Estrellas frente a l¨¢ser

Los reactores como el ITER no son, en teor¨ªa, las ¨²nicas m¨¢quinas capaces de reproducir en tierra la reacci¨®n nuclear que da vida a las estrellas. Hay otra estrategia: bombardear con l¨¢ser, part¨ªculas de alta energ¨ªa u otros m¨¦todos, microc¨¢maras de apenas millon¨¦simas de mil¨ªmetro, que albergan los n¨²cleos que deben fusionarse.Ambas estrategias se consideran competencia, pero los l¨¢ser cuentan ahora a los ojos de los pol¨ªticos con una ventaja a?adida: sus resultados son tambi¨¦n de aplicaci¨®n militar. La bomba de hidr¨®geno desarrollada en los cincuenta, por ejemplo, se basa en una reacci¨®n de fusi¨®n; los l¨¢ser permiten simular explosiones de este tipo.

Estados Unidos, que se ha retirado de ITER, destina en cambio 1.200 millones de d¨®lares al National Ignition Facility (NIF), un nuevo superl¨¢ser de 200 haces del Lawrence Livermore National Laboratory (California), que deber¨ªa funcionar en el 2003 y cuyo objetivo es precisamente lograr la fusi¨®n nuclear -algo oficialmente no conseguido a¨²n con esta estrategia-.

Mientras tanto, otras instalaciones experimentales de este tipo, como la llamada M¨¢quina Z de los Laboratorios Sandia (EEUU), est¨¢n consiguiendo resultados mejores de lo previsto. Ingenieros de la Z anunciaron hace una semana que han logrado producir grandes cantidades de rayos X, con los que bombardear¨ªan la microbola de combustible.

Aunque la comunidad de reactores de fusi¨®n cree que la alternativa de los l¨¢ser a¨²n no ofrece resultados s¨®lidos, Gerold Yonas, uno de los responsables de los Sandia, dice en Science que "ya es hora de revisar las estrategias para la fusi¨®n. Todos estamos juntos en esto".