Bruselas confirma la congelaci¨®n de las ayudas al olivar y la agricultura mediterr¨¢nea

La Comisi¨®n Europea aprob¨® ayer los reglamentos de la llamada Agenda 2000 para reformar las pol¨ªticas internas de la Uni¨®n Europea. El resultado es agridulce para Espa?a. Positivo en pol¨ªticas de cohesi¨®n, bien y mal al mismo tiempo en el conjunto agr¨ªcola y muy negativo para el aceite de oliva. Bruselas acab¨® anteponiendo la reducci¨®n del gasto comunitario y se neg¨® a aumentar las partidas destinadas al olivar.La Agenda 2000, que deber¨¢ ahora pasar el cedazo del Consejo de Ministros, es el marco de reparto del presupuesto de la UE en el periodo 2000-2006. Pese a la espectacularidad de las cifras (casi 46 billones de pesetas para fondos estructurales y ayudas para la preadhesi¨®n de los pa¨ªses del Este y cerca de 48 billones para la agricultura) es un plan muy conservador, con una l¨ªnea descendente en las aportaciones de los socios Aunque el l¨ªmite actual de gasto es el 1,27% del producto interior bruto (PIB) comunitario, la Comisi¨®n prev¨¦ que bastar¨¢ con una aportaci¨®n del 1,24% en el a?o 2000 y de s¨®lo el 1,13% en el 2006.

La Comisi¨®n se neg¨® ayer a aumentar los fondos para la reforma del sector del aceite de oliva. Los comisarios aprobaron sin modificaci¨®n la propuesta del titular de Agricultura, Franz Fischler, con el voto en contra de los dos espa?oles, Manuel Mar¨ªn y Marcelino Oreja, y del portugu¨¦s, Joao de Deus Pinheiro. Aprobaron tambi¨¦n un compromiso pol¨ªtico para acordar en el futuro ayudas para la aceituna de mesa, aunque no qued¨® por escrito la magnitud. El resto queda como ya se sab¨ªa: 625.210 toneladas de aceite con derecho a subvenci¨®n para Espa?a, 501.175 para Italia, 389.038 para Grecia, 43.915 para Portugal y 3.065 para Francia.

Los avances en las discusiones del martes por la noche, despu¨¦s de una intervenci¨®n muy pol¨ªtica de Mar¨ªn apoyada por Oreja, quedaron ayer en agua de borrajas. En buena parte, por la implacable negativa de los comisarios n¨®rdicos a subir los gastos y en parte por la escasa disposici¨®n mostrada por el Gobierno espa?ol para sacrificar otras partidas en beneficio del aceite.

La t¨¢ctica negociadora de la ministra espa?ola de Agricultura, Loyola de Palacio, es se?alada en la Comisi¨®n como uno de los factores clave que han reducido los apoyos a las tesis espa?olas. La ¨²ltima gota que ha colmado el vaso fue la provocadora idea de la ministra de presentarse ante sus colegas con las 300.000 firmas recogidas por la Mesa del Aceite en Ja¨¦n en defensa del olivar espa?ol. Y, sobre, todo la insinuaci¨®n, que seg¨²n fuentes comunitarias le hizo al comisario Fischler, de que bastar¨ªan 200.000 firmas m¨¢s para que alguien pudiera en Espa?a pedir la convocatoria de un refer¨¦ndum para salir de la UE.

El presupuesto de Santer se asienta sobre principios de rigor presupuestario extremo y evaluaci¨®n puramente econ¨®mica de cada decisi¨®n. Sus ejes son consolidar el saneamiento de las Administraciones, para fortalecer el euro, y reducir los gastos para que la ampliaci¨®n a los pa¨ªses del Este se realice sin costes adicionales,

Eso ha endurecido la divisi¨®n Norte-Sur y ha generado un g¨¦lido reparto relativo del dinero: para el sur las ayudas estructurales y para el norte las agr¨ªcolas. Con la diferencia de que, en euros constantes de 1999, los 46.050 millones de ayudas agr¨ªcolas del a?o 2000 se transforman en 51.610 en el 2006. Mientras que los fondos estructurales caen desde 36.640 millones de euros en el 2000 a 32.470 en el 2006.

Ese retorno de lo agr¨ªcola frente a la cohesi¨®n se agrava para pa¨ªses como Espa?a, porque las ayudas a los productos mediterr¨¢neos se congelan en aceite de oliva, tabaco y vino y se reducen un 2,6% en frutas y hortalizas. Mientras, los gastos agr¨ªcolas totales aumentan un 12%, especialmente en vacuno (69%), leche (64%) y cereales (14%). Espa?a es tambi¨¦n receptor de ayudas a los productos continentales, pero es en los mediterr¨¢neos donde acapara el mayor porcentaje.