La Comisi¨®n Europea propone un recorte anual del 3% de las ayudas a los agricultores m¨¢s ricos

La Comisi¨®n Europea se inclina por que los agricultores m¨¢s ricos sean quienes soporten la mayor parte de la carga de la reforma de la Pol¨ªtica Agr¨ªcola Com¨²n (PAC), orientada a estabilizar el gasto. As¨ª lo sugiere un documento del Grupo de Alto Nivel que propone un recorte anual del 3% hasta el 2006, tras haber estudiado los aspectos agr¨ªcolas de la Agenda 2000. De los 1,2 millones de agricultores espa?oles, al menos 381.000 (el 27%) se ver¨ªan afectados. La propuesta recoge las ideas de Par¨ªs, que favorecen a la agricultura francesa, la m¨¢s competitiva.

Aunque los fondos estructurales y el Fondo de Cohesi¨®n son lo m¨¢s espectaculares en la batalla de la Agenda 2000 (previsiones presupuestarias para el septenio 2000-2006), la reforma de la PAC es tambi¨¦n muy importante, por cuanto supone el 48% del actual presupuesto com¨²n y genera unas transferencias para Espa?a que se acercan a la mitad de las que el pa¨ªs recibe de los fondos estructurales o de ayuda a la igualaci¨®n de la renta. La Comisi¨®n propuso en su Agenda 2000 una reforma orientada a ahorrar, a compatibilizar mejor la PAC con la futura nueva ronda de la Organizaci¨®n Mundial del Comercio (OMC) y a preparar la ampliaci¨®n al Este, que por su peso agr¨ªcola encarecer¨¢ el cap¨ªtulo agrario del presupuesto. La v¨ªa elegida era rebajar los precios de garant¨ªa (a partir de los cuales la Comisi¨®n interviene; esto es, compra productos) entre un 10% y un 30% (carne, leche y cereales), que se compensaban con las ayudas directas al agricultor, s¨®lo decrecientes (entre un 20% y un 25%) a partir de que un agricultor recibiese m¨¢s de 100.000 euros de ayudas (16,6 millones de pesetas). Esa reforma resultaba demasiado cara, en opini¨®n de muchos Estados miembros.

Distintas opciones

El nuevo documento presenta distintas opciones para apretar m¨¢s las tuercas al gasto, que este a?o alcanzar¨¢ los 40.500 millones de euros (8,7 billones de pesetas). Como es habitual en la Comisi¨®n, Santer no asume ninguna de las propuestas. Pero, al sostener que ha "concentrado m¨¢s espec¨ªficamente su atenci¨®n" en una f¨®rmula, se inclina por ¨¦sta, la llamada degresividad (reducci¨®n seg¨²n los niveles de riqueza) de las ayudas al agricultor, la ¨²ltima aportaci¨®n francesa, parecida a la brit¨¢nica, presentada como alternativa a la cofinanciaci¨®n agr¨ªcola (que cada Estado pague un porcentaje de la PAC), que tanto disgusta a Par¨ªs. La propuesta -"escenario", se dice, con pretensi¨®n as¨¦ptica- prev¨¦ rebajar las ayudas directas en un 3% anual, algo que se considera casi neutral, porque se prev¨¦ que la productividad del sector crecer¨¢ a un ritmo del 1% al 3%. El ahorro -una cuarta parte del cual se dedicar¨ªa a aumentar las ayudas al desarrollo rural- ser¨ªa de 1.217 millones de euros (202.500 millones de pesetas) en el 2004, de 1.837 millones de euros (305.681 millones de pesetas) en el 2005 y de 2.439 millones (405.000 millones de pesetas) en el 2006. El menor gasto se registrar¨ªa sobre todo en la segunda parte del septenio, porque hasta el 2004 no afectar¨ªa al subsector bovino, y hasta el 2005, al l¨¢cteo y sus derivados.

?Qu¨¦ supone? Sobre todo, cargar el peso de la reforma sobre los m¨¢s ricos, porque el 73% de los agricultores europeos, los que reciben ayudas por montante inferior a los 5.000 euros, quedar¨ªa exento de la reducci¨®n; los m¨¢s potentes se quedar¨¢n sin ayuda, contra lo que propon¨ªa la Agenda 2000, aunque fuera reduci¨¦ndola un poco a partir de 16 millones de pesetas. En el caso de Espa?a, entre 381.000 y 444.000 del total de los 1,2 millones de productores, suponiendo que todos ellos reciban ayudas comunitarias, lo que no es as¨ª. Portugueses, griegos e italianos ser¨ªan los menos perjudicados; daneses, luxemburgueses y suecos, los m¨¢s afectados.

La degresividad ser¨ªa algo socialmente justo, pero econ¨®micamente complicado, porque los m¨¢s competitivos son, en general, los m¨¢s grandes. La idea beneficia a Francia, que exhibe la agricultura m¨¢s competitiva y que con una reducci¨®n transversal de las ayudas podr¨ªa expulsar del mercado a quienes est¨¦n en la frontera de la competitividad. El documento se abstiene de incorporar propuestas para reequilibrar la PAC entre los productos continentales -los m¨¢s atendidos- y los mediterr¨¢neos, lo que vienen reclamando los pa¨ªses del Sur.