Los peritos de Roman¨ª admiten que Air Products contabiliz¨® el pago por Carburos e implican a Conde

Los peritos propuestos por el acusado Arturo Roman¨ª admitieron ayer, tras ver por primera vez, seg¨²n dijeron, el asiento contable, que la multinacional norteamericana Air Products s¨ª contabiliz¨® los 1.344 millones de pesetas pagados en 1990 por unas opciones al 5,9% del capital de Carburos Met¨¢licos que fueron vendidas por Banesto. El dinero nunca entr¨® en el banco ya que fue desviado a Suiza. Los peritos admitieron que Roman¨ª dio las instrucciones para pagar en un banco suizo y, tambi¨¦n, hicieron tres referencias amplias a la participaci¨®n de Mario Conde en la operaci¨®n.

Durante toda la sesi¨®n los tres peritos, con especial preeminencia de Joaqu¨ªn D¨ªez Fuentes, quien estuvo a cargo de las respuestas a las preguntas, defendieron la tesis de los acusados, a saber, que el dinero pagado por Air Products (1.344 millones de pesetas) nunca debi¨® ingresarse en Banesto y que dichos fondos fueron una indemnizaci¨®n o retribuci¨®n en favor del financiero Jacques Hachuel. D¨ªez Fuentes se ci?¨® a un gui¨®n muy sencillo. Air Products pag¨® 1.344 millones a Hachuel por retirar ¨¦ste una amenaza que pend¨ªa sobre Carburos Met¨¢licos, a saber, la existencia de unos warrants emitidos por Banesto en 1989 que daban derecho, caso de ser ejercitados, a un 18% del capital de Carburos Met¨¢licos, empresa de gases y ferroaleaciones. Estos warrants fueron comprados por una sociedad en la que Hachuel participaba (Euris) y m¨¢s tarde, a primeros de marzo de 1990, revendidos a Banesto.

Dicha compra fue pactada desde el comienzo, agosto de 1989, como una operaci¨®n de desestabilizaci¨®n de Carburos Met¨¢licos por Hachuel y Mario Conde a fin de obligar a Air Products, que pose¨ªa un 24,8%, a comprar o asumir de alg¨²n modo esos warrants. Fue una operaci¨®n de greenmailing o chantaje econ¨®mico ideada por los citados Hachuel y Conde. Pero fracas¨®. Air Products no quiso comprar esos warrants.

D¨ªez Fuentes no explic¨® este proceso de desestabilizaci¨®n consciente buscado por Hachuel y Conde. Pero admiti¨® que, en febrero de 1990, Conde particip¨® en las negociaciones para firmar la paz. "Un nuevo esqueleto fue negociado. Banesto ser¨ªa el socio financiero y Air Products el industrial", dijo. Pero para este viaje no se necesitaban las alforjas de los warrants. Es decir, Air Products y Banesto ya eran socios en Carburos Met¨¢licos con anterioridad. Fue el fracaso de la operaci¨®n de Hachuel y Conde lo que abri¨® una nueva fase en Carburos Met¨¢licos. Seg¨²n reconoci¨® por tres veces D¨ªez Fuentes, Conde particip¨® en las negociaciones y sigui¨® los contactos entre Roman¨ª y Air Products.

D¨ªez Fuentes dijo que no exist¨ªa constancia de que Banesto y Air Products hubiesen contabilizado la operaci¨®n. En ese momento Jos¨¦ Rofes, letrado de Roman¨ª, interrumpi¨® espont¨¢neamente y dijo, en referencia a Air Products: "S¨ª, s¨ª". Los peritos se sorprendieron. Es que cuando ellos hicieron, en 1995, su informe, no exist¨ªa en la causa constancia de la contabilidad de Air Products. Los asientos contables fueron enviados en 1998 desde Estados Unidos a petici¨®n de Hachuel.

El letrado de Roman¨ª pidi¨® que se les exhibiese el asiento contable, tanto la versi¨®n manuscrita como la de ordenador. Los tres peritos explicaron que, en efecto, se refer¨ªa a 672.000 acciones (cifra del contrato de opci¨®n que dio lugar al pago de 1.344 millones, precio que surge de computar cada opci¨®n a 2.000 pesetas) y que seg¨²n estaba contabilizado se registraba "como mayor valor de las acciones". A continuaci¨®n, los peritos leyeron un comunicado, a iniciativa del abogado, en el que desde el primer p¨¢rrafo se dec¨ªa que Banesto vendi¨® las opciones a Air Products. Pero el dinero ni lo oli¨®.