Los n¨²meros avalan las quejas de la plantilla por los remates

Remate fuera, el bal¨®n rebota en un defensa, gol, fuera, fuera, fuera, fuera, fuera, fuera, para el portero, rebota, para el portero, fuera, rebota, fuera... La secuencia de los disparos del Atl¨¦tico en el partido de ayer se recita as¨ª. A la vista de los n¨²meros, los futbolistas del Atl¨¦tico ten¨ªan raz¨®n cuando se quejaron de los entrenamientos de Ranieri, cuando lamentaron que con las sesiones del italiano pierden punter¨ªa. Y la pierden, seg¨²n dicen, porque no ensayan suficientemente los disparos. Dec¨ªan que luego, llega el partido, y la cuesti¨®n no les sale. La evidencia les ampar¨® ayer en El Sardinero: el Atl¨¦tico remat¨® 14 veces, de las cuales envi¨® s¨®lo tres balones entre los tres palos -uno fue el gol de Roberto-. Ocho se marcharon fuera, a la grada en la mayor¨ªa de los casos. De los 14 remates del Atl¨¦tico, s¨®lo cuatro se ejecutaron desde dentro del ¨¢rea del Racing. El dato demuestra las dificultades del Atl¨¦tico para trenzar jugadas de gol. De hecho, en sus entrenamientos, Ranieri recomienda disparar a la primera. "?Tira, tira...!", vocifera cada vez que un jugador recibe un bal¨®n en la frontal, durante un partidillo.

Frente al Racing, el Atl¨¦tico fue inferior en punter¨ªa y en poder de fuego. Su rival dispar¨® m¨¢s veces, 17. Y la mayor¨ªa de sus tiros -nueve- partieron del ¨¢rea de Molina. Casi siempre despu¨¦s de una jugada por la banda y un centro a la olla -generalmente de Munitis-. El Racing se acerc¨® m¨¢s al objetivo para efectuar los disparos y su punter¨ªa aument¨®. Si el Atl¨¦tico s¨®lo envi¨® tres balones entre los tres palos, el Racing meti¨® siete.

El equipo m¨¢s goleado

El portero racinguista hizo dos paradas. Molina se estir¨® cinco veces para evitar cinco goles. Dos de ellas, en un mano a mano con Amavisca y Salva. Le sirvi¨® de poco. Ayer su equipo se convirti¨® en el m¨¢s goleado de Primera.