"Milosevic juega con Mosc¨² su viejo juego c¨ªnico del enga?o"
El ministro de Defensa alem¨¢n, Rudolf Sharping, desconf¨ªa de las ofertas de Slobodan Milosevic de permitir que tropas internacionales bajo mando de la ONU se desplieguen en Kosovo. Sharping asegura tambi¨¦n que la campa?a a¨¦rea ser¨¢ a¨²n larga y que su pa¨ªs no prepara ning¨²n plan para una eventual intervenci¨®n terrestre.Pregunta. A su generaci¨®n, la del 68, le gusta remitirse a posiciones moralmente fuertes. Usted, el canciller Gerhard Schr?der y el ministro de Exteriores Fischer justifican moralmente esta guerra.
Respuesta. La indignaci¨®n desempe?a un papel importante. En los Balcanes no est¨¢n en juego ni petr¨®leo ni materias primas. Lo hacemos como respuesta a una violaci¨®n extremadamente brutal de los derechos humanos. Las familias que acogieron a los observadores de la OSCE (Organizaci¨®n para la Seguridad y la Cooperaci¨®n en Europa) fueron asesinadas. En una escuela se ahorc¨® al profesor ante los escolares y a ¨¦stos se les hizo huir a tiros. Han asesinado a mujeres embarazadas, les han abierto el vientre y han asado el feto.
P.?Hay pruebas?
R.Por desgracia, s¨ª.
P.?Pero testimonios o pruebas de los hechos?
R.S¨®lo reproduzco estos relatos cuando han sido confirmados al menos por dos o tres testigos. Observe lo que hacen los ni?os en los campos. No pueden hablar de sus experiencias; en vez de eso las dibujan. Cuando podamos entender en toda su dimensi¨®n los sucesos, el horror ser¨¢ mayor.
P.Hace m¨¢s de 10 a?os hubo una discusi¨®n entre los historiadores alemanes sobre si el holocausto era una singularidad hist¨®rica. Ahora se repite en Kosovo algo parecido, ?no se exagera?
R.El recuerdo del holocausto no pretende ser una comparaci¨®n, sino una advertencia. El hecho de que los serbios hayan expulsado a todo un pueblo, al 90% de los habitantes de Kosovo, s¨®lo por su pertenencia ¨¦tnica evidencia el fondo fascista de estos hechos.
P.Usted llama criminal de guerra al presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, ?aun as¨ª puede negociar con ¨¦l?
R.Milosevic es un criminal de guerra y su sitio est¨¢ ante un tribunal. Independientemente de aquello a lo que nos obliguen las circunstancias, nada va a cambiar esta opini¨®n, ni veo por qu¨¦ tendr¨ªa que ocultarla.
P.?Cree que fue una equivocaci¨®n negociar con ¨¦l en 1995 en Dayton? R.Merec¨ªa la pena negociar en Dayton. Pero se perdi¨® la oportunidad de dar una soluci¨®n global a los Balcanes.
P.?Es posible entrenar y equipar r¨¢pidamente al ELK para utilizarlo como vanguardia con el apoyo de los helic¨®pteros Apache?
R.Es evidente que el ELK desea algo as¨ª. Sin embargo, no existe una cooperaci¨®n en este sentido entre la OTAN y el ELK. Por lo dem¨¢s, la OTAN se est¨¢ acercando a sus objetivos.
P.?C¨®mo?
R.La movilidad del Ej¨¦rcito yugoslavo est¨¢ limitada, aunque todav¨ªa no se ha quebrado. Y hay movimientos de deserci¨®n.
P.?Hacia d¨®nde?
R.Hacia Bulgaria, hacia Hungr¨ªa, hacia Montenegro. En Yugoslavia hay m¨¢s de cien procesos por deserci¨®n. Sabemos, adem¨¢s, que ciertos cuerpos de las Fuerzas Armadas tropiezan con grandes dificultades para reclutar.
P.En Kosovo puede estudiarse c¨®mo una forma correcta de actuar ha aumentado el sufrimiento. La guerra es una gran aceleradora de la miseria y la expulsi¨®n. R.?Y c¨®mo tiene la certeza de que las cosas hubieran ocurrido de otra forma sin guerra?
P.?Y c¨®mo tiene la certeza de que con la guerra las cosas han ido a mejor? R.La tengo por los preparativos del Gobierno yugoslavo. Desde enero, determinadas regiones de Kosovo se sustrajeron a los controles internacionales y se destruy¨® una serie de pueblos. En febrero se ampli¨® el plan, y en marzo ten¨ªamos ya m¨¢s de medio mill¨®n de desplazados; todo, antes del comienzo de los ataques.
P.?Y c¨®mo rebate la cr¨ªtica de que la acci¨®n de la OTAN ha empeorado todav¨ªa m¨¢s las cosas?
R.Replico que si no hubi¨¦ramos intervenido, Kosovo habr¨ªa sido sometido a la limpieza ¨¦tnica.
P.M¨¢s que ahora parece dif¨ªcil: no quedan m¨¢s que unos pocos albanokosovares en Kosovo.
R.De los 1,7 o 1,8 millones de albanokosovares viven ahora unos 900.000 fuera de Kosovo. Dentro quedan entre 600.000 y 700.000 personas de origen alban¨¦s, de los que la mitad est¨¢n huyendo o no han sido expulsados para utilizarlos como escudos humanos. Desgraciadamente, sabemos poco de la mayor¨ªa de los asesinados.
P.?Los pa¨ªses de la OTAN est¨¢n entrenando tropas para una intervenci¨®n por tierra?
R.En el Ej¨¦rcito alem¨¢n no hay ni planes ni preparativos.
P.O Milosevic cede, o es destituido.
R.La OTAN puede mantener durante mucho tiempo las operaciones a¨¦reas. Y est¨¢ decidida a intensificarlas.
P.?No se est¨¢n quedando poco a poco sin objetivos?
R.No. La defensa antia¨¦rea, las fuerzas a¨¦reas y las l¨ªneas de avituallamiento han sufrido da?os considerables. Pero en Kosovo hay 300 tanques.
P.Milosevic afirma ahora que est¨¢ dispuesto a aceptar una fuerza internacional. ?Un progreso?
R.Examinaremos si Milosevic cumple as¨ª con todas las exigencias de la comunidad internacional. Me temo, sin embargo, que carezcan de aut¨¦ntico contenido.Milosevic juega ahora con Mosc¨² su viejo juego c¨ªnico del enga?o. P.?Excluye entretanto una soluci¨®n pol¨ªtica como la de Rambouillet: autonom¨ªa para Kosovo, garantizada por una presencia internacional liderada por la ONU? R.No acabo de imaginar que Kosovo pueda convertirse en Estado independiente: no ser¨ªa viable, ni econ¨®mica ni pol¨ªticamente. Esa soluci¨®n agudizar¨ªa los problemas de minor¨ªas existentes en todos los Estados balc¨¢nicos. Siempre hemos considerado que la integridad de las fronteras era un requisito para toda soluci¨®n pol¨ªtica.
P.?Y qu¨¦ pasar¨¢ con Serbia?
R.En Serbia existe un potencial democr¨¢tico. Habr¨ªa que apoyarlo mejor que en el pasado.
? Der Spiegel
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