Los aliados bombardean la sede del partido de Milosevic y de la televisi¨®n de su familia

A 300 metros de distancia de la torre da?ada por el ataque se encuentra el Hotel Hyatt, convertido en cuartel general de la prensa extranjera acreditada en Belgrado. Tras el impacto se quebraron algunos ventanales y el edificio atacado comenz¨® a arder. Pedazos de mamposter¨ªa y restos de marcos de aluminio quedaron dispersados, incandescentes en un parque a¨²n iluminado por las llamaradas.

Pero la enorme antena de Radio Kosava, Tele Pink, Radio Pink y la emisora privada RT SOS Canal, parec¨ªa intacta. S¨®lo al principio: los ciudadanos de Belgrado comprobaron m¨¢s tarde los da?os al quedarse sin ver sus cadenas de televisi¨®n preferidas. La torre —m¨¢s conocida por el nombre de Usche ("confluencia", al estar levantada en un parque donde coinciden los r¨ªos Sava y Danubio) y construida para albergar a la antigua Liga de los Comunistas—, qued¨® rodeada de escombros.

La OTAN se apunt¨® ayer un triunfo adicional: la destrucci¨®n de Zezeljev, el ¨²ltimo puente sobre el Danubio en Novi Sad, al norte de la capital yugoslava.

Pero ayer era mucho m¨¢s importante registrar la indignaci¨®n y rabia de los habitantes de Belgrado ante tan tremenda alusi¨®n de la OTAN. En el edificio atacado funcionaba la sede del Partido Socialista de Serbia, el partido del presidente. La esposa de Milosevic, Mira Markovic, una comunista convencida, ya no tiene despacho. Marija, la hija de la pareja, era la directora de Radio Televisi¨®n Kosava. Tampoco le queda nada.

El principal objetivo del ataque fue tratar de dar una impresi¨®n gr¨¢fica a las manifestaciones de la OTAN de que se est¨¢ tratando de romper la espina dorsal del poder enYugoslavia.

"incre¨ªble". Esa palabra pronunciada por un anciano que se aproxim¨® a la torre quemada junto a un perro de color gris marengo, resum¨ªa el sentimiento de los serbios en una guerra que les ha sido impuesta por los pa¨ªses aliados capitaneados por Washington. Contemplaba no s¨®lo el desastre que reinaba en el edificio. Ve¨ªa tambi¨¦n las dos banderas serbias que ondeaban desde el decimoquinto piso horas despu¨¦s del ataque. Era un desaf¨ªo que las televisiones de todo el mundo registraron.

Los da?os de la intensificaci¨®n de los bombardeos aliados se reflejaban ayer en otros lugares: el ¨²ltimo puente sobre el Danubio en Novi Sad fue alcanzado por varios misiles. No fue destruido, pero ya nadie se atreve a atravesarlo dado el grado de su fragilidad actual. El puente Zezeljev est¨¢ obviamente condenado a su destrucci¨®n total en cuesti¨®n de horas. La estrategia de la OTAN sigue visiblemente destinada a aislar a Belgrado de su ¨²ltimo basti¨®n, en medio del aislamiento pol¨ªtico en el que cifraban sus esperanzas la Alianza.

Lejos de aplazar una protesta, los serbios que se reun¨ªan ayer para inspeccionar los da?os en el coraz¨®n mismo de Belgrado contemplaban las ruinas del edificio Usce con pasmo. Algunos se re¨ªan. Un jovenzuelo con traje deportivo resumi¨® el sentimiento de muchos cuando dijo: "Estas bombas no nos asustan".

Tanjug, la agencia oficial de noticias yugoslava, dio prioridad a otro asunto: la matanza de once refugiados serbios procedentes de Croacia en las cercan¨ªas de Djakovica, al oeste de Kosovo, que perecieron cuando una mina explot¨® en su camino. Era dif¨ªcil constatar otros da?os materiales como consecuencia de la intensificaci¨®n de la ofensiva aliada. M¨²ltiples informes, no confirmados por la prensa extranjera, daban cuenta de bajas y destrucci¨®n en varios puntos de Serbia, como el puente sobre el Danubio en la ciudad de Besca, tambi¨¦n en la provincia de Voivodina.

Milosevic no apareci¨® ayer ante la prensa. El portavoz del Ministerio de Exteriores, Nebojsa Vujovic, convoc¨® a los reporteros para hacer un recuento de las p¨¦rdidas. "Esto es un ataque al coraz¨®n de Belgrado. Y como Belgrado es una capital europea, es un ataque contra Europa", dijo Vujovic tambi¨¦n asegur¨® que "en este ataque a un objetivo civil, motivado por una venganza personal [contra Milosevicj], se han registrado v¨ªctimas civiles, aunque todav¨ªa no se puede precisar el n¨²mero".