"Me molieron a palos"

Olga Men¨¦ndez, de 30 a?os, pudo ayer contar, ya en su ciudad natal de Castro Urdiales (Santander), el calvario que ha sufrido en la c¨¢rcel de Nueva Delhi (India), donde estuvo presa tres a?os acusada de tr¨¢fico de drogas despu¨¦s de que se encontraran cuatro kilos de hero¨ªna en un doble fondo de su maleta. "Me molieron a palos y cuando me enter¨¦ de que pod¨ªa reclamar la situaci¨®n en que me encontraba ya hab¨ªa pasado el tiempo legal para hacerlo". No s¨®lo ha sufrido torturas f¨ªsicas -"pas¨® 17 horas atada a un tronco por las mu?ecas", seg¨²n relat¨® su madre, Ana Mar¨ªa Quintana, a EL PA?S-, sino tambi¨¦n enfermedades, falta de higiene y alimentaci¨®n, ausencia de visitas y casi ning¨²n contacto con su familia. Durante su estancia en la c¨¢rcel, su madre s¨®lo recibi¨® tres cartas "y alguna que otra llamada" de su hija.

Pero, sobre todo, Olga ha vivido durante dos a?os la incertidumbre de no saber qu¨¦ iba a ocurrir con su condena. El tiempo que la justicia india ha tardado en acabar un proceso, en el que el fiscal solicitaba 29 a?os de c¨¢rcel para ella, y que finalmente le ha dado la raz¨®n con una sentencia que declaraba su inocencia.

Tras quedar en libertad el pasado 9 de abril, Olga a¨²n tuvo que permanecer en la India hasta que se le permiti¨® regresar a Espa?a hace 10 d¨ªas. De su cautiverio no quiere hablar: "A¨²n se encuentra en la India mi compa?ero Carlos, que fue detenido al mismo tiempo que yo, y hasta que salga del pa¨ªs no quiero decir nada que pueda complicarle la vida".

Olga ha vuelto mucho m¨¢s delgada, con alg¨²n diente menos y muchas canas nuevas. Por el camino ella y su familia han perdido tambi¨¦n su casa. Tuvieron que venderla para pagar los ocho millones que les ped¨ªan los abogados indios.