El GIL prepara su refundaci¨®n como partido municipalista tras el 'abandono' de su l¨ªder
Cuando Jes¨²s Gil anunci¨® el 4 de noviembre que el Grupo Independiente Liberal (GIL) se retiraba de la primera fila pol¨ªtica y renunciaba a presentar candidaturas a las elecciones generales y a las auton¨®micas andaluzas sembr¨® el desconcierto en sus huestes, que se apresuraron a tomar posiciones. Los mejores colocados, el presidente de Ceuta y el alcalde de La L¨ªnea (C¨¢diz), han apostado por un congreso de refundaci¨®n para "normalizarse" como partido municipalista desde las ciudades donde gobiernan. Otros, como los gilistas de Melilla, se han redefinido como localistas y han logrado entrar en el Gobierno aut¨®nomo. Y otros, los menos, sencillamente han abandonado el barco.
El mero anuncio del abandono de Gil ha tenido un efecto bals¨¢mico sobre el partido que a¨²n preside. Aseguran los gilistas que han notado que se ha aflojado la presi¨®n sobre el GIL y que algunas formaciones que les negaban el pan y la sal ahora dialogan con ellos. En esta tesitura, los que con m¨¢s seguridad encaran el cambio son el presidente de la Ciudad Aut¨®noma de Ceuta, Antonio Sampietro, y el alcalde de La L¨ªnea (C¨¢diz), Juan Carlos Ju¨¢rez. "Si Gil se retira a Marbella, se abre la puerta a que gente con nuevos aires tome las riendas del partido en un congreso, que ser¨ªa de refundaci¨®n", asegura Sampietro, que se postula como l¨ªder del futuro GIL.La refundaci¨®n se llevar¨ªa a cabo siempre y cuando Jes¨²s Gil abandonase efectivamente la presidencia, lo que no est¨¢ tan claro. "Yo no me he retirado; el GIL es el GIL y el GIL soy yo", asegura el alcalde de Marbella, quien s¨ª reconoce que la dimisi¨®n de su hijo, Jes¨²s Gil Mar¨ªn, de la secretar¨ªa general, y el abandono de Jos¨¦ Ignacio Crespo, candidato a la Junta de Andaluc¨ªa y n¨²mero tres de la formaci¨®n, obliga a convocar un congreso "para nombrar un nuevo secretario general y hacer algunos cambios".
Esta postura del fundador del GIL lleva a Ju¨¢rez a hablar con cautela. "El presidente sigue siendo el presidente, pero si dimite hay que tener claro que el GIL es m¨¢s importante que Jes¨²s Gil y su hijo, porque hay una base popular". En ese caso, un congreso -queda por decidir si antes o despu¨¦s de las generales- "deber¨ªa ser refundacional, constituyente, una vez roto el cerco antigil". Y si hay que proponer personas para renovar la direcci¨®n, se?ala: "Sampietro tiene un cargo muy relevante".
El pr¨®ximo jefe de filas
El propio Sampietro, igualmente con cautelas, tambi¨¦n se ve en esa posici¨®n. "Todo apunta a que en ese congreso ser¨¦ yo el que salga como jefe de filas del GIL, aunque dejo la decisi¨®n en manos del partido", alega el presidente ceut¨ª. Crespo, por su lado, considera "desafortunada" la toma de posici¨®n de Ju¨¢rez y Sampietro.Sampietro y Ju¨¢rez tienen claro que el alcalde de Marbella seguir¨ªa siendo su referente e incluso que podr¨ªa permanecer "como presidente de honor". O como lo explica el consejero de la Presidencia de Ceuta, Manuel de la Rubia, ex miembro de Alianza Popular: "No podemos perder el referente de Gil, como el PP no ha perdido a Manuel Fraga como referente; la historia no se puede olvidar". De la Rubia cree que el partido deber¨ªa reconstruirse como "fuerza municipalista, con planes de expansi¨®n de Despe?aperros para abajo, aunque con vocaci¨®n nacional y sin olvidar que el GIL se presenta como un equipo de gesti¨®n municipal".
En el camino hacia esa hipot¨¦tica refundaci¨®n incluso se han barajado nuevos nombres del partido, que ya se han descartado: Partido Independiente Liberal (PIL) o Partido Liberal Progresista (PLP). "Que no me toquen ni una coma del nombre", resume Crisp¨ªn Lozano, el n¨²mero uno del GIL en Melilla, el sentir de la mayor¨ªa de la formaci¨®n. "Ser¨ªa un fraude para nuestros votantes, que apoyaron un sello electoral", agrega De la Rubia.
Y mientras los mejores colocados encaran la refundaci¨®n, cuatro de los 93 concejales del GIL se han marchado al grupo mixto en estas tres semanas. Dos en Mijas y dos en Ronda (M¨¢laga). El grupo ya hab¨ªa perdido en septiembre, por el mismo m¨¦todo, a su ¨²nico concejal en Benalm¨¢dena. El propio Crespo, teniente de alcalde de Estepona con Gil Mar¨ªn, ha optado por dejar un partido que considera "ni activo ni disuelto, s¨®lo en suspenso" y dedicarse a sus negocios.
Entretanto los profesionales madrile?os reclutados por Jes¨²s Gil Mar¨ªn para las elecciones de junio han empezado a desertar. El ¨²ltimo en irse, la semana pasada, ha sido el candidato fracasado a la alcald¨ªa de San Roque (C¨¢diz), Carlos Santos. Pero antes hubo bajas en las localidades malague?as de Manilva, Mijas y Benalm¨¢dena. En esta ¨²ltima el yerno del jefe, Eduardo de las Heras, fue el primero de los fugados: no fue jam¨¢s por el Ayuntamiento. La principal actividad del GIL desde el anuncio de su fundador ha sido la de cancelar los contratos para disponer de locales en C¨®rdoba, Granada, M¨¢laga y V¨¦lez-M¨¢laga para la campa?a electoral e intentar atar a los desmotivados y desconcertados.
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