que resultar¨¢ elegida a finales de enero. En el seno de la coalici¨®n. se debate incluso la posibilidad de incorporar a la nueva direcci¨®n a personas que han disentido de la ejecutiva encarcelada, lo que podr¨ªa interpretarse como una autocr¨ªtica que traer¨ªa aparejada una nueva orientaci¨®n de la acci¨®n pol¨ªtica. Pero el atentado de ETA contra Jos¨¦ Luis Caso parece haber dejado de nuevo las cosas en su sitio.
As¨ª puede deducirse tambi¨¦n de la doctrina que ayer impart¨ªan desde las p¨¢ginas del diario Egin los dos portavoces provisionales de HB, Arnaldo Otegi y Joseba Permach, las caras oficiales de una direcci¨®n m¨¢s numerosa. pero oculta encargada de dirigir el importante proceso electoral. Ambos portavoces sosten¨ªan ayer la misma postura que mantuvo ETA en su comunicado del viernes y tambi¨¦n criticaban a los, promotores del tercer espacio al afirmar que los atentados de ETA -a los que,denominan "acontecimientos coyunturales"- no deben condicionar su actuaci¨®n pol¨ªtica.
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