La esencia del "lied"

Una dura elecci¨®n la que tuvo que pasar ayer el p¨²blico l¨ªrico madrile?o. A la misma hora coincid¨ªan las actuaciones de Renata Scotto, una de las grandes divas de la ¨®pera italiana de la segunda mitad de este siglo, y Olaf B?r, uno de los liederistas m¨¢s en forma del momento actual. Al no disponer del don de la ubicuidad, hubo que tomar partido. Plante¨® el bar¨ªtono l¨ªrico de Dresde un recital profundamente alem¨¢n: la primera parte, con textos de Heinrich Heine, puestos en m¨²sica por Mendelssohn y Schumann (el espl¨¦ndido ciclo Amor de poeta ); la segunda, con varias canciones populares de Brahms y alguna de las creaciones m¨¢s queridas de Strauss, desde Morgen hasta Zueignung (Dedicatoria) .

En todo momento el canto de B?r estuvo correspondido por un magn¨ªfico acompa?amiento pian¨ªstico de Deutsch. A ello el bar¨ªtono a?adi¨® la transparencia en el fraseo, la entonaci¨®n justa y una recreaci¨®n muy clara de la palabra po¨¦tica.

Milagro

El milagro de un recital de lied en estado puro se estaba produciendo. Hab¨ªa intimidad y contenci¨®n, pero sin perder nunca de vista la conexi¨®n literaria ni el di¨¢logo pian¨ªstico. Extraordinario el Schumann, arrebatador el Brahms, conmovedor el Strauss. Las dosis de dramatismo, expresi¨®n e interiorizaci¨®n se suced¨ªan. Con ello, el ambiente echaba humo en el descanso y acab¨® con aclamaciones repetidas con la sala puesta en pie, tras las inevitables -y esta vez muy agradables- propinas con canciones de Schumann y Brahms. La coherencia del recital alcanz¨® la respuesta id¨®nea en un p¨²blico que vivi¨® con inteligencia los reflejos de una noche tan intelectual como calladamente emotiva.