Una divertida comedia realista

Durante los primeros 90 a?os de historia del cine espa?ol, tan s¨®lo debutan seis mujeres como directoras, pero en los ¨²ltimos 10 han aparecido unas 20 nuevas realizadoras. Chus Guti¨¦rrez es la ¨²nica que ha conseguido dirigir cuatro largometrajes en una progresi¨®n ascendente de calidad.Tras las esforzadas Realquiler (1991), un fallido intento de comedia realizado en Nueva York, y Sexo oral (1994), un documental alargado, Chus Guti¨¦rrez demuestra que sabe lo que tiene entre manos con Alma gitana (1995), una comedia rom¨¢ntica de encargo.

Con Insomnio, Chus Guti¨¦rrez ha podido trabajar sobre unos materiales que le interesan. El resultado es una divertida comedia que funciona con perfecci¨®n y demuestra que es una directora capaz de llevar a buen t¨¦rmino los m¨¢s complejos proyectos. En la medida en que Insomnio entrecruza con habilidad tres historias, donde intervienen m¨²ltiples personajes, y se mueve con facilidad entre situaciones que van de la pura comedia al drama.

Insomnio narra la historia de tres parejas j¨®venes durante un caluroso verano y las razones que les llevan a perder el sue?o. Por un lado, aparece una publicitaria que acaba de dar a luz a una ni?a y por este motivo se siente marginada en su trabajo y en su vida. Luego est¨¢ su desesperada vecina, a quien ha dejado su novio, lo que le lleva a acostarse con cuantos hombres se cruzan en su camino y tambi¨¦n a mentir sin parar. Mientras, un agente inmobiliario, situado entre ambas mujeres, hace lo imposible por retrasar su inmediata boda.

Int¨¦rpretes

Con estos elementos, muy bien ensamblados en un gui¨®n original de Juan Flahn, Fernando Le¨®n y la propia realizadora, Chus Guti¨¦rrez hace una divertida comedia que se apoya en la vida cotidiana para conseguir sus mejores momentos. Rodada con gran habilidad y destreza t¨¦cnica, el conjunto tiene un ritmo r¨¢pido, que nunca decae, hasta convertirse en un trabajo redondo apoyado en la actuaci¨®n de un espl¨¦ndido grupo de actores.Entre los cinco int¨¦rpretes destaca Candela Pe?a, que, gracias al dramatismo que logra dar a su personaje de abandonada, consigue una muy particular comicidad. Ernesto Alterio funciona con perfecci¨®n en su papel de hombre que no est¨¢ dispuesto a casarse con su novia de siempre. Cristina Marcos y Mar¨ªa Pujalte tambi¨¦n consiguen que sus personajes tengan el suficiente atractivo.