Campo largo, campo bajo
...Las selecciones de Jap¨®n y Corea se presentaron en el Mundial con un buen nivel de organizaci¨®n y una gran preparaci¨®n f¨ªsica. Saben que la aventura ser¨¢ corta y se entrenan para la ocasi¨®n. Se trata de alcanzar la plenitud en las dos semanas que durar¨¢n en el Mundial. Pero el orden s¨®lo es un excelente punto de partida y la buena condici¨®n atl¨¦tica s¨®lo un complemento indispensable. Despu¨¦s empieza el f¨²tbol. Los progresos t¨¢cticos y la fuerza entusiasta les sirve para realizar un f¨²tbol corto y combativo. Pero sus meritorios progresos en organizaci¨®n me dejan la impresi¨®n de que todav¨ªa les queda largo el campo, y de que a su notable preparaci¨®n f¨ªsica a¨²n le quedan largos los 90 minutos. Como el pr¨®ximo Mundial lo organizan ellos pod¨ªan hacer partidos de 60 minutos en un campo de 70 por 50. As¨ª puede ser....A Noruega, sin embargo, el campo le queda bajo. Desde el suelo hasta el cielo hay poco espacio para los pelotazos desmedidos con los que juega al f¨²tbol.
...El piojo L¨®pez y Gabriel Batistuta no saben mentir. Uno tiene velocidad y el otro potencia, virtudes que a veces conviene disimular. Si la potencia usa del amague y la velocidad del freno, los dos valores se enriquecen con la sorpresa.
...El facilismo es traicionero en el f¨²tbol. Por eso, contra una selecci¨®n menor hay que prepararse para las dificultades. Cuando se espera un partido con confianza excesiva cualquier contratiempo altera. Hay que estar preparado para el gol en contra, para el dominio ajeno y lo inesperado. En un partido contra el peor de un Mundial puede pasar cualquier cosa y eso no puede sorprender.
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