IU acusa al PP de cambiar el D¨ªa de Murcia para que coincida con su mitin

Lo hab¨ªa dicho Julio Anguita, coordinador general de IU, en varias ocasiones. Y ayer en Murcia, los hechos le dieron la raz¨®n. PSOE y PP "han convertido la campa?a electoral en un circo, en una feria a la americana", dec¨ªa Anguita. En Murcia, adem¨¢s, seg¨²n denunci¨® el aspirante a la presidencia regional, Joaqu¨ªn D¨®lera, el espect¨¢culo del PP se paga con dinero p¨²blico. Tres d¨ªas se ha adelantado el D¨ªa de la Regi¨®n de Murcia para que coincidiera con el acto central de la campa?a electoral del PP.

Anoche Murcia se visti¨® de fiesta, que se dice. Fue lo que Joaqu¨ªn D¨®lera llam¨® "espect¨¢culo de luz y sonido pagado con dinero p¨²blico. Un acto a mayor honra y gloria del PP". Y es que anoche se celebraron los fastos del D¨ªa de la Regi¨®n. ?Qui¨¦n puede criticar que coincidieran -cosas que ocurren- con el mitin central de la campa?a electoral murciana? Pues Izquierda Unida.Y es que IU asegura que las coincidencias no existen y que ni siquiera se han guardado las formas: "El D¨ªa de la Regi¨®n es el pr¨®ximo d¨ªa 9, pero se ha decidido trasladarlo a esta noche (por ayer) para que se confundiera con el acto del PP". Entre la confusi¨®n siempre se puede pillar algo.

A Julio Anguita no le habr¨¢ asombrado. Escuch¨® en silencio y con una media sonrisa la denuncia de sus compa?eros. ?l ya ha advertido que los dos partidos mayoritarios, PP y PSOE, tienen tendencia a la charanga, "a convertir las campa?as electorales en una operaci¨®n de m¨¢rketing, en una feria a la americana, sin reflexi¨®n, sin calma. S¨®lo con el insulto como ¨²nica arma".

?l prefiere reflexionar con quienes acuden a sus actos. Sus reflexiones siguen girando en torno a Europa y la guerra de Yugoslavia. Y, aunque es verdad que huye del insulto grueso, a veces se les escapan cosas como que Javier Solana es la "p¨²stula de la enfermedad que afecta a Europa, sin proyecto ni pol¨ªtica exterior". Pero de Europa habla tambi¨¦n para referirse al lino, a las ayudas comunitarias, al proyecto que s¨ª tiene IU. Un proyecto que ayer explic¨® el candidato europeo Pedro Marset.

La propuesta de paz para Yugoslavia tampoco ha modificado su discurso. Anguita est¨¢ convencido de que la OTAN est¨¢ poniendo al pueblo serbio tantas condiciones y tan duras que no podr¨¢ aceptarlas. "Buscan", advierte, "que la gente rechace las propuestas de paz para as¨ª poder seguir con los bombardeos". Est¨¢ convencido de que los Estados Unidos de Am¨¦rica no quieren los Estados unidos de Europa que anunciara V¨ªctor Hugo.

En su ayuda, Anguita llama a Henry Kissinger y su art¨ªculo aparecido recientemente en un peri¨®dico nacional en el que critica la intervenci¨®n de la OTAN en Yugoslavia. Y ahora incorpora al general Charles de Gaulle y a Konrad Adenauer: "?Pronto permitir¨ªan ellos que los americanos les dijesen c¨®mo tiene que ser y qu¨¦ se tiene que hacer en Europa", clama indignado por el ardor europe¨ªsta. Y a?ade refiri¨¦ndose a los actuales mandatarios de la Uni¨®n Europea: "Pero ¨¦stos de hoy no tienen ni dignidad, ni ¨¦tica, ni nada".

Est¨¢ Anguita en tierra de huerta, que sabe lo que son las subvenciones agr¨ªcolas. Como el alcalde de Zalamea, habla - "con much¨ªsimo respeto"- de la Duquesa de Alba y se lamenta: "?Ay!, qu¨¦ pasar¨ªa si un d¨ªa los agricultores supieran que el 80% de las ayudas comunitarias se lo lleva el 20% de los agricultores. ?Ay!, qu¨¦ pasar¨ªa si supieran que la excelent¨ªsima Duquesa de Alba se lleva un past¨®n en subvenciones europeas, que ella y la Reina de Inglaterra se llevan sumas important¨ªsimas en ayudas de la Comunidad". No dio la respuesta y, a diferencia de Pedro Crespo, tampoco pidi¨® m¨¢s para la arist¨®crata. Un detalle.

Pero parece que Anguita clama en el desierto. Las encuestas siguen si¨¦ndole adversas. Malditas encuestas, aunque ¨¦l no crea en sus previsiones. Porque no habla de ellas. No las analiza. S¨®lo hace ver que las encuestas est¨¢n hechas para influir en el votante. Est¨¢n hechas para desviar el voto. No se trata del voto ¨²til. Anguita lo aclara: "Yo no estoy en contra del voto ¨²til. Depende de que sea ¨²til y de para qui¨¦n".

En los ¨²ltimos m¨ªtines, Anguita est¨¢ haciendo gala de un humor socarr¨®n y hasta c¨¢ustico. Dice que se trata de la sorna andaluza. Si ¨¦l lo dice... Pero es un humor con su punto de veneno. Cuando pide, por ejemplo, el voto a los sindicalistas y trabajadores: "Qu¨¦ tiempos ¨¦stos en los que uno ha de pedir el voto a los sindicalistas... Pero, as¨ª es. Tengo que pedir una cosa tan obvia. Reclamar algo que tendr¨ªa que venir por s¨ª mismo. Ya digo, c¨®mo est¨¢n los tiempos", se lamenta. "Y que conste", a?ade, "que ¨¦sta es la ¨²nica fuerza que ha estado con vosotros, en la calle, a vuestro lado".

El voto de los periodistas

Bromea tambi¨¦n con el "voto de los intelectuales". Pero es un amargo bromear. Les recuerda que la inteligencia ha estado siempre contra el poder, que siempre ha estado con el pueblo, contra la guerra. "?En qu¨¦ pens¨¢is ahora?", les pregunta. Reclama el voto de los dem¨®cratas, de los que dijeron no a la OTAN, de los abstencionistas. Y, el otro d¨ªa, se lo pidi¨® a los periodistas que segu¨ªan su intervenci¨®n: "Y vosotros tambi¨¦n, compa?eros periodistas, vosotros, mal pagados, con contratos precarios, vosotros manipulados por vuestros jefes, ?qu¨¦ libertad ten¨¦is? ?Qu¨¦ vais a hacer? ?A qui¨¦n vais a votar? Votad a IU, que pod¨¦is hacerlo sin que os vean". Los compa?eros periodistas tomaban nota sin levantar, ni por un momento, la vista del cuaderno.Porque para Anguita todo es el pueblo. Dice: "Somos la gente que ha luchado por la libertad. Somos la gente que nunca claudic¨®. ?se es nuestro orgullo, nuestro timbre de honor, nuestra dignidad". Casi las mismas palabras que cierran el bell¨ªsimo libro Las uvas de la ira: "No podr¨¢n nunca con nosotros. No podr¨¢n destruirnos. Somos el pueblo".