El Gobierno integra los colegios privados en la red oficial de centros en el extranjero

Los colegios privados podr¨¢n formar parte de la red oficial de centros de Espa?a en el extranjero. Esta modificaci¨®n, publicada en el Bolet¨ªn Oficial del Estado del 1 de octubre, es un rotundo giro en la orientaci¨®n de los servicios exteriores espa?oles, cuyo objetivo b¨¢sico era hasta ahora exportar el sistema educativo espa?ol. Con la nueva norma podr¨¢ obtener la denominaci¨®n de Colegio Espa?ol o Colegio Hispano y ofrecer el t¨ªtulo oficial que se da en Espa?a cualquier centro privado situado en el exterior, sin que tenga que impartir un tipo de ense?anza en concreto o que se ajuste al curr¨ªculo espa?ol.

Con esta medida el Gobierno entrega al sector privado parte de la representatividad oficial del sistema educativo en el extranjero, cuyo presupuesto para 1999 es de 15.968 millones de pesetas. Se integrar¨¢n en la red espa?ola centros creados como un negocio, muchos de los cuales no imparten el sistema de ense?anza espa?ol, especialmente los instalados en pa¨ªses de lengua no espa?ola. En la orden no se dice espec¨ªficamente que estos centros tengan que ser instituciones espa?olas ni meramente educativas.Esta privatizaci¨®n parcial impulsada por el Ejecutivo no supone que se vaya a financiar a los centros privados, pero adem¨¢s permite sortear la necesidad de invertir recursos para ampliar y actualizar la red p¨²blica, integrada por 28 centros en ocho pa¨ªses, seg¨²n datos del curso pasado.

Un ¨²nico control

Desde el momento en que empez¨® a gestarse, la iniciativa despert¨® controversia entre los responsables del Ministerio de Educaci¨®n y Cultura. Eugenio Nasarre, secretario general de Educaci¨®n, consider¨® que la iniciativa no era acertada pol¨ªtica ni educativamente y plante¨® que era preferible que las inversiones se destinaran a crear nuevos centros y a reformar los actuales. Por el contrario, el subsecretario del Ministerio de Educaci¨®n y Cultura, Ignacio Gonz¨¢lez, argument¨® que la integraci¨®n de centros privados permit¨ªa ampliar la red con los recursos disponibles.La orden, publicada en el BOE del 1 de octubre, se?ala en uno de sus apartados que el centro privado debe incluir, junto a los objetivos, contenidos y criterios de evaluaci¨®n "del sistema de ense?anza del Estado en que cada centro se ubique", los propios de las ¨¢reas de literatura espa?ola, geograf¨ªa e historia de Espa?a, a los que se incluir¨¢ la materia de lengua espa?ola, en los pa¨ªses de otra lengua. El ¨²nico control que se har¨¢ a los centros ser¨¢ para garantizar la correcta ense?anza de estas materias.

Esto quiere decir que, para que un centro privado pertenezca a la red espa?ola, podr¨ªa bastar con que incluyera dichas asignaturas en uno de los grupos de alumnos de cada nivel educativo.

Seg¨²n fuentes cercanas al Ministerio de Educaci¨®n y Cultura (MEC), sus representantes han justificado la falta de criterios educativos de la medida con dos razones: que la ampliaci¨®n de la red permite que la cultura espa?ola siga creciendo en el exterior y que es una manera de contentar a los colectivos de emigrantes, que piden que aumente la oferta de centros en el extranjero.

Pero el coste de estudiar en muchos de esos centros privados no baja del mill¨®n de pesetas, lo que se compadece mal con el contenido de otro de los apartados de la orden, el que se?ala que en la admisi¨®n de alumnos en estos colegios no debe existir discriminaci¨®n alguna por razones sociales.

Para poner en marcha esta medida, el Gobierno se ha acogido a un apartado de un real decreto, el 1.027, que regula la acci¨®n educativa en el exterior, promulgado en 1993 por el Gobierno socialista. Este punto dejaba abierta la posibilidad de que se establecieran conciertos con instituciones privadas, una alternativa inicialmente concebida para casos excepcionales, en los que deb¨ªa tener m¨¢s peso la educaci¨®n espa?ola que la del pa¨ªs de acogida.

La orden tampoco indica si los alumnos que reciban el t¨ªtulo espa?ol a trav¨¦s de esta modalidad podr¨¢n ingresar en una universidad espa?ola o deben hacer la selectividad, cuyos contenidos probablemente no coincidir¨ªan con los aprendidos por ellos.

La iniciativa del departamento de Esperanza Aguirre permitir¨¢ abrir la puerta a los convenios del Ministerio de Educaci¨®n con colegios o instituciones religiosas de pa¨ªses latinoamericanos, como la Rep¨²blica Dominicana, M¨¦xico, Uruguay, Chile o Guatemala, pa¨ªs este ¨²ltimo del que los representantes educativos ya han recibido alguna oferta. Con estos acuerdos, los centros privados latinoamericanos ofrecer¨ªan un t¨ªtulo espa?ol a sus alumnos, aunque seguir¨ªan impartiendo su propio sistema educativo, con lo que el cambio no les supondr¨ªa pr¨¢cticamente ning¨²n coste y mantendr¨ªan la titularidad de los centros.

Los colegios espa?oles en el exterior dependen del MEC y fueron creados originalmente para atender las necesidades educativas de los emigrantes en otros pa¨ªses.