Los pa¨ªses m¨¢s ricos del mundo se enfrentan por las medidas a adoptar para frenar la crisis
ENVIADO ESPECIALLos hechos comienzan a abrirse paso tras las buenas y vagas palabras anunciadas al final de la reuni¨®n del s¨¢bado del G-7, el grupo de pa¨ªses m¨¢s ricos del mundo. Uno de los asistentes a la cumbre, el ministro brit¨¢nico de Finanzas, Gordon Brown, dijo que "el punto de partida es que Estados Unidos aporte los fondos comprometidos al FMI", a lo que se opone el Congreso de Estados Unidos. Europa, con los bancos centrales de Alemania y Francia a la cabeza, es contraria a rebajar los tipos de inter¨¦s m¨¢s all¨¢ del 3,3% vigente en esos dos pa¨ªses. Jap¨®n, por su parte, toma sus propias iniciativas y firma un acuerdo para financiar a las econom¨ªas asi¨¢ticas. Los responsables de EEUU, mientras, piden reformas a Jap¨®n, pero no pueden imponer su pol¨ªtica en su propio pa¨ªs, acosados por el esc¨¢ndalo Clinton y el aislacionismo del Congreso. En plena crisis, la divisi¨®n empieza a aparecer. Ni siquiera la doble reuni¨®n del s¨¢bado (tras la oficial hubo una segunda) despej¨® la incertidumbre. La sensaci¨®n de impotencia crece, sobre todo en lo relativo al futuro de Brasil. Gordon Brown dej¨® la puerta abierta a una reducci¨®n de los tipos de inter¨¦s en Gran Breta?a, actualmente en el 7,5%, algo que el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha pedido a los responsables de las grandes potencias econ¨®micas y del 90% del mundo, como forma de impulsar el crecimiento y alejar la amenaza de un menor crecimiento o incluso de una recesi¨®n. Tambi¨¦n de tranquilizar a los mercados, que hoy comenzar¨¢n a expresar su opini¨®n sobre lo sucedido en Washington.
?Se trata de una decisi¨®n relacionada con la petici¨®n del FMI o de un resultado de la reuni¨®n del G-7 en la l¨ªnea de impulsar una reducci¨®n coordinada de los tipos? La apuesta m¨¢s segura es que no. Los responsables de los bancos centrales de Francia y Alemania, en declaraciones anteriores y posteriores a la cumbre del s¨¢bado descartaron esa v¨ªa. El gobernador del banco central de Francia, y candidato a segundo presidente del Banco Central Europeo, Jean Claude Trichet, afirm¨® que en la zona euro "tenemos una plataforma del 3,3%", en referencia a los tipos que rigen en Francia y Alemania, y concluy¨® que el descenso a ese nivel de los 11 pa¨ªses que formar¨¢n parte del euro equivale a una reducci¨®n global de 0,4 puntos porcentuales.
Para Trichet, que tambi¨¦n pidi¨® a EEUU que afronte sus compromisos con el FMI, ¨¦sta es una "importante contribuci¨®n" al crecimiento de la econom¨ªa. Adem¨¢s, el gobernador del Bundesbank, Hans Tietmeyer, afirm¨® que durante la reuni¨®n del G-7 (EEUU, Jap¨®n, Alemania, Francia, Gran Breta?a, Italia y Canad¨¢), no se plante¨® ninguna cr¨ªtica al actual nivel de los tipos en Alemania, lanzando as¨ª el mensaje de que en ning¨²n caso se plante¨® una acci¨®n com¨²n en este terreno. Tietmeyer tambi¨¦n se opuso a la idea, propuesta con diferentes matices por Francia, Reino Unido y EEUU, de renovar las estructuras del sistema financiero. Tietmeyer se?al¨®, enf¨¢tico: "En el comunicado del G-7 no se encuentran las palabras "nueva arquitectura", concepto del agrado del secretario del Tesoro de EEUU, Robert Rubin.
?Qu¨¦ se discuti¨® en la doble reuni¨®n? Obviamente, la propuesta de EEUU sobre los fondos para pa¨ªses en crisis, que se recoge en el comunicado de la reuni¨®n con frases como "desarrollar nuevas capacidades" o "expandir la capacidad de pr¨¦stamo del Banco Mundial hacia pa¨ªses afectados por la crisis". Un apoyo gen¨¦rico, al que Brown puso el cascabel: sin la aportaci¨®n de EEUU, los nuevos fondos del FMI, pactados en anteriores reuniones, est¨¢n bloqueados.
Acuerdos sin menci¨®n
Tambi¨¦n es curioso que en las cinco hojas del comunicado no se haga siquiera una menci¨®n al acuerdo de Jap¨®n con la Asociaci¨®n de Pa¨ªses del Sureste Asi¨¢tico para facilitar pr¨¦stamos de hasta 30.000 millones de d¨®lares (4,5 billones de pesetas). Una acci¨®n a la que se oponen el FMI y EEUU. Ni a la oferta espa?ola para crear un fondo para Latinoam¨¦rica, para el que el Gobierno ha preparado 790.000 millones de pesetas. Ayer, Ana Patricia Bot¨ªn se?al¨® que su banco, el Santander, est¨¢ dispuesto a colaborar en este fondo. La actitud de Jap¨®n refleja el abismo que se ha abierto entre las dos primeras econom¨ªas mundiales, lo que limita la capacidad del G-7. Mientras EEUU imputa a la debilidad de Jap¨®n la profundidad de la crisis actual, los japoneses acusan a los estadounidenses de ser responsables de su origen debido al retraso en bajar los tipos.
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