Altadis seguir¨¢ con el monopolio de venta en los 50.000 estancos espa?oles y franceses
El presidente de la Uni¨®n de Asociaciones de Estanqueros de Espa?a, Manuel Fern¨¢ndez Vicario, ha manifestado que la fusi¨®n entre Tabacalera y Seita "les llena de satisfacci¨®n". No es para menos, porque la red de 14.758 estancos ha quedado santificada como monopolio de puntos de venta minoristas en la Ley de Ordenaci¨®n del Tabaco aprobada en 1998.Este hecho tiene de u?as a las dos grandes centrales de compras de distribuci¨®n, como son IFA y Euromadi (con unas ventas conjuntas de tres billones de pesetas), que si quieren comprar cajetillas de tabaco para sus supermercados deben ir al estanco m¨¢s pr¨®ximo, para luego venderlo como segundo canal (bares, cafeter¨ªas, restaurantes) con un suplemento en el precio que tambi¨¦n est¨¢ establecido.
Es m¨¢s, si se atienen estrictamente a la ley, una cadena de 100 supermercados debe comprar tabaco en los 100 estancos m¨¢s cercanos a sus centros. Del total de consumo nacional de tabaco, el 50% se vende en los estancos, y el resto, en el denominado segundo canal que se surte de los estancos. Los estanqueros tienen establecido un margen de beneficio del 8,5% sobre el precio final de la cajetilla. La capilaridad (puntos de venta) de toda la red de estancos controlada por Tabacalera por contrato de venta cubre todo el territorio nacional, aunque el 20% de los estancos vende el 80% del tabaco por este canal.
Fern¨¢ndez Vicario recalc¨® que la fusi¨®n se produce entre dos empresas de pa¨ªses en los que existe monopolio en el mercado minorista, como son Francia y Espa?a. Francia tiene 34.000 estancos. Italia tambi¨¦n tiene el mismo modelo.
La distribuci¨®n mayorista est¨¢ liberalizada desde el a?o 1986. Sin embargo, hasta 1995, el Gobierno no aprob¨® una licencia para que una empresa compitiera con Tabacalera. Hoy existen cuatros empresas en este sector y dos apenas operan. En fabricaci¨®n tambi¨¦n est¨¢ liberalizado, pero en la pr¨¢ctica s¨®lo Tabacalera fabrica cigarrillos, bien con marcas propias, bien con licencia, como son los casos de Philip Morris y RJ Reynolds. Estos acuerdos de fabricaci¨®n no cambiar¨¢n, seg¨²n afirm¨® C¨¦sar Alierta. Son las reminiscencias de 360 a?os de monopolio que dejan privilegios, seg¨²n reconoc¨ªan ayer empresas distribuidoras de tabaco en el mercado espa?ol.
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