Cascos reaparece para hacer un balance triunfalista de los tres a?os de gobierno del PP

El vicepresidente primero del Gobierno, Francisco ?lvarez Cascos, acapar¨® ayer el protagonismo en la celebraci¨®n del tercer aniversario de la victoria del PP en las elecciones generales de 1996. Su reaparici¨®n estelar como altavoz de los logros del Ejecutivo, que ¨¦l mismo resumi¨® en un cumplimiento del 85% de los 510 compromisos plasmados en el programa electoral, sirvi¨® tambi¨¦n para lanzar varios avisos. El principal, a ETA, a la que culp¨® de que se mantenga parado el proceso de paz por no designar a sus interlocutores para la negociaci¨®n con el Gobierno tras casi seis meses de tregua. Junto a la firmeza en la pol¨ªtica antiterrorista, el balance presenta unos muy buenos resultados macroecon¨®micos, que permiten a Espa?a entrar en el euro, pero tambi¨¦n la incertidumbre del reto m¨¢s serio que los nacionalistas han lanzado al Estado de las autonom¨ªas.

Cascos atribuy¨® al PP y su pol¨ªtica gran parte del ¨¦xito de que la tregua de ETA se produjera en su d¨ªa, el pasado 16 de septiembre, y contin¨²e hasta ahora. Luego, sin embargo, justific¨® que el escenario de la paz no haya mejorado nada desde entonces en el hecho de que la banda terrorista no haya nombrado a sus negociadores. "El Gobierno lleva esperando que quien corresponda en ese magma de ETA y su entorno designe sus interlocutores. Todo lo dem¨¢s por parte de ese mundo es indecisi¨®n o falta de deseo de sentarse con los interlocutores legitimados para hablar de paz", afirm¨®. La otra advertencia la destin¨® Cascos al PSOE, al que ret¨® a que haga p¨²blicos los bienes de sus dirigentes, incluso del pasado, antes de pedir los de los miembros del actual Gabinete.Fue al final de su comparecencia ante la prensa cuando se inquiri¨® a Cascos si dispone de alguna sociedad patrimonial o familiar para gestionar sus ingresos y si est¨¢ a favor, como reclama el PSOE, de que el ministro portavoz, Josep Piqu¨¦, declare p¨²blicamente sus bienes. Cascos neg¨® tener ninguna capacidad fiscalizadora sobre el resto del Gabinete y asegur¨® estar personalmente al corriente de sus respectivas declaraciones obligatorias como miembro del PP, diputado y alto cargo. Pero, adem¨¢s, apost¨® por que el d¨ªa que los socialistas propongan que esas declaraciones sean p¨²blicas ¨¦l ser¨¢ el segundo en hacerlo, tras el autor de la idea, para "dejar limpia a la clase pol¨ªtica".

Mientras la intervenci¨®n de Cascos sumaba minutos, Javier Arenas, el secretario general del PP y te¨®rico n¨²mero dos del partido, sudaba y mov¨ªa nerviosamente sus pies bajo la mesa. Arenas jug¨® ayer un papel de telonero para mayor gloria de Cascos, al que se reserv¨® la funci¨®n principal de glosar los supuestos m¨¦ritos del Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar en estos tres a?os. Cascos apenas tuvo que refrescar su memoria porque ese trabajo ya lo efectu¨® hace apenas un mes, en su denso discurso de despedida de la secretar¨ªa general en el congreso del partido. Arenas, eso s¨ª, se permiti¨® aventurar que la novedad pol¨ªtica de este Gobierno respecto a los del pasado de haber superado gran parte de su programa ser¨¢ el mejor aval con que contar¨¢n en junio los candidatos municipales, auton¨®micos y europeos del PP. Y apostill¨® que, aunque todav¨ªa quedan cosas, "resulta dif¨ªcil hacer m¨¢s en tres a?os". En ese sentido, Arenas compar¨® el mill¨®n de puestos de trabajo generados en esta etapa con el mill¨®n de empleos perdidos en la del PSOE pese a la promesa que realizaron los socialistas de bajar el paro en 800.000 personas.

"Aznar cumple"

Fue ah¨ª cuando Cascos tom¨® la palabra y monopoliz¨® el principal acto del aniversario triunfal. Con un ejemplar del programa electoral de 1996 en la mano enarbol¨® los datos estad¨ªsticos sobre su seguimiento. Un espeso trabajo que ya desgran¨® en el congreso y que ahora el partido ha concentrado en un documento de 548 p¨¢ginas: El Gobierno de Aznar cumple.Cascos repas¨®, primero ante los dirigentes del PP convocados en G¨¦nova y luego ante los medios de comunicaci¨®n, el grado de desarrollo "din¨¢mico" de ese programa en cada uno de sus seis cap¨ªtulos. Seg¨²n ese recuento, el PP ha cumplido un total de 431 promesas de las 510 efectuadas, es decir, el 84,5%. Hay ¨¢reas, como la cultural y la educativa, en las que ese porcentaje se eleva al 90,2%. Pero tambi¨¦n otras, como la relativa al fortalecimiento del Estado de derecho y las instituciones, en el que se mete el apartado de la justicia, con un nivel de ejecuci¨®n m¨¢s bajo: el 78,8%.

En definitiva, al PP le quedan apenas 79 compromisos por solventar para apurar hasta un nivel m¨¢ximo "ideal" su programa de manera ¨ªntegra. Ni Arenas ni Cascos encontraron ayer, despu¨¦s de tres a?os en el Gobierno, ni un solo aspecto del programa elaborado desde la oposici¨®n que no merezca ser llevado adelante. S¨ª admitieron que algunos puntos no podr¨¢n aprobarse en el a?o que a¨²n le conceden a la legislatura, pero s¨®lo por falta de "oportunidad pol¨ªtica" y apoyo de sus socios parlamentarios, a los que invitaron a leer, no releer, juntos la Constituci¨®n y los estatutos de autonom¨ªa. En este sentido, Cascos se defini¨® como un pol¨ªtico que no cree en dogmas: "Posibilista, pragm¨¢tico y realista" frente a los que buscan la "utop¨ªa".

En esa tesitura, el PP no hace un "ejercicio de renuncia expresa, sino de realismo", a que en el futuro se pueda reformar el C¨®digo Penal para que los terroristas cumplan ¨ªntegramente sus penas -como prometieron en su programa- o a regular por ley el Cesid y los secretos oficiales, aspectos que Cascos a¨²n no descart¨® para los pr¨®ximos meses si hay consenso con los dem¨¢s partidos. Y tampoco desech¨® pactar otro modelo de financiaci¨®n de la televisi¨®n p¨²blica.

Por otra parte, Cascos matiz¨® ayer su discurso de despedida como secretario general en el congreso de su partido en el que dijo respecto a su continuidad: "No ser¨ªa bueno para m¨ª, ni para el PP, ni para ti, muy en concreto, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar". Retom¨® su profesi¨®n de ingeniero para explicar que cuando se termina una obra no se debe mirar atr¨¢s y revel¨® que desde que el PP gobierna s¨®lo dedicaba cuatro o cinco horas semanales al partido.