Aznar y Borrell acercan posturas en el proceso de paz, pero discrepan en los pasos a dar
El presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, y el candidato socialista a la Presidencia, Jos¨¦ Borrell, coincidieron ayer, en su primera entrevista en La Moncloa, en que la paz en Euskadi "no tiene precio pol¨ªtico" y que ha de conseguirse con pleno respeto a la Constituci¨®n y el Estatuto de Gernika. Uno y otro quedaron en que sus respectivos partidos pidan una nueva y urgente reuni¨®n del Pacto de Ajuria Enea. No obstante, el acuerdo en los principios fue acompa?ado de una ostensible discrepancia en los aspectos concretos que abordaron sobre c¨®mo avanzar hacia la paz en esta fase. Borrell "aconsej¨®" a Aznar que aceptase un debate en el Parlamento, con la toma de posici¨®n de todos los grupos sobre el proceso de paz, para ayudar a que los dem¨®cratas recuperen la iniciativa pol¨ªtica, que el candidato socialista recalc¨® que sigue en manos de los nacionalistas.
El presidente del Gobierno no vio motivos para promover la comparecencia parlamentaria que le sugiri¨® el candidato socialista y se remiti¨® a la moci¨®n aprobada por el Congreso de los Diputados en noviembre pasado. No obstante, el jefe del Ejecutivo dej¨® la puerta abierta a ¨¦sta si las circunstancias as¨ª lo exigen. Asimismo, Borrell pidi¨® una pol¨ªtica penitenciaria individualizada, pero Aznar se mantuvo firme en no dar ning¨²n paso mientras ETA no avance en el proceso de paz.Tras la primera conversaci¨®n pol¨ªtica que ambos han mantenido, que se desarroll¨® por la tarde en La Moncloa y dur¨® dos horas y cuarenta y cinco minutos, Borrell calific¨® la entrevista de positiva y productiva, calificativos que tambi¨¦n utiliz¨® para resumir el encuentro el portavoz del Gobierno, Josep Piqu¨¦, quien a?adi¨® que el clima hab¨ªa sido de "gran correcci¨®n" y que incluso se dio un "grado elevad¨ªsimo de acuerdo" en cuanto a que el objetivo de la paz no puede tener un "precio pol¨ªtico". El m¨¢ximo dirigente socialista rehus¨® entrar en todo momento en consideraciones sobre la relaci¨®n personal entre ambos -"aqu¨ª no se trata de qu¨ªmica ni de f¨ªsica, sino de una oferta de colaboraci¨®n pol¨ªtica hecha por el primer partido de la oposici¨®n", terci¨®-.
Aunque con cautelas, Borrell transmiti¨® su impresi¨®n de que despu¨¦s de la conversaci¨®n de ayer es m¨¢s probable que el PSOE y el Gobierno puedan llegar a un consenso sobre las medidas que se deben ir aplicando para conseguir que la tregua indefinida de ETA se convierta en un cese definitivo del terrorismo. "Probablemente, el consenso est¨¢ hoy m¨¢s cerca que ayer", lleg¨® a decir el candidato. Piqu¨¦ se?al¨®, por su parte, que Aznar le hab¨ªa manifestado que "el clima puede mejorar" si bien se ha dado "un paso adelante" respecto a hace un a?o.
El gui¨®n de Estella
El l¨ªder del PSOE consider¨® muy preocupante la situaci¨®n del Pa¨ªs Vasco, donde los nacionalistas est¨¢n aplicando de forma alarmante "el gui¨®n del Pacto de Estella", suscrito por PNV, EH, EA e Izquierda Unida. Pero a la vez Borrell trat¨® de evitar un tono de dramatismo, y se cuid¨® de reiterar que de ning¨²n modo hab¨ªa ido a La Moncloa a plantear un frente antinacionalista. De lo que se trata, dijo, es de conseguir que recuperen la iniciativa pol¨ªtica en Euskadi los dem¨®cratas defensores de la Constituci¨®n y del Estatuto de Autonom¨ªa vasco. En ese contexto abordaron la posibilidad de convocar una reuni¨®n del Pacto de Madrid, aunque sin concretarla. Aznar, por su parte, tambi¨¦n se mostr¨® reacio al frentismo. Dijo que las denuncias que se hagan de las resoluciones del frente nacionalista no deben ir acompa?adas del insulto. E incluso manifest¨® a Borrell que no iba a romper las tenues relaciones parlamentarias que mantiene con el Partido Nacionalista Vasco (PNV), si bien calific¨® de "irresponsabilidad" la cesi¨®n de la C¨¢mara vasca al autodenominado Parlamento kurdo en el exilio. Borrell matiz¨® que el consenso que ha ofrecido a Aznar no consiste en modo alguno en "recibir de madrugada la confirmaci¨®n de decisiones que ya est¨¢n en las rotativas de los peri¨®dicos. El consenso consiste en dialogar y en acordar previamente las decisiones que se toman y que, sin duda, deben ser ejecutadas por el Gobierno". El candidato socialista hizo esas precisiones sobre todo en relaci¨®n con la pol¨ªtica penitenciaria, que, seg¨²n ¨¦l, debe ser individualizada, flexible y, sobre todo, consensuada. Aznar contest¨® a Borrell que manten¨ªa su compromiso de comunicar y consensuar las decisiones que vaya adoptar el Ejecutivo "cuando haya novedades". Pero tambi¨¦n aclar¨® que la iniciativa y la decisi¨®n corresponden al Gabinete. En la rueda de prensa posterior al encuentro, Piqu¨¦ argument¨® que en estos momentos no hay "novedades suficientemente relevantes" en el proceso de paz, por lo que no es "esencial" ni "fundamental" que el jefe del Gobierno informe al Congreso.
Pol¨ªtica penitenciaria
Respecto a la pol¨ªtica penitenciaria, Aznar se remiti¨® al acuerdo parlamentario de noviembre, que aconsejaba que fuera "din¨¢mica y flexible". Pero se mostr¨® contrario a mover ficha en estos momentos ya que por parte de ETA y su entorno no hay movimientos. El dirigente socialista se?al¨® que Aznar y ¨¦l han quedado en que representantes del Ejecutivo y de la oposici¨®n est¨¦n "en contacto permanente", para que las siguientes decisiones en ese terreno est¨¦n acordadas antes de ser ejecutadas.
El candidato socialista declar¨® que "la paz tendr¨¢ obst¨¢culos pero no competidores", en el sentido de que la posici¨®n del PSOE es la de colaborar con el Gobierno para acabar con la violencia en Euskadi. Pero no dej¨® de reprochar, seg¨²n ¨¦l, al presidente que tenga como socio parlamentario en las Cortes a un partido, el PNV, que utiliza como apoyo en el Parlamento vasco a una fuerza, EH, que legitima la violencia y, en cierto modo, se apoya en ella.
Aznar, adem¨¢s de considerar necesario mantener el hilo parlamentario con el PNV, manifest¨® a Borrell que no hab¨ªa que "ponerse nerviosos" porque en estos momentos el proceso de paz ofrezca una imagen de estancamiento. "Cualquier nerviosismo no es bueno para el proceso de paz". "Ya hemos dicho repetidas veces que el proceso de paz va a ser largo y complejo". Asimismo, le pidi¨® que no airearan p¨²blicamente las diferencias para que no se beneficiaran de ella precisamente los enemigos de la paz.
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