Eixample: inversi¨®n para frenar una suave decadencia
Elementos a favor del distrito del Eixample: una buena red de transporte, un tipo de vivienda m¨¢s grande de lo habitual y un considerable potencial comercial y l¨²dico. En su contra, la p¨¦rdida de poblaci¨®n-25.000 residentes menos entre 1991 y 1996- y el progresivo envejecimiento de la que queda: las personas de m¨¢s de 65 a?os representan el 24,9% del total y la esperanza de vida es de 79 a?os, ligeramente superior a la del resto de la ciudad. As¨ª las cosas, al inicio de este mandato los responsables municipales se pusieron manos a la obra para intentar corregir el proceso hacia la decadencia del barrio. ?C¨®mo? Con m¨¢s inversi¨®n p¨²blica, incentivando la rehabilitaci¨®n de edificios -se?oriales muchos, pero que literalmente se ca¨ªan a pedazos- e interviniendo m¨¢s en la gesti¨®n urban¨ªstica con objeto de conseguir m¨¢s suelo para edificar, para equipamientos y para dar al residente del distrito un respiro de coches: m¨¢s plazas y zonas verdes. La sociedad Proeixample se cre¨® en 1997 precisamente para poner hilo en la aguja de la rehabilitaci¨®n, y dos a?os despu¨¦s es dif¨ªcil pasear por cualquier manzana del Eixample en la que no haya plantado un castillo de tubos para la restauraci¨®n de la fachada de alguna casa. La repetici¨®n de las ca¨ªdas de baldosas o trozos de cornisa con resultados mortales fue la gota que colm¨® el vaso y por eso decidieron extender las inspecciones de todos los edificios antiguos. Resultado: 3.000 fachadas han sido restauradas en dos a?os. Las reformas eran subvencionadas con un 20% de su coste. Este mandato ha sido multimillonario para el Eixample: 20.000 millones de inversi¨®n, algo m¨¢s del 51% procedente del Estado, la Generalitat y la Universidad. Una parte importante fue a parar a la reordenaci¨®n de los espacios que ocupa el peat¨®n, en detrimento del veh¨ªculo, y por eso se ensancharon las aceras de algunas calles, como la de Arag¨®, en las que el coche era el rey. Tambi¨¦n se dio m¨¢s espacio al peat¨®n en otros puntos del distrito, como el paseo de Sant Joan y el Mercat de Sant Antoni. En otros casos se aprovech¨® para redise?ar por entero el espacio p¨²blico, como en la calle de Enric Granados y en la avenida de Mistral. "Es una l¨ªnea de trabajo en la que hay que seguir, por ejemplo, en otras v¨ªas que cruzan en diagonal alguna zona del distrito, como puede ser la avenida de Roma o la calle de los Enamorats", asegura el gerente del Eixample, Joan Albert Dalmau. Otra de las asignaturas pendientes era el disfrute de zonas verdes. El Plan Cerd¨¤ original, adem¨¢s de parques en el interior de las manzanas, preve¨ªa otros en el paseo de Gr¨¤cia y en el de Sant Joan. "Como eso es imposible de realizar hoy en d¨ªa, porque no podemos derribar manzanas enteras de viviendas, tenemos que incidir m¨¢s en encontrar espacios comunes, como peque?as plazas y, sobre todo, el interior de las manzanas", precisa Dalmau. De las cinco plazas que el Eixample ten¨ªa en 1995 ha pasado a 12. El distrito cuenta con otro parque cuya prolongaci¨®n acaba de ser inaugurada, el de la estaci¨®n del Norte. Una de las estrellas de las actuaciones del Eixample ha sido, sin duda, la renovaci¨®n del Mercat de la Concepci¨®, totalmente transformado, que de casi 300 puestos -aunque muchos de ellos estaban cerrados- pas¨® a 60 tras su reforma, pero con una capacidad de atracci¨®n de clientela que se ha expandido a toda la ciudad y poco tiene que ver con la del viejo mercado. Este mandato municipal ha presenciado la transformaci¨®n de la manzana de la verg¨¹enza en el tri¨¢ngulo de oro, un enclave comercial y de ocio en plena plaza de Catalunya que ha reforzado todav¨ªa m¨¢s la oferta del distrito. Tambi¨¦n la apertura del Teatre Nacional y del Auditori trasciende ya las fronteras del Eixample. "Pero seguimos con un d¨¦ficit considerable en equipamientos: escuelas, polideportivos y centros c¨ªvicos", afirma el gerente. "La radiograf¨ªa del distrito no puede ser tan brillante, al menos en la izquierda del Eixample. Empezamos el mandato y lo acabamos con dos elementos que siguen igual: la c¨¢rcel Modelo y el problema de los ruidos en las calles que rodean el hospital Cl¨ªnico", afirma Cosme Sal¨®, de la Asociaci¨®n de Vecinos de la Izquierda del Eixample. Adem¨¢s los vecinos tampoco est¨¢n de acuerdo en que se levanten pisos y oficinas en el solar de la Modelo cuando se libere: "Se tiene que hacer cumplir el plan metropolitano. Es decir: el 80% de la superficie para zona verde y el resto para equipamientos". Como asociaci¨®n de vecinos, reclaman al distrito que se abra a m¨¢s participaci¨®n y que facilite locales: "Nosotros somos 700 socios, la mayor¨ªa jubilados, y tenemos que pagar un alquiler mensual de 248.000 pesetas".
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