Ambiente wagneriano

Richard Wagner lleg¨® al Teatro Real y levant¨®, claro, una enorme expectaci¨®n, aumentada si cabe por la presencia como director de escena del cineasta Werner Herzog, del que la Filmoteca Nacional y el Instituto Alem¨¢n han programado un ciclo de sus pel¨ªculas este mes de febrero, con algunos t¨ªtulos dif¨ªciles de ver habitualmente, como el documental La transformaci¨®n del mundo en m¨²sica (se proyectar¨¢ el d¨ªa 20), rodado en Bayreuth y sostenido, fundamentalmente, por los ensayos en la m¨ªtica colina wagneriana de El holand¨¦s errante, de Giuseppe Sinopoli y Dieter Dorn; Trist¨¢n e Isolda, de Daniel Barenboim, Harry Kupfer, Erich Wonder y el dise?ador japon¨¦s Yamamoto; Parsifal, de Levine, Wolfgang Wagner y Pl¨¢cido Domingo, y Lohengrin, de Peter Schneider y el propio Werner Herzog. El director alem¨¢n ha afirmado repetidamente que la ¨®pera y el cine son dos mundos absolutamente distintos y sus experiencias no intercambiables, pero a veces las influencias de uno y otro terreno art¨ªstico se cuelan por las rendijas m¨¢s inesperadas.

En el ciclo de la Filmoteca Nacional se podr¨¢n ver adem¨¢s t¨ªtulos cl¨¢sicos de Herzog como Aguirre, la c¨®lera de Dios; Coraz¨®n de cristal, Woizek, Todos los enanos comenzaron peque?os, Fitzcarraldo y otros.

Al estreno de Tannh?user, anoche en Madrid, asistieron, entre otros, la infanta Pilar; el secretario de Estado de Cultura, Miguel ?ngel Cort¨¦s; Jes¨²s de Polanco, Juan Luis Cebri¨¢n, Alfonso Esc¨¢mez, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, Soledad Becerril, I?aki Gabilondo y Jos¨¦ Mar¨ªa Mohedano.