Un guionista traicionado

Dado que un gui¨®n, como su nombre indica, es poco m¨¢s que un borrador, en el mejor de los casos, con una s¨®lida estructura narrativa y unos buenos di¨¢logos de la pel¨ªcula a que va a dar origen, no resulta f¨¢cil encontrar una producci¨®n en la que haya sido traicionado, destrozado por el director, hasta convertirlo en algo completamente diferente de lo que deber¨ªa haber sido. Un caso claro es ?dolos... , donde el director Guy Ferland, que a sus poco m¨¢s de 30 a?os cuenta con amplia experiencia como ayudante de direcci¨®n y una sola pel¨ªcula como realizador, The babysitter (1995), destruye el atractivo gui¨®n del famoso Joe Esztheras (escritor de Flashdance, El sendero de la traici¨®n, Jade e Instinto b¨¢sico, entre otras), que ha desempolvado uno de sus mejores trabajos, ha dejado las florituras y parte de su propia experiencia para narrar una buena historia autobiogr¨¢fica.Sin embargo, el torpe director Guy Ferland no parece haberse enterado de nada, ni logra dar consistencia al personaje del joven Karchy Jonas, protagonista del gui¨®n e inspirado en expreriencias del guionista, ni a sus problemas con los sacerdotes cat¨®licos, el sexo, el idioma y una forma de vida extra?a a la que va amold¨¢ndose poco a poco.

Ferland convierte la pel¨ªcula en algo sin la menor vida, fr¨ªo como un t¨¦mpano, que narra con la correcci¨®n habitual del cine norteamericano una an¨¦cdota desprovista de inter¨¦s, donde aparece perdido el joven actor Brad Renfro, el eje de una historia que en otras manos hubiese podido ser una pel¨ªcula apasionante.