Cansados del nueve a cero

Nueve a cero, nueve a cero, nueve a cero. Los dos entrenadores han prohibido el v¨ªdeo como arma preparatoria, pero Viena, la ciudad a la que Espa?a lleg¨® ayer para enfrentarse ma?ana a Austria, no procesa otra cosa que aquel 9-0 del mes de marzo en Valencia. Todo se mira aqu¨ª en funci¨®n de ese resultado que sacudi¨® fuertemente el f¨²tbol austriaco, que marc¨® el fin de un seleccionador, de una generaci¨®n de jugadores, de un ciclo. Ya no estar¨¢ Prohaska en el banquillo, ni Wohlfahrt en la porter¨ªa, ni muchos futbolistas del bando local (a lo sumo dos, seg¨²n los pron¨®sticos), pero todos los comentarios alrededor del duelo de ma?ana est¨¢n de alguna forma vinculados a aquella cita. Y a Jos¨¦ Antonio Camacho, el preparador espa?ol, no le agrada demasiado. Empieza a estar harto: "Aquel partido se acab¨®, ya est¨¢ bien". Camacho rechaza cualquier rasgo de prepotencia en su equipo por aquel 9-0: "No estamos preparados para pensar en por c¨²antos goles vamos a ganar; s¨®lo estamos preparados para querer ganar". Y rebaja tambi¨¦n los comentarios, casi los desmiente, que colocan a su selecci¨®n en un pedestal desde entonces. "No somos equipo para que nos den por favoritos en todos lados", advierte. "O demasiado optimismo aqu¨ª, o demasiada piel de cordero en Austria. Pero no. Como dijo Guardiola, Espa?a no ha ganado nunca nada. Cuando ganemos un t¨ªtulo que nos den por favoritos. Los chicos de las categor¨ªas de abajo ya han ganado, pero a la generaci¨®n del primer equipo le falta haber ganado algo. Hace poco la selecci¨®n era un desastre y ahora parece que vamos a ser campeones de Europa. Y no es eso". No es que mire con recelo hacia el compromiso de ma?ana, pero s¨ª, "sabiendo que no es el partido decisivo (pase lo que pase en Viena, y salvo que Chipre derrote a Israel, a Espa?a le tocar¨¢ disputarse directamente con esta ¨²ltima selecci¨®n la primera plaza del grupo)", Camacho trata de tom¨¢rselo con la mayor profesionalidad posible. Y est¨¢ seguro de que sus jugadores tambi¨¦n: "Si demuestran buena actitud en un amistoso, hasta en un entrenamiento contra un equipo sub-16... Se lo van a tomar en serio, no podemos pensar otra cosa". Por lo que ha visto a Austria ¨²ltimamente, el t¨¦cnico prev¨¦ un rival a la defensiva, "muy reserv¨®n, muy replegado, con muchas precauciones". Y por lo que ha escuchado, sospecha un encuentro muy duro, casi violento. Pero no le preocupa: "El amistoso ante Polonia (1-2, en Varsovia, hace 15 d¨ªas) no fue blando. All¨¢ Austria si se permite el lujo de jugar duro. Me extra?a, porque la FIFA proclama el juego limpio. Otra cosa es que s¨®lo lo diga, pero asustarnos no nos va a asustar". Ese mismo esp¨ªritu es el tratar¨¢ tambi¨¦n de conservar hoy la selecci¨®n sub-21 en Herzogenburg frente a Austria. Cinco victorias en cinco partidos, 19 goles a favor por dos en contra, desautorizan el pesimismo ante un partido que puede garantizarle al combinado espa?ol el pase a la siguiente fase de forma aritm¨¦tica.